Capítulo 5

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La situación se ponía así: un salón en donde un Will confundido y desesperado era acorralado por un montón de personas, en su mayoría femeninas, que no dejaban de atormentarle con preguntas como "¿desde cuándo eres un chico sensible?" o "¿por qué siempre te mostraste tímido ante todos? ¿Eres tímido?". Y también en la escena se encontraba un Hannibal misteriosamente enfadado, observando y escuchando todo meticulosamente, tomando notas mentales.

Will estaba en una situación desesperada, tenía que pedir ayuda y eso hizo. Empezó a mirar fulminantemente a Hannibal, suplicando piedad. Hannibal, por otro lado, estaba en un caos mental:

-Hannibal, te está mirando con ojos de cachorrito- dijo el lado probablemente piadoso.

-No, Hannibal, déjale solo para ver qué hace. Tienes que continuar con tu investigación- instó el lado racional.

-¡No le hagas caso a ese pensamiento! ¡Mira esos ojos! ¿No te impulsan a querer socorrerlo?-continuó el otro.

-Shhh... Sólo mátalo y ya no tendrás que salvarlo, ni estudiarlo, ni ver sus ojos- dijo una parte que fue automáticamente borrada. Qué raro.

-¿Qué es más importante, Hannibal? ¿Will?- hizo reflexionar la parte racional -¿O acaso tu futuro?- continuó -¡Piensa! ¿Will o tu futuro?-

-Tu futuro, ¿no es cierto?- la parte fría de Hannibal sonaba muy convincente.

Otra vez esa mirada, esta vez el castaño estaba ligeramente ruborizado.

<<Maldita sea>> pensó el rubio.

-Cierto, necesito mostrarte algo en la biblioteca- Lecter al fin pudo soltar palabras. Ante esto, Graham notó las intenciones de salvarlo y le siguió el juego. No le importó que el profesor pueda llegar en cualquier momento. No le importó el que puedan faltar a clases. Sólo quería salir de allí.

-Vamos- El chico rubio le tomó de la mano y le arrastró por los pasillos, hasta subir por las escaleras y llegar a una sala llena de estanterías (esas en las que hay esas escaleras que se corren para poder alcanzar los libros que están muy altos) y pisos tapizados de azul. No había nadie, o bien estaban todos en clases o bien a nadie le interesaba estudiar. Ahora estaban solos.

-Tú... Hannibal...- el castaño había vuelto a la realidad y recordó que la persona que estaba frente a él era el causante de todo.

-No, Will, tú me vas a escuchar- de pronto el otro había tomado una posición desafiante, pero, ¿por qué estaba enfadado?

Había acorralado al chico en una de las estanterías, tanto así que el que estaba siendo amenazado tuvo que aferrarse con ambas manos a las escaleras que estaban detrás.

-¿Por qué estás enfadado?- se atrevió a decir. Ante esta pregunta, ni siquiera el futuro psiquiatra sabía qué responder.

-Primero que todo, no estoy enfadado, estoy decepcionado- se inventó -Hice esto porque es parte de las terapias, pero los resultados que diste no eran los que esperaba- Esto en parte era cierto, había hecho esto para ver sus reacciones en el momento que humanos como él se ofrecían a ser amigos. Pero no quería que todos y, especialmente, todas, se acercaran a él. No sabía la razón. Simplemente era así.

-¡¿Terapias?! ¡¿Esa es tu respuesta?! ¿El haber compartido fotografías mías sin mi consentimiento por todo el lugar era por una terapia?-

-No cuestiones mis métodos-

-No iré más a esas "terapias"- Hannibal se sintió desconcertado ante esta declaración. Si no asistía más a esas terapias no iba a poder continuar con su investigación, no iba a poder hablarle, no iba a poder verle... No, eso no lo iba a permitir.

-Es necesario que vayas. Intento ayudarte-.

-No iré si no quiero ir. Tengo derecho- A Will no le había gustado ese "experimento"; no por el hecho de haberlo avergonzado públicamente, sino porque se sintió como una rata de laboratorio. La rata de Hannibal.

-¿En verdad ya no quieres asistir a las terapias? Si quieres, no lo tomes como si fuera tu psicólogo, tómalo como si fuera tu amigo. Tómalo como una... reunión social-

"¿En verdad ya no quieres asistir a las terapias?..."  Esa pregunta le había hecho pensar al chico. ¿Quería? En primer lugar, ¿por qué había ido aquella vez? Pudo haber dicho que no, y luego irse a su casa. ¿Qué era lo que le impulsaba a querer seguir con eso? ¿Qué era? ¿El hecho de... conversar con alguien? ¿Con Hannibal?

Un timbre sonó, el que indicaba el comienzo de la segunda clase. Ya se habían perdido una, la de matemáticas, y no deberían perderse la de química.

Los dos jóvenes reaccionaron y volvieron a la realidad. Will fue el primero en hablar.

-Tenemos química...-

-¿Qué?-

-No podemos perdernos esta clase. Te agradezco el que me hayas sacado de la otra situación, pero no te perdono el que hayas sido el causante-

Will se dio cuenta que seguía en la misma pocisión de hacía rato: contra la pared y con la manos aferradas a la escalera. Decidió moverse y Hannibal tomó el paso delantero, fueron en silencio e ingresaron a los laboratorios.

~Hola!! Primero que todo acabo de salir de una crisis de emociones porque apreté mal una tecla y se me borró una parte del capítulo D: Pero el lado positivo es que di genial mis exámenes y ahora después de largas jornadas de sueño tengo todas mis energías para escribir! Y vuelvo con una sorpresa para ustedes queridos lectores :3 Se trata de que ustedes decidan la imagen o gif *que no sea tan... comprometedora porfavor* de los capítulos que sigan y también les pondré la dedicatoria. El primero que comente el link de la imagen será el que la decida. Tal vez no sea taan especial pero algo mejor se me irá ocurriendo! Se aceptan ideas! Sin más que decir, hasta el próximo capítulo! Dejen esos comentarios y votos que tanto me alegran el día! *Qué larga ha sido esta nota no?*~



My therapist -(Hannigram)-Where stories live. Discover now