El chico del fondo

Capitulo 36: dia 235.

Me desperté con los golpes que Kevin le daba a la puerta del cuarto desde el otro lado.
-¡Si no te despiertas voy a tener que entrar Helena, lo digo enserio!-gritaba desde el otro lado.
El abrió la puerta y le lance la almohada como reacción.
El la cerro enseguida.
-Esta bien, esta bien, ya entendí. Podrías haberme respondido pero esta bien, entendí igual.
Me cambie y baje para desayunar, pero no vi nada preparado.
-¿Y el desayuno?-pregunte.
-Nada de eso, llegarías tarde al colegio-el me noto molesta y agrego rápidamente- vas a ir igual.
-Ya no me agradas-dije a modo de broma.
-Da igual, lo hago por tu bien-se lo tomo enserio.
-Ahora que se que no hay desayuno acá, se que no soy bienvenida.
-Mi idea no es que te quedes a vivir en mi casa, sos bienvenida siempre pero no para quedarte a vivir. De todas formas se que si tuvieras que elegir no soy tu primera opción-dijo abriendo la heladera.
-¿Ah no?-pregunte.
-No, es obvio que es Freddy-dijo sacando un yogurt.
-¿No hay para mi?-pregunte haciendo caritas.
El me me miro y lo lanzo.
-Es para que lo comas en el camino con una cuchara de plástico-dijo lanzándomela- te deje una mochila con cosas para anotar en la puerta.
-Gracias mama-dije sonriendo por su gesto.
-De nada hija-dijo siguiendo la broma.
El fue hasta la puerta para echarme.
-¿Acaso viene alguna chica que estas tan apurado porque me vaya?-pregunte.
-Si, se llama: te vas a quedar libre si no vas nunca.
Tome la mochila y me fui caminando. Recordé cuando solía ir con Pedro, y todas las bromas que le hacia, sonreí.
Una vez en el colegio, entre y no reconocí a nadie. ¿Hace tanto que no iba? Sabia que era hace un tiempo, pero tampoco como para no reconocer a nadie.
Cuando entre en el aula note las miradas de todos los que estaban dentro, aun era temprano, eran pocos, pero aun así note su mirada de asombro. Era como si hubieran visto un fantasma.
Me había quedado parada al frente de ellos, hasta que escuche la voz de Melisa.
-¡Helena!-grito ella emocionada y haciéndome señas para que me siente en el lugar donde estaba Roy antes de que lo eche.
Fui y me senté con ella.
-Perdón Roy-dije poniéndome de costado para hablar con ambos.
-Pensé que no volverías-dijo Roy.
-El de mate te extraña-dijo Melisa.
-Ya pasamos por eso Mel-dijo Roy.
-Esta bien-dijo ella resignándose.
-Estuve demasiado ocupada, pasaron muchas cosas en poco tiempo-dije sin mas.
-Te ves molesta-dijo ella.
-Lo estoy, todo es demasiado raro. No logro entenderlo. Se que hay cosas que los otros me ocultan y no estoy segura que es, pero cada día aparecen cosas que me lo indican.
-Tranquila-dijo ella-Sos Helena, vas a resolver todo.
-Si, vas a resolver todo lo que te voy a preparar para que rindas por tu ausencia injustificadamente extensa-dijo el profesor de matemáticas-Aun así se que lo vas a aprobar por que sos mi mejor alumna.
La cerebrito me miro mal. Note su mirada de desagrado. Ya no llevaba lentes y a simple vista nadie creería que esa era la cerebrito de mi aula. Mas que cerebrito era rata de biblioteca,  le encantaba sentarse a leer sobre historia, ciencias y libros similares.
Tuve que rendir una especie de examen demasiado extenso sobre todos los temas que vi y sobre otros que no había visto por faltar pero que supe resolverlos.
Luego tuvimos un recreo y para mi suerte, volvíamos a tener matemáticas después.
El llego a la clase y enseguida me miro, yo estaba por pararme para ir a ver como me fue, pero el me hizo señas para que me quede.
-Esto-dijo extendiendo el examen en el aire-es ser un alumno ejemplar-note como la cerebrito me miraba con furia.
-¡Eso es imposible!-dijo ella-Si ha faltado mas de lo que vino, ¿como puede ser que haya logrado hacerlo y que usted la felicite como si nada?
