Rec° .- JIHAN.

Capitulo 1.-

Joshua sabía que el lunes era el peor de la semana, el día con más tráfico y personas mal humoradas en las calles de la ciudad. Sintió el sol colarse por la cortina y supo que algo no calzaba, los únicos días que el sol lo saluda en la cama era los días sábados y domingo, y seguro estaba, de que el fin de semana había terminado. Se removió en la cama y con mucha pereza tomó el reloj entre sus manos para mirarlo más de cerca, al notar que eran las 8:28 de la mañana no sabe cómo, pero en segundos ya estaba sentado buscando sus zapatos de levantar.

- Mierda – maldijo en voz alta - cariño despierta nos hemos quedado dormidos, son pasada las ocho y media de la mañana – despertó a su compañero quien lo atrajo a su lado para seguir durmiendo – Vamos levántate, si no llegamos a la hora te vas a meter en problemas – Dicho esto se levantó de la cama, se acercó al armario y cogió una toalla.

- ¡Buen día! Que romanticismo tienes para despertarme, es lo que más me encanta de ti – sin mostrar ánimos para levantarse, lanzó las sabanas aun lado rodando por la gran cama.

- Venga, mueve ese trasero – Joshua besó la piel visible de su espalda y retomó su camino al baño.

- Así está mucho mejor – respondió de mejor ánimo, aun luchando con las sabanas.

Joshua ingresó al baño para tomar una rápida ducha esperando despertar con un poco de agua fría, a los minutos ya no era el único ahí, el otro como de costumbre ingresó a la ducha cantando y haciendo alboroto.

- Nunca es tarde para unos mimos – Dijo dejando un par de besos en su cuello.

- Si ¿sabes cuándo es tarde? Cuando tu trabajo depende de ello pequeño travieso – Joshua continuó de espaldas sacando el Shampoo restante.

- Que aguafiestas - se quejó - necesito un poco de motivación para ir a trabajar – Rodó la cintura de su novio con ambas manos, acercando su rostro al cuello del contrario recibiendo un beso de Joshua.

- Bien, con eso te conformas por el resto del día.

- Eres muy injusto – lo sintió removerse tiernamente a su espalda.

- Vamos, dúchate rápido – Dijo saliendo de la ducha.

Tuvieron que arreglarse en tiempo record, tanto que ni tiempo para tomar desayuno tuvieron, subieron al auto de Joshua y se dirigieron al trabajo.

- ¿A qué hora termina tu turno hoy?

- A las 7

- ¿Por qué tanto? No crees que es muy abusivo.

- Estoy tomando horas extras, necesito el dinero antes de que termine el mes

- Sabes que no es necesario, puedes venir a vivir conmigo.

- Aun no hablo con mamá del tema.

- ¿Y qué esperas?

- Que mi hermano pueda venir de china - El resto del viaje fueron un par de canciones cantadas.

Cinco minutos fueron los que llegaron tarde al trabajo, estacionaron el auto y subieron rápidamente al ascensor, separándose en el primer piso donde el más alto trabaja, la cafetería.

- Asegúrate de tomar desayuno, si quieres puedo prepararte algo mientras.

- Hoy me toca terreno cariño, yo me las arreglo.

- Está bien, pero promete que lo harás.

- Lo prometo – canturreo – Ahora vete, te amo.

- te amo – Besó su mejilla y lo vio desaparecer mientras las puertas de ascensor cerraban.