CAPITULO 20 - EL ACCIDENTE Y EL HOSPITAL

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PERDONNNNNN.

Si lo siento, voy con retraso, pero llevo unas semanitas de locura y no había podido terminar este capítulo con calma, pero aquí esta, espero que os guste.

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Me desperté al cabo de unos minutos tumbada en el sofá de mi despacho con Estrella y Maria mirándome preocupadas y abanicándome para que me sintiera mejor.

-          Luna, ¿Estas bien? – me pregunta Estrella

-          El teléfono, donde está el teléfono estaba hablando con José – le contesto toda alterada

-          Tranquila, lo he cogido yo cuando he llegado a tu despacho avisada por Maria, estaba venga a gritar tu nombre preocupado por ti, viene hacia aquí.

Dime, ¿Qué ha pasado?

-          Había quedado con Ángel para comer con él aquí a la dos y al ver que no aparecía, tuve una extraña sensación de que algo que le había pasado y llamé a José para saber si tenía noticias suyas y me ha dicho que ha tenido un accidente de coche con otros compañeros de trabajo cuando volvían a Madrid.

Necesito saber si está bien, sino, si está en algún hospital, no puede volverme a ocurrir lo mismo, otra vez no – le dijo con la respiración entre cortada por la ansiedad que estoy sintiendo.

-          No te preocupes Luna, en cuanto llegue José te pone al día. He llamado también a Silvia y me ha dicho que la llames en cuanto estuvieses repuesta.

-          Pásame el teléfono por favor.

Llame a Silvia, le conté lo poco que sabía y que estaba a la espera de más noticias, y tal y como es ella, me dijo que no me preocupara que ella se hacía cargo de Agustín y que en cuanto tuviera noticias que le contara para saber si podía hacer algo.

Estaba que me subía por las paredes, desesperada por que llegara José y me contara algo más de lo que había pasado, ni siquiera sabía si estaba vivo, si aquí había terminado todo, pero algo dentro de mí, me decía que no era así, que seguía vivo, que todavía había esperanza.

Los minutos hasta que llego José me parecieron horas, ya no me podía concentrar en nada que no fuese tener noticias de Ángel y parecía que la moqueta de mi oficina iba a desaparecer por mis pasos continuados por ella. Maria apareció con una manzanilla para que me relajase un poco.

-          Luna, tómatela te hará bien y tranquilízate, ahora cuando llegue José que te cuente, pero de nada sirve que estés alterada sin saber nada en concreto.

-          Sé que tienes razón Maria, pero es que no creo que esto pueda volver a pasar y menos cuando hemos estado tantos años separados.

En eso oímos con entraba José como un caballo por nuestras oficinas preguntando por mí y Maria salió para indicarle que pasara a mi despacho que yo estaba allí.

-          Luna ¿te encuentras bien, te ha pasado algo?

-          No tranquilo José solo me desmaye por la impresión, pero estoy bien, por favor cuéntame que ha pasado, donde esta – ya no es una pregunta, es un ruego de mi alma desesperada, con las lágrimas casi pugnando por salir.

-          Tranquila Luna, está en el Hospital Gregorio Marañon, no ha sufrido grandes heridas, pero le han sedado para bajarle la presión por el golpe recibido, por eso no te ha llamado y ninguno sabíamos que había quedado contigo, sino yo mismo te hubiera llamado anoche en cuanto me entere.

Encuentro con mi PasadoWhere stories live. Discover now