Recompensa.

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Capitulo Veintiuno: 

Mientras el cielo se va tiñendo de distintos tonos anaranjados y rosados, y el sol baja para esconderse entre las montañas; recuesto mi mejilla en la rodilla de Justin sentado un escalón por encima de mi en el poche trasero y suspiro mientras el toma mis manos y las acaricia con delicadeza. 

El ambiente estaba cargado de pura tranquilidad, con ese aroma a tierra y hierva de Montana, y el presentimiento que después de tanto tiempo las cosas se acomodaban correctamente y andaban bien. Finalmente todo estaba bien. Finalmente me sentía en casa y finalmente estaba Justin sosteniendo mi mano mientras en silencio vemos el atardecer. 

Los segundos fueron lentos pero dulces como los dedos de Justin recorriendo mis nudillos y las mariposas en mi estomago. El cielo fue un silencioso espectáculo que nos hizo suspirar hasta que poco a poco la noche llego y los grillos comenzaron a cantar. 

Entonces senti a Justin besar lo alto de mi cabeza y susurrarme que era hora de entrar pues comenzaba a hacer frío, sin embargo, yo no me moví; me quede en el mismo lugar en la misma posición con los ojos aun a lo lejos. 

—¿_____?— dijo Justin. 

—No quiero que esto termine... no te muevas. 

El se inclino hacia enfrente rodeando con los brazos y protegiendo me del aire con su cuerpo. 

—No terminara, solo continuara adentro de la cabaña, donde los niños y tu no se enfermaran.— deposito un corto beso en mi cuello y yo ronronee.— Vamos, amor. 

—De acuerdo— suspire resignada y aguarde a que Justin se levantara y me ayudara a mi y a la carga extra a levantarnos. 

sin soltar mi mano me guío hasta el interior, donde la chimenea había calentado las habitaciones. Al cruzar las habitaciones hasta las escaleras me percate de que todo parecía diferente a la ultima vez que había estado ahí y no era el hecho de que Sarah se había marchado, creía mas bien que se trataba de que Justin había regresado. Tenerlo ahí me llenaba de vida, que sostuviera mi mano que besara mi frente o mis labios... me hacia sentir feliz como hace meses no era y eso hacia que viera todo de mejor forma. 

Todo el camino del hotel a la cabaña la había pasado pensando en todo lo que había sucedido y donde ahora nos encontrábamos y mi respuesta fue clara; nos encontrábamos donde la vida nos había llevado, donde yo seria madre, donde tendría gemelos, los hijos de Justin y en donde ahora seriamos una familia; tenia una familia. Por primera vez en mi vida tenia mi propia familia. 

Mi aqui y ahora; era mi familia. 

—¿En que piensas?— cuestiono Justin una vez entramos a la habitación y había cerrado la puerta tras sus espaldas. 

Deje que me llevara hacia su cuerpo y me rodeara hasta que nuestros labios casi se encontraron. 

Mi espina dorsal siento una fuerte corriente eléctrica cuando mi barriga se encontró con su abdomen y sus hijos se movieron en mi interior. 

—En que; tu estas aquí y que ahora tengo una familia. 

Trague saliva. 

—¿Y te gusta la idea?— Justin llevo su mano hacia la parte trasera de mi cuello y formo círculos poniendo de punta a mi cuero cabelludo.— De que tu... y yo... y nuestros hijos seamos una familia... 

—Me encanta— sonreí y me incline para besarlo.— Me encanta. 

Esa noche dormi envuelta en el calor que el cuerpo de Justin emanaba con nuestros cuerpos pegados el uno al otro y un nudo en la grata que se fue aligerando cuando Justin poso su mano celosamente sobre nuestros hijos. 

Everything i didn't say [VSG BOOK#2] #Wattys2015Donde viven las historias. Descúbrelo ahora