Risk It All. {h.s}

Capítulo 16.

—Iré a verla.— declaró Andrew rápidamente, se paró y salió del restaurante para buscar a su prima.

—Eres un cínico.— murmuré limpiándome las lágrimas que estaban en mis mejillas.

—¿Por qué?

—«Cuando una persona te necesita, tienes que estar a su lado, no huir como otras personas hacen»— Lo imité. —¿En serio vas a decir eso? Veo que solo cumpliste esa promesa con una persona, porque cuando tu madre te necesitó, tú nunca estuviste ahí para ella.

—Es diferente.

—Por favor, ilumíname y dime porque es tan diferente cuando se trata de tu madre. ¡Todo es diferente cuando se trata de ella!— casi grité.

—Habla más bajo.— Hablo entre dientes. —No vas a querer que los demás se enteren de nuestros problemas.

Me quede callada por unos segundos hasta que mi respiración ya no estuviera tan agitada antes de volver a hablar.

—¿Es verdad lo que dijiste de Ángela?

—Claro que sí, no mentiría con algo como eso. Ángela necesito mi ayuda en ese momento, no iba a dejarla sola.

—Parece que ella siempre está en problemas ¿no? Siempre va a necesitar de tu ayuda para salir adelante y tú siempre vas a estar a su lado sin importar cuánto daño le haga a los demás.

—¿Disculpa?

—Digo...no es la primera vez que escucho que a ella le pasa algo malo o que hace algo estúpido. ¿Te acuerdas como comenzó todo esto? Ángela te había engañado y su relación estaba tan jodida que casi mueres de un coma etílico. Al parecer, no era la primera vez que ella hace algo tonto, porque quedo embarazada, solo que no fue lo suficientemente valiente como para decirte y criar un hijo. Tu hijo.

—¿A que estás tratando de llegar, Rose?

—Solo digo que no importa lo mal que ella joda todo, siempre vas a estar a su lado.

—¿Y qué tiene que ver contigo?— alzo una ceja, al parecer divertido con la situación. —¿Acaso te molesta? ¿estás celosa?

—Solo estoy tratando de descifrar si eso hubiera sido lo mismo conmigo.— Susurré y él dejo de burlarse. —Si yo te hubiera dicho lo mismo, ¿te hubieras quedado a mi lado?

—No sé, tú dímelo. Huiste apenas te enteraste de mi verdad.

—¿Ves la diferencia? Me enteré sobre ese tema, no me dijiste. Hubiera sido mucho más comprensible que tú hubieras hablado conmigo, pero preferiste seguir mintiéndome.

—Rose...

—Me preguntaste por la verdad, querías respuestas. Ahí las tienes. Con solo mentirme, me demostrabas que no confiabas en mi...no lo suficiente.— Susurré. —Si me amaras de verdad, si confiaras en mí, si me extrañas como dices ahora, ya me hubieras dicho todo la verdad. Hubieras arreglado las cosas con tu madre para bien pero en vez de eso, sigues aquí con Ángela, como si no hubiera pasado nada.— Me reí porque una lágrima cayó por mi mejilla pero rápidamente la limpie. —Hace tiempo me dijiste que la persona que más te conoce, es Ángela y ahora me doy cuenta que su relación es muy jodida como para seguir juntos después de tantas cosas que han pasado. Cosas muy desastrosas debería decir.

—Pero por lo menos seguimos juntos.

—¿Esa es tu única excusa? Parece que estás...atado a ella por todo lo que sufrió.