La Modista {Danganronpa x tu x Saiki k}

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Venus se encontraba relajada en el sofá de la zona de descanso de su taller, disfrutando de un breve momento de calma en medio de su ajetreada jornada creativa. Tsumugi, siempre atenta y considerada, le había traído un refresco y algunos snacks para que pudiera tomar un descanso y reponer energías. Aunque Tsumugi había tenido que irse poco después de dejarle los tentempiés, Venus se sentía agradecida por el gesto amable y por la tranquilidad que el espacio le proporcionaba.

Con los pies descalzos y una comodidad que solo se siente en el propio espacio de trabajo, Venus se acomodó mejor en el sofá, rodeada de bocetos y materiales de diseño. Tenía frente a sí un gran bloc de dibujo donde comenzaba a dar vida a una nueva creación: un vestido de fiesta blanco, diseñado para capturar la esencia del glamour y el brillo que cualquier evento de gala merecía.

El vestido que imaginaba sería de corte elegante, sería un vestido pegado que llevaría una enorme sobrefalda. Pensaba en adornarlo con delicadas aplicaciones de cristal y quizás algunos toques de lentejuelas sutiles para captar la luz con cada movimiento. La tela principal sería satén o tal vez seda charmeuse, algo que fluyera y añadiera un aire de sofisticación y misterio.

Mientras trazaba las líneas del diseño, Venus visualizaba cómo cada elemento se uniría para crear no solo un vestido, sino una declaración de moda. Cada curva y detalle añadido tenía la intención de ensalzar la belleza natural de quien lo llevara, haciendo que se sintieran no solo vistos, sino también inolvidables.

Sumida en su proceso creativo, Venus se dejaba llevar por la música que llenaba suavemente el espacio, una lista de reproducción cuidadosamente seleccionada que siempre la ayudaba a mantenerse inspirada. La melodía fluía a través de ella, impulsando cada trazo de su lápiz, cada idea que plasmaba en el papel.

Este vestido no era solo otra pieza en su portafolio; era un desafío personal para superar sus habilidades y mostrar la evolución de su estilo como diseñadora.

-Hmmm creo que así está bien-

-Creo que así está bien- Se dijo así misma, voy a empezar a hacer los patrones- Hmm tal vez vaya a beber agua antes y a revisar mis redes-

Justo cuando Venus se levantó de su asiento, preparándose para estirar las piernas y quizás tomar un breve descanso de su intensa sesión de diseño, la puerta de su taller se abrió de golpe. Instintivamente, dirigió su mirada hacia la entrada, y sus ojos se iluminaron de inmediato con una mezcla de sorpresa y admiración.

En el umbral se encontraba Divus Crewell, una figura icónica en el mundo de la moda y un ex-alumno de Kibougamine que había llevado el título de "Modista definitivo" durante su estancia en la academia.

Venus había seguido su carrera con devoción, maravillada no solo por sus habilidades como diseñador sino también por su audaz estética que había revolucionado la industria de la moda.

Divus era imponentemente alto, con un distintivo cabello teñido mitad blanco y mitad negro, lo que le daba un aire de misterio y distinción. Siempre vestido impecablemente, aquel día no era la excepción; lucía uno de sus llamativos trajes a medida complementado con un hermoso abrigo de piel que destacaba su presencia elegante y comandante. Era el fundador de "Dual Rebel", una marca conocida por desafiar las convenciones y mezclar contrastes en maneras que capturaban la imaginación del público y la crítica por igual.

-¿Así que tú eres la cachorrita de la que tanto me han hablado? Es un placer finalmente conocerte en persona- Dijo Divus con una voz suave pero firme que llenó el espacio. Su tono era amable, pero llevaba la confianza de alguien que había dominado su oficio-

Venus, momentáneamente sin palabras, rápidamente se recuperó y extendió su mano, emocionada por la oportunidad de conocer a uno de sus ídolos.

-El placer es mío, señor Crewell. So-soy una gran admiradora de su trabajo- Respondió ella, tratando de mantener la compostura a pesar de la emoción que sentía por dentro-

Divus sonrió, aceptando su mano con un apretón firme.

-He oído muchas cosas buenas sobre ti y tu trabajo aquí en Kibougamine. Tu dedicación y tu estilo único han llamado mi atención. Estaba en la zona y pensé en visitarte personalmente para ver tus creaciones-

El corazón de Venus latía con fuerza, emocionada por el reconocimiento y la oportunidad de mostrar su trabajo a alguien a quien tanto admiraba.

-¡Po-por supuesto, sería un gran honor!- Exclamó Venus emocionada-

Le invitó a recorrer su taller, mostrándole algunos de sus diseños más recientes, incluido el vestido de fiesta blanco que estaba desarrollando.

Divus examinó cada pieza con un ojo crítico pero apreciativo, haciendo comentarios y preguntas que reflejaban su profundo conocimiento y pasión por la moda.

-Tienes piezas bastantes increíbles para tu edad, yo al empezar entre como el sastre definitivo- Explicó el-

-No sabía que usted fuera sastre, aunque soy una gran fan suya- Dijo Venus sonriente- E-estoy trabajando en este vestido nuevo-

-Es lindo ¿Vas a coser la pedrería a mano?- Venus asintió- Pues vas a tener mucho trabajo por delante cachorrita-

-Lo se-

-Hmm oye te gustaría venir a visitarme a Francia, te enseñaré mu taller-

-¿Ir a Francia? ¿Así como así?- Pregunto Venus- Pe-pero-

-Hablare con Kirigiri no te preocupes, creo que tienes mucho talento querida y siendo una cachorrita tan brillante tienes que aprender de alguien que alguna vez estuvo en tu tesitura- Dijo Divus-

-¿De verdad?- Venus sonrió-

-Cuando estaba en tus zapatos no teníamos laboratorios del talento tenía que conformarme con mi casa pero se nota tú trabajo-

-Mu-muchas gracias señor ¡N-no lo defraudaré!-

Hola UwU

¿Les gustó?

Espero que sí

Gracias por leer

Bye bye