-Mi castigo ha sido claro, tuvo que rendir un examen mucho mas extenso que uno común con temas que ella no vio por faltar, y aun así los ha hecho bien.
-No puedo creerlo-dijo ella cruzándose de brazos.
-¡Miranda Bretany!-dijo el.
-Esta bien.
El me dejo el examen para que lo mire y se puso a explicar un tema nuevo en frente de todos.
Sentí como Melisa se abalanzo sobre mi para ver el examen.
-El te adora-dijo para que solo yo la escuche.-¿Que se siente ser su alumna favorita?
-Esto es muy raro-dije.
-¿Que te parece raro?
-Seguir sacando puros dieces.
-Si eso es genial.
-Lo se, pero no comprendo como pude haber hecho tan bien esto si no lo vi, quiero decir, había visto una base el año pasado pero no pensé que lo haría tan bien.
-Eres buena con los números-dijo ella-y poniendo furiosa a Miranda.
-Ella jamas me había mirado y tampoco yo a ella.
-Pero ahora parece que si.
-Me odia.
-Creo que así es.
-Pero yo no la odio a ella.
-A veces pasan esas cosas.
Me di vuelta para ver el lugar donde solía sentarse Halton, estaba vacío.
-Me molesta no verlo ahí sentado, sin prestar atención a la clase o llamando la atención simplemente-lo dije como comentario al aire pero Melisa escucho y me respondió.
-Algún día tendrá que volver, tal como lo hiciste-mas tarde agrego-Por cierto, hace poco volvió su prima, la chica esa que te tenia loca hasta que descubriste quien era.
-Ah si, ella-dije sin mas.
Ella me hizo pasar uno de los momentos de celos mas grandes de mi historia, fue demasiado para intentar entender sin saber casi nada. Y resulto ser la prima de Halton, solo ella. Nada mas y nada menos. Por lo menos no fue una chica interesada en el.
-¿Por que volvió?-pregunte luego de un rato.
-No lo se. Vino por unas semanas y se fue, justo antes de que volvieras. Se que en varias ocasiones fue a la biblioteca, lo mas probable es que se hable con Miranda, de hecho creo que una vez las vi hablando, era la única con la que se hablaba posiblemente.
-Deberían haberle hablado, no quiero que se quede sola como su primo.
Lastima devuelta. ¿Que dije sobre los sentimientos de culpa sobre temas referidos a Halton? El ya es pasado, o eso se supone.
-Oh, espera. Ella se hablaba mucho con tu amiga, fue la única que fue a recibirla desde el principio y siempre pareció apoyarla. No recuerdo su nombre pero se que es muy buena chica, siempre muy tranquila e inteligente.
-¿¡Beth!?-pregunte confusa y demasiado fuerte.
-¿Que pasa?-pregunto el profesor.
-Perdón, no fue nada-dije.
El profesor siguió con su clase y aproveche para hablar despacio nuevamente.
-Esa misma.
-¿Que hacia acá?
-Estudiar.
-Si, pero se supone que se fue del país por estudio en cosas de ciencias y tecnología.
-No lo se, estuvo hace poco.
-¿¡Hace poco!?
-Si, pareces alterada.
-Es que no lo entiendo, ella se fue.
-Puede haber vuelto y estar ocupada.
-Y le corto a Freddy por eso-continue ignorando el resto.
Salí de clases en cuanto termino y no pude comprenderlo. ¿Beth había vuelto?. ¿Por que no dijo nada?. Beth había terminado su relación con Freddy y el quedo destruido por eso y sin embargo ella vuelve y ya no se habla con nadie. Una chica que pensé conocerla tan bien y resulta que no la conozco en lo mas mínimo. Todos la veíamos igual, tranquila e inteligente, con un aire muy pacifico en su forma de ser.
Tenia que encontrarla cueste lo que cueste, ya sea a ella o a la prima de Halton; incluso podría haber hablado con Miranda si no fuera porque se que me odia por todo lo de matemáticas.
Ignore los llamados de Roy y Melisa y fui corriendo hacia la casa de Kevin. Como dije, quedaba mucho mas lejos y preferí correr que caminar.
El estupido de Kevin me dejo esperando en la puerta durante unos quince minutos. Estaba sentada sobre las escaleras principales en cuanto sonó la puerta.
