OO6. Trato hecho.

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—¡¿Estás es Arizona?! ¡¿Qué demonios haces en Arizona, cabrón?! — la voz de Douglas resonó en todo el taxi, Justin gruñó.

—Espero que Ojos de esmeralda no esté ahí...

—¿Escuchando mi jodido vocabulario? ¡Púdrete! No, espera... ¡Ven aquí ahora mismo!...pero... ¿Qué haces aquí? — no sabía si la voz de Douglas era de enojo o emoción, pero toda su reacción le causó gracia.

Miró la ciudad de Phoenix a través del vidrio y sonrió con nostalgia.

—La abuela estaba de cumpleaños, mamá sintió que estaba mal si no asistíamos a su cumpleaños número ochenta.

—¡Bendita sea la vejez de tu abuela! — No pudo evitar reír por su entusiasmo, Douglas contento era como un niño de cinco años con un nuevo juguete — ¿Tu abuela no vive en Glendale? — sonrió lentamente antes de responder.

—Y Glendale está a sólo 10 millas de Phoenix, Douglas. —Escuchó como al otro lado de la línea él contenía la respiración —. A mamá no le pareció mala idea dejarme venir por un día.

— ¿Estás en Phoenix? — La voz de su mejor amigo apenas se escuchó por la sorpresa —. No juegues conmigo, cabrón.

—Estoy en la puerta de tu casa en veinte minutos.

Le respondió eufórico y comenzó a contarle sobre montones de chicas buenísimas que había conocido en la Universidad, pero desde que la palabra "chicas" salió de la boca de Douglas, Justin solo pudo pensar en una cosa, o mejor dicho, en una sola persona.

¿Debía preguntarle por ella?

¿Era necesario desviar la conversación a ese tema?

Sintió una necesidad enorme de preguntarle si ella estaba en casa, cómo estaba, qué había de nuevo en su vida...o quién. Quería verla con tanta desesperación, quería escuchar su voz... quería ver como sus hermosos ojos verdes se iluminaban de felicidad al verlo, estaba desesperado por abrazarla y memorizar cada rasgo de su rostro después de ocho años que no la veía y...

— ¿Justin? ¿Estás escuchándome?... ¿Justin?...maldito hijo de puta, ya sé por qué me ignoras, la respuesta es no. — La voz de Douglas sonó irritada.

—No te he preguntado nada. — Trató de disimular, pero sabía que había sido atrapado.

—Sí, claro que lo has hecho. — gruñó —. Mierda, estás jodido por mi hermana, ¡Mi hermana menor! Casi puedo escucharte pensar "¿Cómo se verá Ojos de esmeralda? ¿Ojos de esmeralda estará pensando en mí? Me gustaría saber si a Ojos de esmeralda todavía le gusta el pan..." maldito desquiciado. — suspiró con aire derrotado —. Está en una fiesta, Justin. Tengo que ir a buscarla a las doce, la princesa es toda una cenicienta y me han convertido en el chofer de una niña de dieciocho años ¿Debo repetir eso?

—Douglas, sé cuántos años tiene. — Que él le recordara la edad de Ojos de esmeralda le tocó la fibra sensible, pero... ¿Por qué?

—Oh, bueno, te recordaré tú edad entonces. — Entonces empezó a gritar —. TIENES VEINTIDÓS AÑOS, VAS A LA UNIVERSIDAD ¿POR QUÉ NO DEJAS DE PENSAR EN MI HERMANA MENOR? Creo que mi sueño de tener un mejor amigo con el cual hablar de chicas nunca se cumplirá.

—Hablas como si estuviera obsesionado con ella, la veo como si fuera mi propia hermana — ¿Por qué todo sonó cómo una gran mentira?

—Bueno al menos ella sí que está obsesionada contigo. Dios, no. Está enamorada de ti — su dedo índice trazó un lento camino por su labio inferior de forma pensativa y una ligera sonrisa salió de la comisura de sus labios.

—Estás delirando — ¿Por qué lo dices mientras sonríes, imbécil? Se regañó a sí mismo.

—Sabes que es cierto.

—Quiero ir a recogerla contigo. — No iba a seguir fingiendo, ojos de esmeralda era en lo único que podía pensar.

—Sabía que esto venía en camino. ¿Sabes qué? Puedes quedártela si quieres, Dios sabe que ella estaría más que dispuesta a irse contigo a cualquier parte. Además tengo que salir, nos reuniremos en casa. — Pudo imaginársela perfectamente, ella corriendo hacia él con su brillante sonrisa. Perfecto.

—Trato hecho.

Solo quería verla.

Mirarla al menos un segundo y estaría feliz.

**

— ¿Kori? ¿Has visto a Skylar? Douglas va a venir a buscarla en cualquier momento. — Camille miró por todos lados, pero la casa estaba colmada de gente y la música estaba demasiado alta.

— ¿Douglas? ¿Douglas Stonem? ¡¿Él bombón de los ojos azules que iba a nuestra escuela?! — Kori dejó su vaso de cerveza en la mesa y se arregló el cabello —. Necesito ir a retocarme el maquillaje.

— ¡Kori! ¡Concéntrate! ¿Dónde está Skylar? — le gritó por encima de la música.

— ¡Hey! ¿Quién es la loca borracha que está a punto de tirarse a la piscina? — Maxon apuntó hacia el patio trasero.

Camille se giró y vio, por el ventanal de la casa, la piscina de Maxon y... a una castaña con vestido blanco a punto de saltar.

— ¡Skylar! Mierda.

MEMORIES ©Where stories live. Discover now