Colores.

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Capitulo Veintiséis

Tan pronto como se me rompió la fuente, todo comenzó a correr en cámara lenta. Mamá llamo a Justin, mi respiración se aceleró ante la confusión. Mamá volvió a llamar a Justin esta vez agregando que la fuente, lo que fuera la fuente, se me había roto, como fuera como era posible que una fuente se rompiera en mi interior. Los pasos acelerados de Justin se escucharon por las escaleras y entonces ¡Bom! No hay mejor forma de describirlo, un horrible dolor en el vientre me hizo gritar como una cría.

Quise vomitar.

Justin llego a la cocina junto a su madre y sorprendido pregunto a mamá como era eso posible. "Es posible" dijo en voz mandona mientras me ayudaba a mantenerme de pie. Ambos estábamos tan asustados y sorprendidos como un par de adolescentes podrían estarlo en ese momento, quizás esa es la principal razón por la que nuestras madres terminaron por hacerse cargo de la situación. 

Pattie le pedía las llaves de la camioneta a Justin mientras le ordenada ir por la maleta que habíamos preparado a la habitación y mamá me llevaba del brazo hacia la puerta mientras yo trataba de soportar las oleadas de dolor que venían a mí y la vergüenza de caminar con aquella ropa mojada.

No, nada es como en "Que esperar cuando se está esperando".

Cuando llegamos al coche estaba tan mareada que agradecí el poder sentarme y recargar de la puerta de la camioneta. Aparte de no entender cómo es que aquello estaba sucediendo, en mi cabeza no cabía una cosa... los niños estaban por nacer.

Aterrada vi a Justin que subió a mi lado. Abrazaba la pañalera en tonos azulados bebe. Cuando nuestros ojos se encontraron me sonrió de tal forma que lo supe; todo iba a estar bien. ¿No? Me sostuvo la mano e incluso aguanto los apretones que le proporcione al volver a sentir dolor.  

Mamá condujo la camioneta mientras Pattie se sentó junto a nosotros y constantemente me decía que respirara "Inhala, exhala, inhala, exhala" repetía haciendo ademanes de hacerlo. 

¿Se supone que eso ayudara?

Justin:

Mierda. Mierda. Mierda. Mierda. Mierda.

De acuerdo Justin, concéntrate. No puedes perder la cabeza... por más increíble que esta situación pareciera. _____ puede perder la cabeza, a ella se le tiene permitido porque... va dar a luz... mierda. Mierda. Mierda.

Respira.

Estas preparado para esto. Quieres esto. Mierda, definitivamente lo quiero, mis hijos...

Mis hijos.

Iba a ser papá.

La cabaña esta alrededor de 30 kilómetros de distancia del pueblo, pero con Christina Kennedy se hizo apenas unos minutos. O al menos yo lo sentí de tal forma. En un segundo estaba saliendo de la cabaña y al otro la madre de _____ derrapaba en la acera frente al pequeño hospital de Sellaville y todos estábamos bajando de esta.

_____ se encargó de que nuestra llegada al lugar se anunciara por cada una de las paredes, pues supuse tuvo una contracción y grito lo más parecido a una grosería. Aquello tuvo su lado bueno, las enfermeras y doctoras pronto vinieron a nosotros y _____ fue ingresada a una de las habitaciones.

______: 

--¿Cómo que la doctora Walker no esta?—gruñí sentada en la camilla de aquella habitación. Habían cambiado mi vestido arruinado por un camisón con un horrible estampado de flores y aunque se podría decir que estaba más cómoda los dolores estaban incrementándose y llegando con mayor frecuencia.

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⏰ Terakhir diperbarui: Jun 16, 2018 ⏰

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Everything i didn't say [VSG BOOK#2] #Wattys2015Tempat cerita menjadi hidup. Temukan sekarang