-¿¡En donde estabas!?-pregunte cansada de esperar.
-Hola hermanita, yo estoy bien, gracias por preguntar, supongo que por tus preguntas te debe haber ido muy bien en tu regreso a clases.
-Si si, hola, ¿por que tardaste tanto en abrirme?-mire para dentro de la casa- ¿hay una chica?-el negó-¿un chico?-volvió a negar-¿un travesti?-negó con un poco de disgusto a mi pregunta-¿un puto alíen?-el miro confuso-me estoy quedando sin ideas.
-Estaba duchándome-dijo el.
-Ah, me gustaba mas la historia del alíen.
-No sucedió.
-Pero era mejor.
-Era mas ficticia.
Entre sin mas y deje que el cierre la puerta.
-¿Te fue bien?
-Fue raro.
-¿Que tan raro?-el se apoyo sobre la pared con los brazos cruzados esperando una historia de mi parte.
-Primero llego y me toman un examen mas extenso de lo común en matemáticas, me saco un diez y la cerebrito me odia. Después descubro que la prima de Halton esta viniendo a clases y que es amiga de Beth, que aparentemente también esta yendo a clases, pero por lo que ella me dijo la ultima vez que hablamos es que estaba en otro país por algo de ciencias y tecnología que nunca voy a entender bien que era; y creo que ambas son amigas de Miranda.
-¿Miranda?-pregunto.
-La cerebrito.
-Ah, ¿entonces son tres chicas?-pregunto el con mirada pervertida.
-¡Ni lo pienses!
-Era broma-dijo riéndose- aun así no suena tan mal. ¿Están buenas?
Le pegue tres veces a propósito.
-¿Por que me pegaste tantas veces y tan fuerte?-pregunto.
-Fueron tres golpes, uno por cada chica que imaginaste desnuda; y la intensidad del golpe fue porque probablemente te las imaginaste a las tres al mismo tiempo en un mismo escenario. Vos mismo te la buscaste.
El se río sin mas.
-Esta bien, son tus compañeras de clases, no me voy a meter con ninguna de ellas-el agrego-con otras si.
Me adueñe de la cocina en menos de diez minutos y el entro. Al verme note confusión en su cara, aunque no fue disgusto ni nada similar.
-¿Cuando pensas volver y enfrentar todo lo que dejaste?-pregunto el reposado sobre el marco de la puerta.
-¿Debería volver ahora o es muy temprano?-pregunte.
-Ahora es el momento justo.
-Creo que me estas echando-dije.
-No, solo quiero que hagas frente a lo que dejaste pendiente, antes de que prefieras simplemente dejarlo flotando en el aire.
-Esta bien, pero primero me quedo a comer algo que vos prepares y ahí si me voy.
-Bien, pero tengo que advertirte que solo voy a hacer hamburguesas y algunas papas fritas.
-Eso es lo mejor que podrías haberme dicho que harías-dije abrazándolo.
Comí y marche para enfrentarme a Damon.
Tenia que pensar bien en que le diría y como lo haría, antes de golpear la puerta.
Mi mejor plan era no contarle lo de Halton para no disgustarlo, eso solo lo alteraría y se que fumaría y saldría a correr a la noche. Simplemente alteraría la historia dejando las partes que mas me convenían.
En eso se abrió la puerta y estaba Damon del otro lado.
-¿Que haces acá afuera diamante?-pregunto el tranquilo.
Alguien vino corriendo me abrazo haciendo que casi me caiga al suelo con el.
-¡Perdón, perdón, perdón!-dijo Freddy entre lagrimas-¡Jamas quise que lleguemos a esta situación! No fue mi intención Helena.
-Emm, esta demasiado sentimental y todavía no entendí que es lo que vino a decirme, solo fue entendible cuando dijo que te fuiste de su casa enojada y que pensó que jamas volvería a verte porque no lo ibas a perdonar-dijo Damon.
-Eso no importa, tengo que arreglarlo con el.
-Los dejo solos.
-No te estaba echando.
-No, pero no quiero ver esta escena rara-dijo cerrando la puerta detrás de el-¡Avisen cuando puedo abrir!
-¡Helena!-dijo Freddy aun sin soltarme.
