Capítulo 13 - Inesperado

415 50 27
                                    

Haymitch despertó y estiro los brazos mientras bostezaba. Cerro los ojos pero de inmediato los abrió para ver el otro lado de la cama al recordar que Effie ya se había ido y que posiblemente jamás regresaría. Eso hizo que se sintiera un poco triste y desanimado pero tampoco era para ir tras ella..... O ¿sí?

Mientras tanto, Effie, no salía de la habitación desde que llegó al Capitolio ni siquiera comió en todo el día. Eso les preocupó a sus padres.

—Effie, cariño. ¿Tienes hambre? —preguntó su madre desde la puerta.

—Ya cene mamá, gracias.

—¿Y qué es lo que cenaste? -preguntó su padre.

—Por favor, solo quiero descansar. A sido un viaje muy agotador.

Ellie y Erwin se miraron con más preocupación. Sabían que ella estaba así por la falta de presencia de Haymitch, "su esposo". Pero aun así, el padre de Effie no quería aceptarlo.

—Está bien, te dejamos descansar pero solo recuerda que mañana viene la familia....

—Así que no quiero que estés encerrada el día de mañana —ordenó su padre.

—No se preocupen. Buenas noches —contestó Effie, fingiendo inútilmente que no pasaba nada.

Al día siguiente, alguna familia y amigos de Effie se había reunido a la casa Trinket. Con regalos caros y extravagantes para la feliz pareja Abernathy Trinket.

La fiesta la habia organizado Ellie dias después de que le dijeron que su hija estaba casada y con un vencedor. Organizo la fiesta en grande como se solía hacer. Solo para darle una buena bienvenida a su querido yerno. Pero fue una lástima para Ellie que no haya querido venir. Se entristeció pero tenía que seguir con la fiesta con una gran sonrisa. Mientras tanto, Erwin le agradaba la idea de no tener a Haymitch aquí, ya que había invitado Alexander Grey. Todo su plan estaba a la perfección.

Effie se encontraba arreglando, dando el último toque a su maquillaje. Tenía puesto un vestido plata mate con lentejuelas, que además tenía un escote largo por detrás y con un corte ceñido al cuerpo, que hacia lucirse sensual y elegante. Era hermoso y más si las lentejuelas reflejaban un brillo espectacular que sin duda atraería muchas miradas pero.... aun así no tenía muchos ánimos. Se puso su peluca blanca, con rizos y brillos. Ya estaba lista para salir y también para contar toda la verdad.

—¿Por qué tarda tanto Effie? —preguntó el señor Trinket.

—Ya la conoces, se tarda mucho para arreglarse pero ¿Cuál es la prisa, cariño?

—Que es de malos modales no saludar a los invitados. Todos la quieren ver. Después de la rebelión, muchos no la han visto.

No solo por eso quería la presencia de Effie, también era porque en pocos minutos llegaría el empresario Alexander Grey o más bien ahora.

—¿Como esta, señor Trinket? -Saludó Alexander con una sonrisa radiante.

Sin duda él era muy apuesto y joven pues tenía la misma edad de Effie.

—Oh, Alexander. Muy bien, gracias. Me alegra de que hayas venido.

—A mí me alegra que me haya invitado, hace mucho que no veo a mi querida amiga. Que por cierto, ¿dónde está?

—No te preocupes querido. En unos momentos baja —contestó Ellie.

—Mis más sinceras disculpas, señora Trinket. No la había visto, ¿Como esta? —Saludo

—De maravilla querido, gracias. Si me disculpan ire a hablar con los demás invitados. Me dio mucho gusto volverte a ver. Ya estás muy grande. Con permiso.

Se quedaron un rato platicando después de que se retiró Ellie y en pocos minutos se retiró Erwin al ver a su hija. Dejando a ellos dos solos.

—Effie, que bella te vez hoy —dijo, abrazándola-. No sabes, cuanto te extrañé.

—Gracias, Alex. También te extrañé demasiado -respondió, mientras lentamente se separaban—. Cuéntame, ¿qué has hecho? ¿Aun sigues trabajando en la revista Capitol Couture como Jefe?

—No solo sigo trabajando. Ahora soy el dueño.

—¡Lo dices enserio! ¡Es maravilloso! ¡Felicidades!

—Gracias.

—¿Y desde cuando eres el dueño?

—Después de la rebelión. El dueño murió y no había heredado sus acciones. Así que me pasaron la empresa a mí por tener acciones mayoritarias.

—Lo siento mucho, no lo sabía.

—No te preocupes. Mejor dime que hay de ti, Effie. Me contaron que estas casada.

—Ehh.... Si, bueno es que... Yo...

—¡Mírala! Ahí está nuestra querida sobrina —interrumpió la tía de Effie- ¡Que hermosa estas! —dijo contemplándola para después dar un gran abrazo— Te extrañé, querida. Me tenías muy pero muy preocupada.

La tía de Effie es hermana de Ellie Trinket. Ellas tienen el mismo carácter. La única diferencia es que su tía es regordeta.

—Yo también la extrañe tía y... no es por ser grosera pero podría aflojar un poco el abrazo, es que no puedo respirar.

—Oh, sí. Lo siento mucho querida. Es que ya te extrañaba.

—No se preocupe.

—Tan dulce como siempre, ya quiero ver a tu esposo. Me dijeron que estabas casada pero la verdad es que no se con quién.

—Eh... Yo....

—¡Hola, prima!

Todos los familiares y amigos de Effie la rodearon para saludarla y preguntar por su esposo, mientras ella no respondía nada al respecto de Haymitch. Pero ya era momento de decir la verdad. Así que se disculpó y subió al pequeño escenario y tomo el micrófono.

—Pido por favor su atención. Gracias. Bueno, les tengo que decir algo muy importante.

Todos miraron a Effie con gran atención. Eso hizo que se pusiera aun más nerviosa. Cerro lo ojos por un momento y respiro hondo para después hablar pero alguien la interrumpió y le quito el micrófono.

—Hola a todos, soy Haymitch Abernathy. Esposo de Effie....

----------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

¡¡¡OMG!!!

¿Quién pensó que Haymitch se quedaría en el distrito?

Espero que les haya gustado :)

¡Dejen sus comentarios!

¡Bye, bye! Los quiero

~A

P.D: La razón que dije de que iba a terminar la historia era solo una "pequeña" broma de Halloween. ¿Enserio si creyeron que ya la terminaría? Pero si solo vamos al principio de la aventura xD

(Por favor no me maten)

¡Feliz Halloween!

Mr & Mrs Abernathy (De Mentira)Wo Geschichten leben. Entdecke jetzt