CAPITULO 18 - REGRESO Y ENCUENTRO

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Esta semana toca capitulo corto, ya que con eso de que nos vienen las fiestas de Semana Santa, toca más ocuparse de la familia y de mi hijo. Pero igualmente espero que os guste, yo lo he disfrutado mucho escribiéndolo.

Sobre todo dedicárselo a una gran amiga y persona que es mi apoyo en muchos de mis días tanto laboralmente como personalmente y que esta siendo mi lectora de referencia para guiarme @rosavalles4

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Llegar a la habitación fue casi como un milagro, porque no paramos de besarnos, tocarnos, acariciarnos en ningún momento, salir del coche o abrir la puerta de la Suite, fue haciendo peripecias con nuestras manos y nuestros cuerpos.

Mi vestido salió volando en cuanto traspasamos la puerta y la camisa de Ángel se quedó sin ni un solo botón sano, era tal la necesidad que teníamos de estar en brazos el uno del otro, que todo lo de nuestro alrededor desapareció, solo existía la necesidad de sentir nuestros cuerpos pegados el uno al otro, desnudos, piel con piel, haciéndonos el amor con una pasión arrebatadora, como si se nos acabara el tiempo.

Me despierto por la mañana, con un Ángel abrazado a mí por mi espalda de todas las formas posibles que había encontrado, y suavemente me doy la vuelta como puedo para poder mirarle de frente, sintiendo como él se revuelve para no dejarme escapar de su lado y veo como abre los ojos un poco, mirándome de frente y como a la vez en ese mismo instante, su miembro se vuelve a poner firme, reflejándome físicamente el deseo que vuelvo a ver en sus ojos.

-          Buenos días Preciosa

-          Buenos días – estoy tan embobada mirándole, que las palabras han desaparecido de mi vocabulario

-          Son las 10 de la mañana, creo que todavía tenemos tiempo, ¿no?

-          Mmmmm – esto es una tortura para mí, siento que si ya me robo el corazón hace 28 años y se quedó de por vida un trozo de el, en estos momentos me estoy dando cuenta, que no solo ha recuperado del todo ese trozo, ahora ya me tiene toda a mí por completo de nuevo y me siento frágil.

-          Ese mmmm, significa que ¿sí?

-          Si – le contesto mientras muevo mi cabeza afirmativamente

Ya no puedo detenerme me lanzo sobre sus labios de nuevo, le necesito, le necesito para seguir respirando y a la vez me da miedo, ya no soy esa joven que podía hacer lo que quisiera, pero en estos momentos y hasta que volvamos a nuestra realidad no quiero pensar en nada que no sea él y solo él.

Le abrazo con fuerza, le recorro su mentón, su cuello con mis labios, bajo mi mano por su pecho acariciándolo, llevando mi mano hacía su pene, todo dispuesto para mí y tumbándolo del todo sobre la cama me subo encima de su cuerpo, para poder seguir besándolo, acariciándolo, recorriéndolo por completo, saboreando con mi lengua cada uno de los rincones de este hombre que me está volviendo loca.

Nuestras respiraciones se van acelerando al unisono, perdiéndome del todo con sus gemidos y siento como Ángel va acariciando mi cuerpo, como me acerca a él para jugar con mis pezones y sentir a la vez como su mano va bajando entre nuestros cuerpos para llegar a mi monte de venus y empezar a acariciarlo suavemente, jugando a la vez con mi clítoris.

Mi cuerpo esta tan necesitado del suyo, que con un sencillo movimiento siento como consigo introducir su pene en mi cuerpo, sin que en ningún momento nuestras manos, caricias, besos se detengan.

Encuentro con mi PasadoWhere stories live. Discover now