Promise This (Versión Español)

6. Superluna

Al día siguiente Sarah estaba de vuelta en las caballerizas con Princesa, cepillando a la yegua después del entrenamiento. Tenía los audífonos puestos y no escuchó los pasos que se acercaban.

"¡Aquí estás!" Exclamó Salem, como su hubiera pasado toda la mañana buscándola.

"¡Hey!" Contestó Sarah, quitándose los audífonos. "¿Qué pasa?"

"Pues, como ya sabrás, se acerca la carrera para mujeres de la Jequeza Fatima, el próximo mes en Abu Dabi, ¿cierto?"

Sarah abrió lo ojos expectante. "Si..."

"¿Quieres participar?"

Ella inhaló y se cubrió la boca con la mano.

"No tienes que, si no quieres..."Dijo Salem encogiéndose de hombros.

"¿Estás bromeando? ¡Si!"

"Entonces más vale que ustedes dos se preparen."

Sarah dio un salto y se volvió para abrazar a Princesa. "¿Escuchaste? ¡Vamos a correr!"

Cuando se dio la vuelta nuevamente, Salem se había ido. Asomó la cabeza y lo vio alejándose hacia la puerta.

"¡Gracias, Salem!" Le gritó con la voz más dulce que pudo, sabiendo que iba a molestarle.

"¡No me agradezcas a mi!" Él gritó de regreso sin detenerse.

Sarah supo lo que quiso decir. Su rostro se iluminó con una idea, pero casi inmediatamente se mordió el labio inferior, preguntándose si debía hacerlo o no.

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Hamdan había estado trabajando toda la mañana con su padre y su hermano Maktoum en el Retiro Juvenil. Él estaba muy involucrado con la causa y se encontraba emocionado por los eventos del día.

Cuando subió al asiento del pasajero de su auto para ir a comer, finalmente pudo empezar a revisar su teléfono por primera vez en horas. Maktoum y el tío Saeed hicieron lo mismo en el asiento de atrás, mientras Saeed Hilal conducía.

Hamdan sonrió cuando vio el mensaje privado de Sarah en Instagram.

Gracias. No vamos a decepcionarte.

Era la oportunidad perfecta para mantenerse en contacto con ella. Él sabía que no iba a tener mucho tiempo para ir a los establos con la apretada agenda que se avecinaba y el viaje que había planeado con los amigos a Uzbekistán. Además, de esa forma, podía hablar con ella en privado.

Hamdan
Yo sé que no. Te sientes mejor hoy?

Sarah
Ni lo menciones... me siento tan tonta al respecto.

Hamdan
Tú te sientes tonta? Yo fui el que te contó todos mis problemas como si fueras mi terapeuta. Me disculpo si fue incómodo.

Sarah
No te disculpes. No lo fue.

Hamdan
Que bueno, porque he estado pensando acerca de lo que me dijiste y tal vez estás en lo correcto.

Sarah
En serio? Entonces, tal vez debería convertirme en terapeuta también! Eso me haría una diseñadora gráfica/jinete de enduro/terapeuta!

Hamdan
Interesante combinación. No sabía que fueras diseñadora.

Sarah
Si, lo soy. Y estoy feliz de saber que mi consejo fue útil.

"Oh, mi adorado príncipe encantador, ¡cómo me gustaría casarme contigo!" Interrumpió Maktoum con una molesta imitación de una voz femenina.

El hermano regordete de Hamdan era una de esas personas que parecía ser muy serias, hasta que se le conocía bien.