Tras la sorpresa

Capitulo 38

Capitulo 38

Di un paso más y la miré bien. Ahí estaba, con los ojos llenos de lágrimas a punto de romperse.

-Te puedo asegurar que yo no seré tan bueno como él.

Dijo detrás de ella José, rojo de ira empezando andar en dirección a Jorge. Me puse en medio y lo frene de golpe.

-Por favor...

-No me pidas eso Vanesa... (Dijo sin mirarme, con sus ojos clavados en los de Jorge)

-¿Y si te lo pido yo? (Preguntó Malú detrás de él)

José se paró, se giró, miró a su hermana y se abrazaron. Malú estaba llorando y su hermano acariciaba su pelo para calmarla. Me giré hacia Jorge con lagrimas en los ojos, me dirigí a él cabreada, furiosa, estaba a punto de enfrentarme a él cuando Malú me cogió del brazo, cerré los ojos al sentirla otra vez cerca, me giré.

-Lo siento... Lo siento tanto...

Estaba rota, pidiéndome perdón, como una niña que acaba de hacer algo tan malo que va a estar castigada toda su vida. Empecé a llorar con ella, negué con la cabeza para que parara de decir que lo sentía, ella no tenía la culpa de nada. Cogí su cara y hice que me mirara a los ojos.

-No... Soy yo la que te tiene que pedir perdón. (Le sequé las lágrimas con las yemas de mis dedos) Apareciste de repente en mi vida desordenando sueños, tirando expectantes, y no me queda más remedio que rendirme poco a poco y acomodarme a ti. (Sonríe entre lágrimas) Necesito respirar de ti, para que todo este en calma, que cruces todas las mañanas las barreras de este inquieto corazón, y que nos encontremos en las esquinas deteniéndonos.

Sonreímos, yo seguía con mis manos en su cara, mirándonos a los ojos, iba a besarla cuando alguien empezó a aplaudir detrás de nosotras.

-Qué bonito...

Jorge tenía que estropear ese momento, como todo lo que toca. Me separé de Malú, le guiñé el ojo y me sonrió. Me giré y me quedé mirándole cara a cara. Me acerqué a él quedando a pocos centímetros. Noté como Alba se puso detrás de mí, me giré y le sonreí, di otro paso y ella entendió que era cosa mía. Llegué a su altura y le desafié con la mirada.

-Aquí termina todo Jorge.

Estaba sonriente, me miraba por encima del hombro, desafiante, frio como el hielo, con los ojos bien abiertos, miré su cuello y tenía la marca que minutos antes habían dejado las manos de Ángel, volví a sus ojos.

-Voy a encargarme personalmente de que nadie quiera estar a tu lado. De que nadie quiera saber de ti. De que desaparezcas de nuestras vidas.

-¿A si? (Dijo a un sonriente) ¿Y eso como se hace?

-(Sonreí yo también y noté como su rostro cambiaba un poco) Teniendo muchos contactos. (Di un paso atrás., me giré y miré a Malú sonriendo) Para empezar 'Blanco y negro' se ha acabado.

-No digas tonterías... (Dijo ahora sin sonreír) Si lo dices por... (Continuó mientras miraba a Malú)

-¡Eh! Estoy aquí. (Dije poniéndome otra vez a su altura)

-Puedo tener a la cantante que quiera.

-(Sonreí otra vez) Nadie va a querer cantar contigo cuando se enteren de la verdad. Bienvenido a la soledad Jorge.

-No tienes nada que pueda hacer que la gente sepa cómo soy...

Dejé de sonreír cuando él volvió hacerlo. Oí la puerta y respiré hondo.

-Ella no tiene nada, soy yo la que lo tiene.

Sonreí al oír su voz, y aun más cuando vi la cara desencajada de Jorge. Me giré hacia un lado cuando noté que se ponía en el.

-Lucia... no... (Dijo Jorge)

Cuando pedí a Lucia que tuviera cuidado con Jorge me entendió a la perfección, la llamé para contarle que iba a por él, y no dudó en tenderme su mano y ayudarme.

Nos sonreímos, sacó su teléfono y le dio a reproducir.

Flashback

Narra Lucia

Oí unos portazos desde mi cama, y bajé rápido antes de que los vecinos llamaran a la policía, aunque sabiendo quien era no me hubiera importado. Antes de abrirle recordé lo que Vanesa me había dicho, así que dejé mi móvil con la cámara encendida apoyado en las escaleras. Entró cabreado, chillando cosas sin sentidos, hasta que cayó al suelo. Intenté levantarlo, pero Jorge no ponía mucho esfuerzo. Me apoyé en la puerta después de cerrarla.

-Tienes que irte...

-¿Tu también cariño? (Entendí a duras penas)

-Primero, no me llames cariño. Y segundo... ¿A qué te refieres? (Pregunté mientras cogía su car apara que me escuchase)

-(Sonrió) La zorra de Malú... pensé que mis polvos mágicos harían maravillas con ella... pero...

-¿Qué que estás hablando? (Dije mientras daba un paso atrás y él se levantaba)

-Tiene que estar muy enamorada de esa para no querer pasar la noche conmigo... (Se tambaleaba un poco, y se apoyó en el sitio donde segundos antes me encontraba yo) Ella se lo pierde... Aunque, no va a quedar así.

-¿No vas a dejarlas tranquilas?

-No, no, no... Y tú vas ayudarme...

-¿Yo? (Di otro paso atrás)

-(Asintió) Si no puedo con Malú... Que sea Vanesa...

Un escalofrió entró por mi cuerpo, quería mucho a Vanesa, quizás no de la forma que sentía al tenerla antes a mi lado, pero, era una buena amiga, aun con el daño que nos hicimos.

-No pretendas tocarla.

-Vaya, vaya... Yo no voy hacer nada. (Dijo sonriendo y acercándose a mí) Lo vas hacer tú.

-No vas a conseguir nada de ella. Están enamoradas, se quieren, déjalas. Busca alguien que también te quiera, o vete lejos, lucha por la música....

No sabía que decirle más para que a quien dejara también fuera a mí, me faltaban pocos metros para llegar a la pared de la escalera, cuando lo hice lo tenía a pocos centímetros de mi, su boca casi pegada a la mía, olía a alcohol. Me aparté, y beso mi cuello. Di un paso atrás y tiré el móvil al suelo. Cuando lo noté di un empujón a Jorge y lo cogí rápidamente mi teléfono. Paré el video, y marque el número de emergencias.

-¡para!

-O te vas o llamo... (Dije a punto de estallar a llorar)

Dio un poso atrás antes de que terminase la frase, cogió su chaqueta que había caído en el suelo, abrió la puerta y se fue.

Fin del flashback