30.

1.8K 164 22
                                    

Simón.

— Ámbar...— me separé lentamente de sus labios y tome su rostro con ambas manos— ¿Qué ha pasado bonita?

— Es una mierda de persona Simón.— habló con la voz completamente quebrada a la vez que seguía apretando con sus manos mi cuello y enredando sus piernas en mi torso para así no caerse— ¿Cómo pudo hacerme todo esto, cómo pudo jugar así con mi identidad?

— ¿Se puede saber qué les pasa?— apareció Jazmín y gire rápidamente mi cabeza para fulminarla con la mirada sin dejar de sostener a Ámbar — ¿Qué están haciendo? — revolee los ojos— Ámbar me dijiste que no te gustaba Simón ¿Por qué me haces esto?

— ¿Qué te pasa ti?— pregunté en un tono de fastidio— ¿Tú no ves que Ámbar esta mal, qué esta destruida?  — dije obvio y sentí a Ámbar aferrarse más a mí para esconder su cabeza en mi hombro y así refugiarse en mí— Y tú en vez de escucharla y apoyarla porque según tú eran amigas estás aquí haciéndole reproches por un chico y en este caso soy yo en el momento menos indicado.— bajó su cabeza encogiéndose de hombros— Le has dicho a Ámbar que creías que ella era tu mejor amiga y te había fallado pero aquí la única que no se está comportando como una eres tú y solo por un hombre Jazmín, eres mi amiga pero por favor madura, la has dejado sola cuando más te necesitaba a ti y a Delfina, pero al parecer no les importó todo lo que Ámbar les contó y no era que se había comprado la última linea de ropa sino que se trataba de su identidad pero al parecer a ustedes los único que les importa es la moda y conseguir material para el estúpido Fab and Chic, ¿Por qué no suben un vídeo titulado "hipocresía", el cual se trate de lo malas amigas que son entre ustedes con Ámbar, y que la peor de todas eres tú, que armas todo un escándalo por mí? ¡¿Es neta?! ¡Hay cosas en la vida mucho más importantes y en la mía ahora es Ámbar! — todos abrieron sus ojos como platos no solo por lo que acababa de decir sino ante mi tono tan hiriente y arrogante hacía Jazmín— Y no tiene nada de malo si ella gusta de mí porque no te está traicionando ya que entre ustedes dos esos famosos "códigos" de amistad no existen porque especialmente tú acabas de demostrar que jamás fuiste una verdadera amiga, con permiso.

Termine de decir, y coloque mis ambas manos en la espalda de Ámbar, apretándola hacía mí para salir del Jam and Roller y comenzar a caminar sin rumbo alguno, lejos de todos y todo lo que podía hacerle mal a mi novia quién seguía sobre mi torso sollozando en silencio, rota por dentro.

— Amor...— pronuncié y Ámbar levantó su cabeza para fijar su mirada en mí— ¿Quieres contarme lo que ha pasado allí?

— Sharon me lo confesó todo— sus ojos volvieron a llenarse de lágrimas y mi corazón a estrujarse, no podía verla así de triste ¿pero como no estarlo— Me dijo que le advirtió a Marisa Mint, más bien a Juliana que no se acercará a mi porque sino le iba a ir muy mal y por eso mismo para que yo no me entere de la verdad le pago a la tal Sylvanna para diga que es mi mama contándome la misma historia que Juliana me contaría el día que me dijera la verdad, que me abandonó porque no podía mantenerme.

— Es un monstruo.— hablé en un hilo de voz negando con mi cabeza, era increíble como una persona podía tener tanta maldad dentro de ella— Es un completo y horrible monstruo menos mal que te has ido de allí.— dije en medio de un suspiro y besé su frente— ¿Y por qué antes te había dicho que eras Sol Benson?

