El chico del fondo

Capitulo 21: dia 147.

Damon era todo lo que cualquier persona querría en su vida, y yo lo estaba arruinando todo. De verdad lo quería, pero no como amigo. Realmente quería algo mas con el, pero el no aceptaría nada conmigo ahora.
Es verdad que llore y sigo triste por Halton, pero era mas que nada por que el no se lo merecía y por todo lo que lo quiero.
Sin embargo, en estos momentos mi corazón latía por aquel chico que siempre estuvo acá conmigo, aquel que a pesar de todo siempre insistió porque veía futuro a lo nuestro, aquel que siempre tenia algún comentario para hacerme feliz; en otras palabras, mi corazón latía por un chico de oro.
El me decía diamante, y eso era algo que no podría entenderlo. No sabia que veía en mi realmente, y tampoco sabia como se le ocurrió el apodo. De por si no me gustaba ese apodo, pero era original y eso le daba su toque especial.
Ayer anoche invite a Damon a mi cama, el lo rechazo un montón de veces, hasta que le prometí que no pasaría nada y que no seria ninguna especie de juego. Se que acepto porque en si se moría por estar conmigo, pero también podía ver el miedo en sus ojos.
No quería hundirlo por algo que quería dejar atrás, no podría hacerle eso.
Me levante un poco de la cama y me incline para besarlo en la boca mientras el dormía.
Al principio fue un beso tierno. El abrió los ojos de par en par y notaba su lucha interna por alejarse. No quería que lo haga. Quería que el aceptara algo enserio conmigo. Después de tanto tiempo juntos, de tanta confianza y de todo lo que vivimos, ya era hora de formalizar esto.
Intente cambiar la tonalidad del beso volviéndolo mas sexy al agregar lengua y mordida.
Se estaba rindiendo a la lucha. Hasta que finalmente accedió y se notaba que el no quería parar.
-Damon-llegue a decir antes de morderlo-perdón por todo, quiero que nosotros-llegue a decir entre cortado y aun sin llegar a decirle lo que quería decirle.
El medio vuelta medio inseguro pero decidido en cierta forma. Me sonrió antes de volverme a besar y una vez el arriba mío acerco su boca a mi cuello.
Se saco la remera enseguida esperando que le de mi permiso. Estaba un poco preocupado y se notaba al estar un poco lento de sentidos. Apenas le di a entender que lo haga, el saco mi remera y terminamos en un mar de besos, pasión y acción.