Cap. 17.- Melancolía con sabor a sangre

40 4 0
                                    

“Ardería por tí cada vez que escuche tu nombre” - Slow Burn -

Debido al incidente del edificio las clases se suspendieron, al igual que el ensayo programado, por lo que Alex permaneció encerrada en su habitación gran parte del día.

Durante ese tiempo se dedicó a examinar la Death Note. Había visto que sí funcionaba de primera mano, pero estaba convencida de que debía tener algún truco. Para ella, el mero hecho de que anotaras el nombre de alguien en una libreta y ese alguien muriera segundos después era algo demasiado bueno para ser verdad. Era demasiado sencillo, así que debía haber algo.  

Sin embargo no hallaba nada, así que luego de revisar el cuaderno al derecho y al revés, Alex decidió dejarlo y salió luego de guardar la libreta en su bolso.

Fue a la cocina y tomó una caja de jugo de arándano; con la caja en mano deambuló por la mansión sin tomar un rumbo fijo. Sabía donde se encontraba cada hermano y no estaba de humor para lidiar con ninguno, por lo que los evitaba a como fuera posible y fue a dar al salón de música. Su mirada cayó en el piano y de inmediato se dirigió a él.

Sentada frente al piano, Alex observó el lugar, lleno de instrumentos. Había violines, flautas, violas, pero ningún chelo, y eso le hizo recordar a Giselle, que tocaba el chelo.

“I burn for you every time I hear your name
When I think I see your face, I know, it must be madness
I feel the sting striking at me like a match
Anything to bring you back - if only for a moment”

Cuando menos lo esperó, Alex tocaba el piano mientras cantaba la canción favorita de su hermana, la que tanto se había esmerado en aprender al tiempo que ella la aprendía en piano. Cerró los ojos, dejándose llevar por la memoria.

“I can feel your slow burn growing in me
Everywhere I go, you're right there with me... holding on, ever long
Wish I could forget I could not remember, all I have left is the ash and embers
Permanent. Smoldering”

Recordó la única vez que habían tocado juntas esa canción. Giselle estaba nerviosa ya que temía que no le saliera bien y el ensayo fuera un fracaso, pero Alex la tranquilizó asegurándole que todo iría bien.  Y, en efecto, todo fue bien.

“Just like a slow burn, stay with me forever
I can't let you ever fade away
Just like a slow burn, say you'll never let me down and never go out”

Finalmente, Alex abrió los ojos y se enfrentó a la realidad. Había estado llorando en silencio sin darse cuenta y se secó las mejillas y los ojos. Ya había sido suficiente de llorar.

-Ibas muy bien- dijo una voz en una esquina.

-¿Desde cuando estas ahí?- preguntó Alex con voz monocorde.

Shuu volteó a verla y se puso de pie.

-Eso no te importa- dijo-. Este es mi salón y puedo estar aquí cuanto quiera.

-Déjame en paz.

Alex rodó los ojos y le dio la espalda, dirigiendose a la ventana. No iba a ponerse a discutir en ese momento. Shuu soltó una risita.

-Buscas algo que nunca vas a tener aquí- dijo-. Que mujer más ilusa.

-¿Qué tienen ustedes contra la paz?- preguntó Alex.

-Nunca estuvo aquí.

Alex volteó, encontrándose con el mayor a poca distancia de ella. Dio un paso atrás, chocando con la pared. Shuu la observó atentamente volviendo a su expresión sería.

-Estuviste llorando- dijo.

-¿Alguna vez perdiste a alguien?- preguntó Alex-. Alguien que fuera importante para tí…

Alex se interrumpió, mirando a Shuu, y remató:

-¿Alguna vez hubo alguien importante para tí?

Los ojos azules del vampiro se llenaron de una profunda tristeza y susurró:

-Edgar…

Pero al instante siguiente volvió al desinterés de siempre y se agachó mordiendo a Alex en el cuello. La muchacha no perdió tiempo y lo mordió en la nuca, observando sus recuerdos. Vio a un niño feliz, acompañado de otro, castaño y desgarbado. Los dos se divertían en el bosque.

Alex se separó bruscamente. Ese niño era parecido a alguien que conocía,  a alguien que había visto hacia poco. ¡Ese niño se parecía a Yuma Mukami!

Shuu la miraba sorprendido, y Alex le mordió en otra parte del cuello, saboreando la sangre del primer hijo hasta que él cayó desfallecido.

Le sorprendió que su sangre estuviera llena de energía al ser Shuu un ser muy perezoso. Y salió del salón de música rápidamente.

Atrapada entre mundos (1/2)Where stories live. Discover now