Sonríe Para Mí 『Jeff The Killer』

La pelea

Nos encontrábamos en el comedor del instituto. Jeff insistió en que comiera algo más que una manzana porque se percató por primera vez que yo solo traía eso para comer, aunque se lo negué varias veces él insistió y tuve que aceptar.

—Aquí traigo tu comida —Vino Jeff con mi bandeja.

—¡Vaya! Es mucha comida...  No sé si podré comerme todo esto... —Me quejé.

—Eso no me importa, te lo comerás todo y punto —Finalizó Jeff.

—Wow, parece que Jeff se preocupa mucho por tí —Me susurró Emily.

—Pues claro, es mi amigo... —Le contesté de la misma forma.

Miré mi bandeja llena de Puré y un sándwich. Aunque Jeff me echó menos comida de la que debería ser, para mí era demasiada. Pero sabría que no podría negar nada pues era imposible con Jeff.

Tal vez... Si sólo como un poco...

Agarré el sándwich y lo miré un poco reacia. Lo comencé a llevar a mi boca y le di un pequeño mordisco. Miré a Jeff y me percaté que él me estaba observando. Me ruboricé. No me gusta que las personas me observen, me da mucha vergüenza pero me da más vergüenza si se trataba de Jeff... Él no podía parpadear, por lo que parecía una mirada aún más intensa.

—¿Qué haces comiendo, Lena? ¿Quieres ponerte aún más gorda de lo que ya estás? —Dijo Hani y sus amigas rieron.

Wooow, ¡Han actuado igual que en un libro típico de adolescentes! pero no creo que lo hayan hecho queriendo... El simple hecho de imaginarme a Hani leyendo es imposible. Aunque he de admitir que el comentario que hizo me dolió.

Jeff se levantó y se puso delante de Hani.

—¿Gorda? Si ella está gorda entonces yo estoy obeso ¿No? Y tu también estarías gorda, incluso más que Lena porque ella está actualmente más delgada que tú.

—¿¡Me has llamado gorda!? ¿¡A mí!? —Exclamó Hani.

—Tú lo has hecho con Lena... ¿O me equivoco?

Ella miró a Jeff con ira y apretó los puños, luego aparecieron detrás los amigos de Luke, junto a Luke.

—¿Qué ocurre aquí? —Preguntó Michael.

—¡Él me ha llamado gorda! —Dijo Hani a éste.

—¡Te dije que no te metieras más con ninguno de nosotros o lo pagarías muy caro! —Exclamó Daniel que se veía muy enfadado mientras que Jeff se veía muy calmado—Vale pero... Ha empezado ella —Respondió Jeff.

—¿Que ha empezado ella? Pero si Lena está gorda, pues lo está. Hani solo se ha preocupado de que no engorde más y llegue a tener sobrepeso... —Respondió Michael.

Jeff se rió y apretó los puños.

—Me encantaría patearos la cara a cada uno de ustedes... Disfrutaría demasiado... No sabéis cuanto —Respondió Jeff y sonrió de lado.

—¿Estás diciendo que podrás con nosotros? —Dijo Daniel y los demás comenzaron a reír —Tu sueñas demasiado.

—Pues la verdad es que sí, y disfruto tanto haciéndolo que podría mandarte a dormir para que lo disfrutes tú también...

—¿Mandarme a dormir? ¿Quién te crees? ¿Mi madre? —Respondió Daniel y los demás se comenzaron a reír.

Tengo que parar esta absurda discusión antes de que vaya a más.

—¡Vasta! Sois realmente infantiles... ¿Qué queréis demostrar con esto? ¿Saber quién es el más fuerte, quizás? ¿O simplemente queréis ser respetados? ¡Pues a mi me parece una grandísima idiotez! ¡Parecéis cavernícolas! —Exclamé y el timbre sonó indicando que ya podíamos irnos a nuestra casa.