— No lo sé.— se encogió de hombros— Amanda me contó que escuchó a Sharon hablar con Rey diciéndole que me hacía creer que era su sobrina porque la verdadera estaba viva y ella quería proteger su fortuna.— abrí mis ojos ¿le importaba más el dinero que los sentimientos que destruyó de Ámbar?— Y de Sharon me lo puedo esperar, pero no entiendo porque no me lo contó, si me decía que tenía que fingir ser Sol Benson yo lo hubiera hecho por ella, pero en vez de eso, me mintió y jugó con mi identidad. 

— Dios mio...

— Y hay algo más.— alcé mi ceja — Sharon no es mi madrina, es mi mamá adoptiva.

— ¿Qué?

— Le dije "que bueno que solo seas mi mamá adoptiva, porque no me gustaría compartir la sangre con una hija de puta" y me pegó. — una lágrima rodó por su mejilla y mis ojos se aguaron —Pero la bofetada que me dio no dolió tanto como enterarme de quien soy en verdad y todavía no lo tengo muy claro.

— No quiero que vuelvas a acercarte a ella Ámbar, no puedo permitir que siga lastimándote.

No podía, definitivamente no podía, tampoco podía creer como Sharon Benson era capaz de lastimar a alguien que ahora resulta ser que ella adoptó y nunca se lo dijo. Sabía que era una mierda de persona pero tampoco para tanto. Tenía ganas de asesinarla no solo por haberle mentido a Ámbar sino porque además de eso la había golpeado ¿Con qué derecho? Ella fue la que mintió, la que jugó cinicamente, Ámbar debería haberla molido a golpes, no Sharon a mi novia, a quién le rompió el corazón y seguramente nos llevaría mucho tiempo — a Ámbar y a mí, porque claramente iba a ayudarla en todo momento — recolectar todos esos pedazos que ella quebró para volverlos a colocar en su lugar.

— Yo tampoco quiero.

— ¿Vamos al apartamento?— cambie de tema. 

— No.— negó con su cabeza y se bajo de mi torso volviendo a la realidad— Le pedí a Amanda que rente el departamento que vimos ayer por internet y que nos gustó a ambos— fruncí el ceño sin entender— Y antes de irme de la casa de Sharon me dio las llaves de este, así que quiero pasar la noche en mi nuevo hogar con vos.

— Eres increíble.— hizo una media sonrisa y deposité un corto beso en sus labios— Entonces... ¿Vamos a nuestro nuevo hogar?

Ámbar asintió con su cabeza y me tomo de la mano para comenzar a caminar nuevamente pero está vez con un destino el cual no era nada más ni nada menos que donde pasaríamos tal vez el resto de nuestra vida juntos o al menos eso esperaba.

— Ámbar es mucho más grande de lo que pensé— exclamé asombrado cuando por fin habíamos entrado a ahora nuestro apartamento— ¡Mira esa cama!— me tire rápidamente en esta comenzando a rodar como si fuera tan solo un niño— Ni creas que tú sola vas a pagar esta renta eh.

— Gracias.— dijo sincera cuando se acostó a mi lado en la cama— De verdad gracias.

— ¿Gracias por qué?

— Por esto.— señaló el departamento y la mire algo extrañado— El que te vengas a vivir conmigo es un sueño, no cualquiera hubiera aceptado y ahí esta el punto que vos no sos cualquiera, sos el amor de mi vida Simón.— me regaló una sonrisa y recostó su cabeza en mi pecho— Estás dejando atrás toda tu vida y solo por mí, me defendiste de Jazmín y además de todo eso sos el único que esta ahí para mi.— sonreí por lo bajo y besé su frente— Cuando te miro a los ojos pienso que todo esta bien, siento que de repente todos los pedazos rotos se arreglan con tan solo unas palabras que vos me digas, sos la mejor persona del mundo Simón y no me mereces.— apretó sus ojos y solté un largo suspiro— Definitivamente no me mereces— dijo triste— Pero no pienso dejarte ir nunca porque vos Simón, sos lo único que necesito para ser feliz.

— Ámbar yo siempre estaré aquí para ti y te prometo desde lo más profundo de mi corazón que voy a hacerte feliz.  

 

 

Perdernos. {Simbar}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora