Rec° .- JIHAN.

Capitulo 08.-

Joshua miraba detenidamente las facciones del rostro de Jeonghan, quien se encontraba sobre sus piernas, sin poner atención a lo que estaba diciendo realmente. Cuestionándose cómo de aquella boca, la cual se estaba obligando a no mirar, podían salir tantas mentiras. El castaño podía ser una persona de un muy escaso amor propio, pero tenía un límite, la traición.

Jeonghan llegó aquel día a su departamento luego de insistir. No, más que eso. Exigir por dos semanas seguidas que tuviesen una conversación. Quien entró como un torbellino al tomar el silencio del castaño como un ''si, adelante entra a joder mi vida. Otra vez''.

- Hey, lejos de mi cocina – Lo amenazó al verlo entrar a su lugar sagrado – suficiente con que estés dentro de mi departamento – levemente lo jaló del brazo hacía atrás - ¿Qué necesitas? – miró las manos llenas del pelinegro.

- Traje helado – sonrió amplio – tenía antojo – arrugó la nariz sonriendo otra vez– y para ti prepararé un café.

- Ya tomé, gracias.

- No te pregunté, es un regalo.

- No lo quiero gracias.

- Sabes – se acercó peligrosamente al castaño dejando sus narices a escasos 10 centímetros – el papel de chico malo te queda muy, muy mal.

Joshua al sentir el aliento de Jeonghan sobre sus labios sintió que dejaba de pensar con claridad. Tenía olor a chocolate, café o una mezcla de ello. Esto lo hizo traer una imagen no deseada a su mente.

- Mira – se alejó lo más que pudo sin parecer incomodo – Estamos en mi hogar y aquí se respetan mis reglas ok. Agradece que siquiera estas aquí dentro. Primera regla, mantente alejado de mis cosas. Ese cuadrado donde estas de pie es lo único que vas a tocar hasta que yo diga lo contrario – Jeonghan rio. Para el pesar de Joshua no se tomaba nada en serio – Segunda regla, vamos a mantener una distancia prudente, no quiero malentendidos – Jeonghan se acercó, Joshua se alejó – si no cumples te vas, es simple. Puedo llamar a la policía porque un intruso está aquí y tema resuelto.

- ¿Terminaste? - Jeonghan rodo los ojos y se mantuvo en su lugar.

- No. Tercera regla, vas a decir lo que tengas que decir y te vas.

Finalmente terminaron en el sofá. Joshua a una distancia incomoda del pelinegro, mientras este se encontraba entretenido sosteniendo un bote de helado entre sus manos y una cuchara llena, yendo y viniendo de su boca.

- ¿Cómo has estado? – preguntó el mayor relajado acercando una cuchara con helado a la boca de Joshua.

- No somos amigos, ve a lo que viniste.

- Si insistes - Dicho esto Jeonghan sonrió maliciosamente acercándose al castaño.

- Te voy a golpear – lo amenazó antes de que pudiese llegar a su lado.

- Bien – respiro – vine aquí para disculparme, porque es algo que te debo hace mucho tiempo. Me comporté de una forma muy fea y no te lo merecías. En el tiempo que no tuvimos contacto pude pensar sobre muchas cosas y una de ellas es que fui muy injusto contigo, y en su momento no tomé conciencia de la magnitud de mi actuar. Y como hoy estoy de vuelta, no sé por cuanto tiempo, creo que siempre has sido una persona importante en mi vida y espero que nos llevemos bien, no te voy a pedir demasiado, te conozco y sé que para ti no será fácil llevar una relación de amigos, pero es la consecuencia de mis actos y lo asumo. Ahora estoy abierto a cualquier tipo de duda que necesites que aclare.

- No eres sincero – rio irónico – me sorprende que aun creas que soy el imbécil de antes, bueno, no me sorprende tanto. Sé porqué haces toda esta dramatización, tu capacidad de manipularme ya no funciona Jeonghan – lo miró sin expresión - eso quedó en el pasado, técnicamente ya no me conoces como piensas.