Recordé lo que sabia de Beth, aunque no sabia nada lo suficientemente completo de información como para poder contárselo. Ahí pude entender su situación con lo de Halton. Pero debía decírselo.
-Freddy, tengo que-me interrumpió.
-No hables mas-simplemente me beso en la boca.
Me costo cortarlo pero lo hice. Me daba pena tener que decirle que no, pero estaba Damon y no se que estaba entendiendo Freddy sobre esto.
-No, Freddy, estoy con Damon y lo amo.
-Lo siento, deberíamos tomarlo de costumbre, como un saludo-dijo con una risa apenada.
-Creo que estas en un mal momento todavía.
-Si, estoy en un momento demasiado horrible, pero estoy seguro que es una de las cosas mas sinceras y certeras que dije.
-Pero no te puedo besar para saludarte.
-Es solo un saludo-dijo el aun con esa sonrisa que me hacia saber que no estaba bien-hagámoslo en privado.
-Freddy.
-Dicen que besar tranquiliza y baja el nivel de nervios-me interrumpió nuevamente.
-Hola Freddy, tengo novio y se llama Damon.
-Como quieras, para mi estaba bien como idea y habría funcionado sin ocasionar nada mas.
Me volvió a besar y lo se echo hacia atrás antes de que lo eche.
-Ese fue el ultimo, tomalo como una despedida al saludo.
Lo mire mal.
-Vamos, no me mires así.
-Freddy, volví al colegio y me dijeron que Beth estaba yendo-dije al fin sin vueltas.
-Eso es imposible-dijo neutro.
-Es verdad, y se hizo amiga de la prima de Halton y de una cerebrito de mi aula,creo que van siempre a la biblioteca.
-¿Como puede se que no la haya visto?
-¿Vas siempre?
-Siempre que pude, con lo de Beth deje de ir o solo iba a las materias que me gustaban.
-Entiendo que estés mal, pero vamos a buscarla juntos-dije abrazándolo.
-Sigo pensando en porque me corto.
-Yo tampoco lo entiendo.
-Creo que la odio, Helena-dijo el mirando para el suelo luego de separarnos del abrazo.
-No digas eso.
-No se lo que es, pero es algo fuerte dentro de mi que me da ganas de gritarle y preguntarle porque lo hizo. Algo de mi quiere respuestas y necesita que le grite y tome mi venganza. Estoy roto Helena, ya no funciono como siempre.
-Para mi siempre vas a ser mi mejor amigo.
El tomo mi mano.
-Lo se, pero estoy roto, no se porque me queres en tu vida.
-Por la persona que sos.
-Ella se llevo todo, ya ves lo que queda de mi, solo un estupido chico al que le gustan los deportes que no para de llorar y quejarse y ahora quiere hacer algo malo. Ademas te oculte algo demasiado importante para vos, y vos no hiciste eso conmigo.
-Debo admitir que fue difícil decirlo.
-Pero lo hiciste, y me gusta mas saberlo que no.
-No soy mucho mejor que vos si es lo que estas queriendo decir.
-Yo lo lo siento así.
-Pero para mi sos la mejor persona que conozco y la única a la que no cambiaría por nada.
El río.
-Y aun así no queres besarme.
-Para eso vas a tener a Beth cuando la volvamos a ver.
-Con Beth no es todo besos.
-Olvídalo, no quiero saber lo que hacen.
-Solo iba a decir otra cosa. Esto me hace mal, mejor dejémoslo.
-Si, y lo vamos a arreglar juntos.
-¿Helena?
-¿Si?
-Prométeme que si la vemos me vas a dejar hablar con ella todo el tiempo que necesite, y si es necesario vas a retenerla.
-Te lo prometo.
Toque la puerta y Damon nos dejo entrar. Ahora era el el que quería hablar en privado conmigo.
Nos metimos en mi cuarto, y en cuanto el trabo la puerta me abrazo con fuerzas.
-Pensé que te perdí-dijo.
-Solo me fui una noche.
-Cuando baje las escaleras ya no estabas y no sabia que hacer, pensé que estarías con Freddy y eso me tranquilizo un poco, hasta que vino el llorando y no entendí nada, solo que re fuiste de su casa enojada.
-Perdón Damon.
-¿Que paso?
-Una mala noche, eso paso, pero ya volví. No voy a abandonar a mi novio, a mi mejor amigo y a mi casa por eso.