Ámame

Capítulo 13.

P.O.V Andrea.

Después de llevar a Sofi a su habitación y de que Arturo se la pasara toda la mañana acompañándola, Irina me aviso porque ni siquiera me pregunto, que iríamos al rancho Alcázar y que el abuelo iría con nosotros ya que mamá y Leonardo irían a cenar.

— Andre, ¿ya estas lista?

— Por supuesto. ¿Sofi irá? ¿Ya se siente mejor?

— Pues creo que mejor es poco, si paso toda la mañana con Arturo haciendo quien sabe qué.

— Hey! Irina te escuche, aquí estoy y mucho mejor y no, no paso nada con Arturo calmen las hormonas, sino que los medicamentos funcionaron muy bien y era un simple virus.-- Diji Sofi bajando las escaleras.

— Como digas, el abuelo ya nos esta esperando afuera.-- Dijo Irina apagando las luces.

— Que conste que solo iré porque quiero ver a Soledad.-- Dije montandome en el auto.

— Bueno según me dijo Flavio la cena es por que Sofia ya esta  mejor.

— Mala excusita la de Flavio, si ellos quieren hacer una cena no tienen que excusarse.-- Dijo Sofi introduciéndose en el auto.

— Bueno pues es solo una cena no se preocupen tanto mis niñas.-- Dijo el abuelo desde la parte delantera del auto.— Aunque Soledad no tiene ni dos días que se fue y ya quiero verla.

Y el chofer nos llevo hasta el rancho Alcázar el cual no quedaba muy lejos  del nuestro.

— ¡Wow! Como que bajaron tres ángeles del cielo.-- Dijo Flavio desde que nos vio entrar.

— No seas exagerado Flavio.-- Dije en tono de burla.

— Mi rulitos.-- Dijo Irina besándose con Flavio.

— Mi Rey.-- Dijo Sofia al ver a Arturo.

— ¡Mis niñas!

—¡Soledad!-- Dijimos las tres al unísono y abrazándola.— Te extrañamos.

— Yo por igual mis niñas.¡Don Felipe!-- Dijo Sole abrazando al abuelo.— ¿Cómo esta mi viejito?

— Muy bien ahora que te veo Soledad.

Y luego pasamos todos al comedor cada uno en su respectiva silla, pero todavía faltaba Samuel.

— La comida ya está servida solo falta Samuel y dijo que tenia invitados.

Y en ese mismo instante venia bajando Samuel, se veía tan formal y a la vez informal llevaba una camiseta cuello v que marcaban sus musculosos brazos y su abdomen, también tenía unos pantalones jeans negros que le quedaban de muerte y unas converse, ¡Dios mío! Me lo estaba comiendo con la mirada debía dejar de mirarlo y de pensar en Samuel.

— Ya estoy aqui.-- Dijo luego de bajar las escaleras y sentándose a mi izquierda.

Desde donde estaba podía oler su colonia una masculina y varonil, que se impregnaba por mis fosas nasales, no iba a poder cenar con el al lado.

— Mis invitados ya están por llegar.-- Y en ese momento sonó el timbre .

— No se preocupen, yo abro la puerta.-- Dijo Soledad terminando de colocar la ensalada.

Por la puerta entró la tal Gina con un vestido que parecía que iba a un bar y no a una cena "familiar" , detrás de ella estaba un hombre que llevaba un traje y se veía muy apuesto. Samuel se levanto de su silla.

— Familia les presentó a Georgina pero le pueden decir Gina.-- Dijo agarrando la mano de la tipeja esa.

— Mucho gusto.