Tras la sorpresa

Capitulo 24

Capitulo 24

-Qué rápido has vuelto...

Dijo mi hermano al verme entrar por la puerta. Le sonreí y asentí. Yo también pensaba que tardaría más en llegar a casa, pero el sobre que encontramos lo estropeo.

Flashback

-¿Vas a quedar con Jorge?

Giró y me miró.

-Vane... Quedaremos con la banda...

-No. Lo pone bien claro, 'juntos'. (Dije remarcando la palabra y señalándola en el papel)

-Y yo te recuerdo que es parte de la banda, y si dice juntos querrá decir...

-(Le interrumpí) Que quiere volver contigo.

-Vanesa, por favor...

-Te he hecho una pregunta muy fácil, si te dijera de quedar juntos y solos, ¿lo harías?

Quería que me dijera que no, rápido, sin pensárselo, pero ahí estaba, con los ojos hacia el suelo, sin mirarme. No necesitaba respuesta, ya la había obtenido.

-Buenas noches, Malú...

-Vanesa...

Cerré la puerta antes de que pudiera dar un paso para frenarme.

Fin del flashback

Al día siguiente amanecí cansada y sin ganas de nada, mi hermano había dormido a mi lado y sonreí al verlo ahí. Lo había echado de menos. La noche anterior le conté todo lo que había vivido esas últimas semanas, necesitaba desahogarme y al verme entrar por la puerta y sonreírle tan secamente notó que algo no iba bien.

Me duché y preparé el desayuno, a los pocos minutos me encaminé hacia la oficina. Llevaba ya varios textos traducidos y alguna llamada echa cuando sonó mi móvil, contesté sin mirar.

-¿Si?

-Hola Vane... (Oí su voz y quité mi atención del texto que estaba leyendo)

-Buenos días...

-Yo... te llamaba... Lo siento... (Hizo una pausa, coió aire y siguió) No. No quedaría con él. Nunca.

Sonreí. Quizás había dado demasiada importancia aquel mensaje que encontramos en su casa y el miedo me inundó por completo, pero ahí estaba su voz para calmarlo todo.

-¿Sabes? Ayer hablé con mi hermano de nosotras. (Continúe antes de que hablase) Y me dijo que no podía vivir pensando en que pasará mañana, o quien se cruzará por nuestro camino. Porque todos los días habrá algo o alguien que quiera separarnos y distanciarnos. Incluso nosotras mismas lo haremos. Y tiene razón.

-Vanesa, yo quiero estar contigo.

-Espera. (Volví a interrumpirla) Voy a luchar por lo nuestro, (sonreí) será mi mayor objetivo a partir de ahora. Voy a subir la montaña más alta, y todas las noches voy a mirarte a mi lado y sabré que he conseguido subir unos metros más.

-¿Y cuando termines llegando a la cima?

-Me mantendré en ella. Sin caerme. Habré puesto una bandera con nuestros nombres y le sonreiré a la vida contigo de mi mano. Claro... Si subes la montaña conmigo o...

-¡Ni se te ocurra acabar esa frase! (Noté como sonreía y yo lo hice también) No tengo nada más que hacer en los próximos años que vivir la vida contigo...

-Más te vale, porque si no te voy a secuestrar y se nos complicarían las cosas

-(Rió al oír mis tonterías, paró después de unos segundos y noté como se ponía seria) Gracias...