Cuando estés listo llegara

Capitulo 12

En ese mismo momento se escucharon los repiqueteo de unos tacones bajando por las escaleras. Felicity no tardo en aparecer toda acalorada.

-Siento mucho llegar tarde, me quede dormida- se disculpo la joven mientras tomaba su puesto tras los ordenadores que el habia encendido nada mas en llegar.

Se sintió aliviado al verla aparecer, por un momento habia tenido miedo que lo ocurrido por la mañana pusiera en riesgo el trabajo que hacían por la cuidad, pero no, su chica miércoles no le habia fallado.

Algo en su expresión debió de delatarle porque Laurel enseguida le pregunto.

-Es ella ¿verdad?-

Oliver cerro los ojos y respiro hondo, para luego volver a mirar a dirección a Felicity que se encontraba hablando animadamente con Diggle.

-Si es ella-

Una alarma empezó a sonar poniendo a todos en alerta. Oliver no dudo y corrió junto a Felicity que ya trabajaba sobre el teclado para averiguar donde estaba el problema. Las imágenes y los datos viajaban por la pantalla a una velocidad sorprendente; Laurel se equivocaba, Felicity era única e irreemplazable. Finalmente apareció un punto rojo parpadeante en la pantalla.

-Lo encontré- exclamo la informática manteniendo su concentración en la pantalla- es en los Glades-

-Felicity puedes concretar...-el comentario de Roy le gano una mala mirada de parte de la aludida.

-Que manía tienen los héroes de decirle a una como hacer su trabajo, ni que os fuera diciendo como tenéis que tirar vosotros las flechas-parloteo mientras seguía buscando la localización concreta.

-Ya, como si tu supieras lanzar flechas- se defendió el joven

-Si sabe-

-Si se-

Dijeron Oliver y Felicity a la vez. Thea los miro extrañada por la vehemencia de ambas respuestas. Jonh por su parte sonrió satisfecho, mas deslices como esos y pronto dejaran de haber secretos.

-Es en el Verdant pero no consigo concretar que es lo que ocurre- se lamento la informática

-Nosotros lo averiguaremos- Oliver dio un apretón a su hombro y se fue a ponerse el uniforme, Roy Thea y Laurel lo imitaron.

-¿Que?- le pidió Felicity a Diggle que no paraba de mirarla sonriendo.

-Nada, pero quizás quieras taparte ese chupeton del cuello si queréis mantener lo vuestro en secreto-

Ella rebusco en su bolso hasta encontró un espejo de bolsillo en su interior. La abrió y comprobó todo el perímetro de su cuello pero no vio absolutamente nada.

-No tienes nada, solo quería confirmar una cosa y supongo que ya se la respuesta-

Felicity lo miro como si se hubiera vuelto loco. Y puede que lo estuviera pero necesitaba confirmar que lo que habia ocurrido entre ella y Oliver no era nada malo como su amigo ya le habia asegurado. Ahora no sabia si conocer que entre ellos habia pasado algo mas que los besos de los que el habia sido testigo, era una buena idea. Por suerte no tuvo que ahondar en el tema, porque la guarida por norma general no era un buen lugar para hablar y menos si iban camino de emprender una misión.