Capítulo 48.

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Especial fin de año -> 1/2

2 meses después.

Jugando con el ramo de tulipanes naranjos en sus manos Camila apreció con sus ojos marrones cómo Nathan, el padrino de la boda, le sonreía ampliamente mientras Lauren le quitaba las flores para pasarle la alianza de oro.

Oyendo el calmado oleaje de la playa, y observando cómo las personas detallaban lo que estaba pasando, la pediatra fijó sus ojos en el hombre que estaba oficiando la boda. El nudo que había tenido en la garganta, desde que había caminado por la playa para encontrase con Lauren vestida con aquella delgada y holgada camisa blanca y un pantalón corto del mismo color, pareció apretarse un poco más. La morena respiró hondamente al sentirse hermosa en aquel sencillo vestido color blanco que le llegaba hasta los tobillos.

Sintiendo la agradable temperatura de la arena caliente en sus pies descalzos Camila volvió a detallar la emocionada sonrisa de Lauren quien le miraba con los ojos agolpados de lágrimas.

- Yo, Camila Cabello, prometo amarte y cuidarte con todo mi corazón. Prometo que cada día te entregaré lo mejor de mí, y que te ayudaré para que tú sientas que eres lo mejor para mí, para tu familia y para las personas que te rodean... - Dijo para luego quedarse en silencio.

Lauren le miró impaciente mientras el silencio se veía interrumpido por los ladridos de Sam que estaba sentado cerca del lugar junto a Taylor y Mike.

- ¿Saben qué? – Alzó la voz Camila. – Quería ser bastante protocolar en esta parte de la boda... Pero... La verdad es que les explicaré por qué me estoy casando con ésta hermosa chica.

Un par de risas se escucharon a la vez que Lauren reía entre dientes sin quitar la expresión de nerviosismo de su rostro.

- Cuando volví de Uganda, tenía una idea fija de asentarme finalmente en Miami, una ciudad que acogió a mis padres y a mí de pequeña cuando tuvimos que salir de las difíciles situaciones que vivimos en Cuba y México... Poco iba a imaginar lo que pasó desde que volví. Si les hablo desde el inicio, deben saber, que Lauren fue totalmente fría y desinteresada conmigo la primera vez que hablamos...

Lauren hizo una mueca y Nathan soltó una carcajada.

- Incluso se negó a ayudarme con un par de cirugías que necesitaban los pacientes del servicio de cirugía infantil del hospital donde trabajo... Y por aquellas situaciones de la vida unos días después nos encontramos en un bar donde ella estaba bebiendo tequila mientras yo bailaba salsa, y por alguna razón u otra aquel día le hablé y días después ella me invitó a cenar... Claramente mi baile le sedujo.

Negando con la cabeza la cirujana frunció el ceño mientras Sinu y Alejandro reían fuertemente sentados cerca del lugar.

- ¡Me invitó a cenar comida mexicana y ella no tenía idea qué pedir! – Apuntó. – Fue tan tierno que yo ya me sonrojaba cada vez que me miraba con ese par de hermosos ojos color esmeralda que tiene... ¡Por favor! Necesitan verlos más, a veces cambian de tonalidad y nunca mienten... Y por supuesto, seré yo quien vea aquellos ojos todos los días de mi vida.

Emocionándose con aquellas últimas palabras Camila suspiró levemente para acariciar una de las manos de la ojiverde quien no le quitaba la atención.

- A través de todos aquellos meses comencé a conocer a una hermosa persona... Una persona que detrás de toda aquella frialdad, prepotencia, e indiferencia escondía a ésta chica que ahora ven aquí... Aquella que puede escucharte con la mayor atención del mundo, la que puede cuidarte aún en silencio, y la que te recodará día a día lo mucho que vales... Lauren es así, es increíble... Tan increíble como para comenzar a estudiar un idioma por y para ti.

Mi mejor medicina. (CAMREN)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora