Comablack.

LA devotee.

The black magic of Mulholland Drive
Swimming pools under desert skies
Drinking white wine in the blushing light
Just another LA Devotee
Sunsets on the evil eye
Invisible to the Hollywood shrine
Always on the hunt for a little more time
Just another LA Devotee
Just another, just another, uh oh
Just another, just another, uh oh
Just another, just another, uh oh
Just another LA Devotee.

Frank trabajaba en una de sus pociones más complicadas, "muerto en vida". Estaba por la parte más delicada, cuando Brendon azotó la puerta. A Frank se le cayeron los frascos de cristal, produciendo una pequeña explosión.

-¡Frank, tienes que ayudarme!- gritó Brendon, arrastrando a Ryan con él.

-¡Brendon! ¡cierra la maldita puerta!- gritó Frank.

-está bien...- Brendon se dio la vuelta y cerró la puerta que posteriormente había sido cruelmente abierta.- vale, ahora... NECESITAMOS TU AYUDA!- volvió a gritar.

-no, tú necesitas su ayuda, yo he sido arrastrado contra mi voluntad...- murmuró Ryan.

-calla Ry.- le dijo al castaño.- Frank, necesito una poción de amor.- el brujo arqueó una ceja, mirando a Brendon y a Ryan como si fueran fenómenos.

-no puedo, Josh me lo prohibió.- zanjó el brujo.

-pero la necesito...- suplicó Brendon de rodillas.

-no.

-pero...

-nop.

-Fr...

-noop.

-Fraaaaank..... pooooooooorfaaaa- estaba arrastrándose por el suelo, y Ryan sólo se tapaba la cara de vergüenza.

-¿qué gano yo a cambio?- preguntó Frank interesado.

-¿mi eterna gratitud?- dijo Brendon.

-oh, entonces... no.

-FRAAAAAAANK.- pataleó Brendon.

-BRENDOOON.- se burló Frank.

-te daré lo que pidas.- al brujo se le iluminaron los ojos.

-quiero una estrella.- dijo con una sonrisa. Brendon y Ryan lo miraron extrañados.

-¿qué? ¿para qué?- preguntó el cotilla de Brendon.

-si quieres la poción, dame una estrella y no hagas preguntas.- contraatacó el brujo.

-está bien... ¿cómo se entrega una estrella?- preguntó.

-ves una estrella fugaz, y deseas una de las estrellas del cielo. Sencillo.- dijo Frank, como si lo supiera todo el mundo.

-está bien, reúnete conmigo hoy a las 23:00 en el lago.- dijo Brendon feliz. Acto seguido, Brendon salió de la habitación arrastrando a Ryan consigo.

***

-vamos Pete, tienes que salir.- decía Lauren mientras golpeaba la puerta.- oye... yo también estoy jodida, pero lo sobrellevo.- dijo intentando alentarlo.

-eso es mentira... tú estás peor que yo.- dijo el pelinegro desde el otro lado de la puerta.

Lauren rodó los ojos, ya estaba harta, llevaba 10 minutos enfrente de esa puerta esperando a que el vampiro saliera. Así que no le quedó más opción que quemar el picaporte para entrar. 

-¡Lauren! ¡fuera!- decía Pete escondiéndose debajo de la sábana.

-¡por el amor de dios! ¡eres Pete Wentz! tú no te derrumbas cuando te rechazan...- dijo tirando de las mantas, pero Pete ejercía fuerza para dejárselas.