Capitulo 8

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Pov Christian

- Pase,- digo al escuchar un toque en mí puerta. Alaia entra y le sonrió mientras camina hacia mi con una carpeta en su mano,- En que puedo ayudarte Alaia?,- saboreo cada letra de su nombre mientras pronuncio su nombre.

- Quería pedirle que revisara los informes para la junta de mañana, encontré unos cálculos que ha mi parecerér no estan bien.- la miro sorprendido y tiendo mi mano para que me pase la carpeta, lo hace y nuestros dedos se rozan haciendo palpable esa corriente, esa tensión que hay entre nosotros y que en tres días a incrementado al 100%.

Le pido que me muestre y creo que esa no fue una gran idea. Su cercanía me hace sentir pequeño mientras que el olor de su perfume que me resulta tan conocido me embriaga.

" Concentrate Grey,- ríe mi subconciente pero luego se burla al saber que es imposible"

- Es cierto,- confirmo al ver el error del informe,- Puedes pedirle Andrea el primer archivo de este informe para que lo revisemos juntos.

- Por supuesto,- su voz esta llena de emocion y cuando la miro estamos solo a centímetros de nuestros rostros, trago en seco al verla morder su labio y aunque mis manos pican por tocar la suave piel de su rostro, ser yo quien bese y muerda su labio me contengo. La miro a los ojos y esa voz se reproduce en mi mente.

" Doy fe y testimonio que esos labios son deliciosos. Pero me gustaría ser yo quien los muerda".

- Que te lo impide Christian. Besame"

- Esta bien Señor Grey?- la pregunta de Alaia me trae a la realidad la miro y parece preocupada.

- Si solo fue un dejavu como dicen,- intento sonreír,- Entonces la carpeta y un café?

- Muffin o bocadillo?.

- Bocadillo por favor.- ahora me preguntó como sabe que en las tardes prefieto algo salado en vez de un muffin.

- Saliendo en cinco,- díce y eso me recuerda a Gail.

Una hora después hemos resuelto el problema y mientras Alaia hace unos apuntes, me permito el inmenso placer de observarla detenidamente es realmente hermosa. No me imagino lo que debió haber sufrido cuando su esposo murió, salir adelante por sus hijos aunque su alma estuviera destrozada, estar sola durante el embarazo, el día que nacieron sus hijos, ser padre y madre para ellos.

-Disculpa la intromisión Alaia
¿Te puedo preguntar algo?- digo y me remuevo incómodo en mi silla.

-Claro.- deja el bolígrafo sobre la carpeta y me mira.

-¿Cómo falleció tu esposo?,- sus ojos se abren como platos y veo un deje de tristeza en los mismos. Que estúpido soy, para que pregunto eso? Para que remover esa herida?,- Si es algo incomodo para ti no...- ella niega, un gran suspiro se escapa de su boca y luego comienza a hablar.

-Una noche íbamos de regreso a casa después de una cena,- cierra los ojos recordando ese momento.- Estábamos parado en el semáforo esperando la luz verde, un camión aparecio de la nada y nos embistio, un mes después lo perdí,- su voz se quiebra mientras lágrimas ruedan por sus mejillas.- Desde esa noche cayo en coma, no sabia que hacer, yo solo lo quería de vuelta, lo necesitaba mas que a nada, me perdí con el y mi alma se cubrió de una terrible sombra, quería morir por no poder estar a su lado. Los dias se convirtieron en noches. Noches eternas,- agrega y sonríe con tristeza.- Pero ya no eramos solo el y yo, dos angelitos necesitaban de mi y eso hizo que mi vida recuperara la luz que el se llevo.

-El nunca supo de la existencia de los bebés?, -Susurro.

- Si,- sonrie con ternura,- El estaba fuera de si con mi embarazo, no dejaba de acariciar mi vientre y hablarles,- la veo limpiar sus lagrimas,- Todos los golpea que recibio fue por cubrir mi cuerpo con el suyo.

Te Quiero De VueltaWhere stories live. Discover now