¿Qué debo hacer si me siguen f*llando duro en mis sueños?

Capitulo 24 FIN

Al pasar por una tienda para adultos, Pei Jun dudó por un momento pero terminó entrando. Era la primera vez que compraba artículos tan íntimos, por lo que se sentía bastante tímido.

Ah, esa tanga, cómprate una. Esa cola de zorro, cómprate una. Y ese pene falso, compra, compra, compra. Al final, Pei Jun compró una bolsa entera llena... Se sentía un poco pervertido.

Wang Ziming ya había preparado la habitación y se había dado una ducha, esperando impacientemente a Pei Jun en la cama.

Wang Ziming estaba empezando a pensar en encontrar algo con lo que darse placer cuando finalmente llegó Pei Jun.

Corrió hacia la puerta, la abrió y le plantó un beso en la cara a Pei Jun.

"¿Por qué fuiste tan lento?" Wang Ziming se quejó con el rostro sonrojado, mirando la bolsa grande en las manos de Pei Jun. "¿Que es todo esto?"

"Por supuesto, son cosas buenas". Dijo Pei Jun misteriosamente, caminando hacia el lado de la cama y vaciando el contenido de la bolsa.

Oh...

Huevo vibrador, varita de masaje, tanga, látigo pequeño, cola de zorro, collar y varios aceites desconocidos...

Con un montón de cosas tan grande, le daba vueltas la cabeza. Fue tan embarazoso...

"Puedes jugar con ellos un rato, yo iré a darme una ducha primero". Pei Jun rápidamente se quitó la ropa y corrió al baño.

Wang Ziming estaba a punto de decir que no necesitaba ducharse, pero Pei Jun fue demasiado rápido. Mirando el montón de cosas sobre la cama, ¿podría ser que realmente tuviera que tomar el asunto en sus propias manos?

Su ano ya estaba empezando a picarle y a gotear de anticipación. Tenía muchas ganas de llenar ese vacío con algo.

Wang Ziming miró hacia el baño, donde se podía escuchar el sonido del agua corriendo. No podía esperar más, ¿verdad?

¡Olvídalo! Wang Ziming decidió subirse a la cama, abrió con entusiasmo el paquete de la varita de masaje, abrió las piernas y se acostó.

Tan pronto como lo encendió, la varita de masaje zumbó y Wang Ziming la colocó tentativamente contra su entrada.

"Mmm... Ah..."

Al principio, fue sólo una sensación de hormigueo, pero las vibraciones de alta velocidad de la varita de masaje hicieron que su entrada cobrara vida. Chupó con fuerza, empujando con fuerza la varita hacia adentro.

"Mmm... Ah... Se siente tan bien... Mm... Qué increíble..." Wang Ziming sintió como si hubiera ganado el premio gordo y empujó con fuerza la varita hacia adentro, arqueando su cuerpo de placer hasta que estuvo completamente insertada.

"Ah... Tan profundo... Mm..." Wang Ziming no pudo evitar gemir, abriendo sus muslos y empujando rápidamente contra su propia entrada.

Estimuló vigorosamente su punto sensible, levantando sus caderas y retorciéndose como una serpiente vivaz.

Su entrada goteaba con sus propios fluidos, el sonido era vergonzoso, mientras la varita vibratoria zumbaba dentro de su cuerpo, moliéndolo y estimulándolo, enviando ondas de placer directamente a su cerebro.

Sacudió la varita en su mano, instantáneamente haciendo que su entrada hormigueara, causando que su carne sensible convulsionara y liberara aún más fluidos. Capa tras capa de placer lo invadió, haciéndolo incapaz de controlar sus fuertes gritos.

"Ah... Se siente tan bien... Ah... Picazón... Mm... Quiero... Mm..." La mano de Wang Ziming vagaba por su cuerpo, como un hada lujuriosa, retorciendo su cuerpo, frotando sus pies contra su trasero, y sus dedos se curvaban y estiraban continuamente.