Fragmentos Tomo 2

Los Ojos Que...

... hay muchas cosas

que podemos captar con nuestros ojos,

pero las impresiones más grandes,

son las de los momentos

que atesoramos sin saber ...

"Fragmento dedicado a los ojos que nos permiten captar mucho, pero que, al mismo tiempo, no son valorados en todo su esplendor, relatado en cuatro breves historias, cada una, con una virtud de la vista ..."

1. ... perciben.

El día había comenzado hace algunas pocas horas, pero Brandom se encontraba sentado en su cama, justo al borde con los dedos entre lazados y los ojos cerrados, sus pies colgaban como un péndulo de lado a lado penas rozando el piso con las puntas de sus cadetes desabrochados, sus ojos completamente cerrados y su respiración calma, la obscuridad a todo su alrededor parecía no ser algo tan normal, se escuchan a lo lejos los pasos de su madre sobre la duela del pasillo, se acerca tranquilamente, sin prisa, entonces, el cerrojo de la puerta pasa por la placa metálica que lo detiene y la puerta se abre de par en par, un par de pasos más para al fin alcanzar el sitio en donde Brandom está sentado.

Su madre cruza los brazos al tiempo que se sienta sobre de la cama, el percibe su aroma como aquel que recuerda desde el momento de su nacimiento, un olor dulce y sutil que la acompaña en todo momento se presenta incluso antes de que ella llegue a cualquier sitio, ella lo mira fijamente y extiende sus brazos para poder abrazarlo con mucho cariño, es en ese instante en donde siente esa suavidad tersa de la piel de su madre, sus dedos recorriendo levemente de un hombro a otro por su espalda para por fin encontrarse con su otra mano y ser alado contra ella en lo que parece ser una prueba más de la lastima y pena que siente su madre.

Brandom suspira lentamente mientras detecta la sal brotando de manera líquida de los ojos de su madre, ese olor es inconfundible, sus lágrimas siempre han sido más saladas de lo normal, tal vez porque se trata de alguien que le importa a él en demasía, los sollozos no se hacen esperar y un suspiro largo deja salir todo aquel aliento que ha mantenido guardado desde aquel acontecimiento.

La cabeza de su madre se recarga contra de su hombro, siente como sus cabellos acarician discretamente su piel, su mejilla, su oído y escucha una vez más las palabras que menos le agradan en el mundo, pero más que las palabras el tono de tristeza y culpabilidad en que las pronuncia:

"Lamento tanto lo que paso Brandom, mi pequeño niño, teniendo tan solo unos escasos doce años de vida, perder algo tan importante y necesario como lo es la vista, pero quien esperaría que en aquella clase de ciencias, alguien llevaría algo tan peligroso y más aún, quien se imaginaria que siendo de la misma edad y contando con dicha inocencia, se atreviesen a lanzártelo, aun como broma es algo muy pesado, pero ellos perjuran que fue un accidente aun cuando hay más de un testigo que dice lo contrario, pero vamos pequeño, ellos son personas de dinero, gente con grandes casa y empleos realmente impresionantes, que sin decir más, sueltan los miles o millones de pesos en busca de poder cubrir las tonterías de sus hijos, ahora solo quisiera poder darte aliento, ayudarte a salir adelante, pero no sé cómo hacerlo, tal parece que todo se ha perdido..."

Las lágrimas se cortan mientras que el llanto se intensifica gradualmente, Brandom no abre los ojos, mas no es por el hecho de saber que nada cambiara si los tiene abiertos o cerrados, sino porque él sabe perfectamente que es lo que debe contestar, así que sin más, toma aire y levanta su mano para tomar las de su madre, ella levanta el rostro y se sorprende completamente al mirar que su pequeño a pesar de todo tiene una sonrisa en su rostro, pero lo que más le impacta, es la forma en la que su pequeño, le explica las cosas y trata de tranquilizarla...