CAPITULO 23

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James Maslow estaba sentado en su oficina, que se ubicaba en su casa, con las manos recargadas en el escritorio y estas tapaban su cara. El estrés que había estado sufriendo era horrible, primero _____(TN) no había escogido a él, pero al parecer eso era lo de menos. Cada vez se acercaba más su boda y su madre, su padre, sus dos hermanos y la familia de su prometida, incluyéndola a esta lo había estado presionando.

James se talló los ojos y miró la computadora. ¿Por qué tenía que pasarle todo esto a él? Se encontraba en su casa solo. Halston estaba comprando las decoraciones para las mesas en la fiesta de la boda, ¿por qué se le había ocurrido vivir con ella? La quería mucho, pero era un problema.

Hizo una mueca y se dio cuenta de que había recibido un mensaje por e-mail. ¿Por qué no lo dejaban de molestar? En esos últimos 3 días no había podido dormir. Cada vez deseó haberse quedado en Florida, pero no. Tuvo que haber decidido viajar hasta San Diego para iniciar la carrera de psicólogo. Siempre pensó que él sería abogado, médico. Lo que sea, termino por ser psicólogo.

Miró el e-mail y se dio cuenta de que era de la secretaria de Kendall Schmidt. "Carajo. ¿Qué quiere?". James no estaba enojado con él, y ni siquiera estaba sentido, parte de su estrés se debía a lo que había pasado esos últimos meses, pero ahora no le importaba tanto. Abrió el correo y lo leyó, este decía:

Dr. Maslow,

El Dr. Schmidt me pidió que le envíe este correo, porque, se requiere su presencia mañana, el 13 de Junio del 2013 a las 17 horas en la sala de juntas. Aunque no sea su día de trabajo, el Dr. Schmidt quiere hacer un trato con usted (que no le podré justificar de que se trata, ya que el Dr. Decidió decírselo el mismo mañana), si decide ir por favor conteste confirmando su asistencia. En caso de no poder, contacte al Dr. Schmidt a este teléfono: 334-224-113.

Espero verlo pronto,

Arriane Gillies, edificio 10.

James se desesperó. "¡¿Un trato?! ¿Para qué quiere hacer un trato conmigo?!" Cerró los ojos y suspiró. Mañana tenía el día libre, a menos que quieran que vaya a comprar el traje para la boda. Iba a ir con Kendall, que fácil sería. A menos que su familia hiciera un drama para que vaya a hacer algo. Lo pensó por bastante tiempo y marcó el teléfono que decía en el correo. Prefería confirmárselo a Kendall que a su asistente. El teléfono sonó unas cuatro veces cuando alguien contestó.

-Kendall Schmidt, a sus órdenes.

James sonrió.

-Kendall, te veo mañana a las cinco de la tarde.

-¿No se supone que me ibas a marca solo en caso de que no pudieras ir?

-Si -dijo James en tono burlón-, pero, preferí confirmártelo a ti.

-De todos modos, envíale el correo a Arriane, puede que me haga una cita mañana a esa hora si tú no se confirmas.

James revoleó los ojos.

-Lo haré.

-Muy bien, adiós.

-Adiós.

Y Kendall colgó.

James suspiro. "Que problemas trae este tío." Pico el botón de "responder" que se encontraba justo arriba del correo y escribió:

Srta. Gillies,

Estaré encantado de asistir a la junta con el Dr. Schmidt, pero, por favor dígale que si me tardo más de diez minutos en llegar, que no me espere. No le prometo llegar puntal. Por favor, le pido que se lo comunique al Dr. Schmidt.

Gracias por la invitación,

James Maslow.

James se pasó la mano por el pelo y se rio. "Vamos a ver que piensa Kendall de eso." Escuchó como la puerta se abrió y oyó a su prometida llamarlo a gritos.

-¡James! ¡Ven! Tienes que ver lo que conseguí para las mesas.

James revoleó los ojos.

-Ya voy.

Salió de la oficina y caminó hacia la sala, como le desesperaba ver lo que Halston comprará. Siempre se tardaba dos horas en explicarle porque el color que había elegido, si simbolizaba su amor, y James siempre quedaba casi dormido. Haciendo que pierda horas de trabajo y de sus horas de sueño.

-¡Mira este mantel! -Dijo la chica con una sonrisa, sosteniendo un pedazo de tela color crema-, ¿no es precioso?

James sonrió forzosamente. La verdad, es que no le importaba nada. Un día le dijo que ella debería escoger todo, que él lo aceptaría felizmente (feliz porque no se aburriría). Ella solo se limitó a mirarlo ofendida y a decirle que la boda sería de los dos, y los dos tenían que estar de acuerdo en todo. James aceptó de mala gana, ¿qué podía hacer?

-Eh... si, muy bonito -dijo sentándose en el sillón-, oye, ¿Halston?

-¿Qué pasa?

-¿Qué pensaste de _____(TN)? -preguntó James. Le importaba lo que pensará Halston de ella, ¿qué tal si le cae mal? ¿Si no le agradó? James cerró los ojos, esperando a que eso solo sea un mal pensamiento.

-¿_____(TN)? ¿La Dra. Fray? -preguntó Halston.

James asintió.

-Oh -dijo la chica doblando el mantel y poniéndolo en la mesa-, pues, no le hable lo suficientes para forjar una opinión concreta de ella. No hay mucho que opinar.

-¿Qué harías si te digo que es mi ex-novia?

Halston abrió mucho los ojos y luego ladeo la cabeza.

-¿Cómo que tu ex-novia? Llegamos aquí hace dos meses.

-Ay, mi amor. Tantas cosas que no sabes de mí... ella fue mi novia cuando yo vivía en Florida, mucho antes de conocerte.

-Oh... pero, ya no sientes nada por ella, ¿verdad?

James miró hacia la ventana e imagino a _____(TN) en los brazos de Kendall, besándolo. James suspiro y cerró los ojos.

-Ya no puedo...

"Volverte A Encontrar" [Kames y Tú] RománticaWhere stories live. Discover now