30 Días Contigo | Drabbles Jotakak

Día 13

Comiendo helado.

- que extraño, no responden. - dijo Josuke, revisando su celular.

- quizá están ocupados, conoces a ese par, siempre andando de acá para allá. - dijo Okuyasu, sentado frente al televisor de la residencia Joestar-Zeppeli.

- volveré a intentar, prometieron venir. - dijo algo intrigado, aquella inasistencia era extraña, en especial viniendo de parte de Kakyoin, quien era el más responsable de todos ellos.

Volvió a marcar, y después de varios intentos, al fin obtuvo respuesta, o algo así.

- ¿b-bueno? - la cansada voz de Kakyoin le respondió, dándole alivio.

- señor Kakyoin, menos mal, llevo minutos llamándolo, ¿van a venir? - preguntó sin preocupación, sus amigos voltearon a verlo, curiosos por la respuesta de la pareja Kujo-Kakyoin.

- Sí, sí, lo lamento, es que... perdimos la noción del tiempo, pero vamos en camino, tranquilo. - la gentil voz del pelirrojo no lo hizo dudar.

- ¡excelente, los vemos aquí! - fue entonces donde el cansancio de Kakyoin pasó a otra cosa, pues comenzó a sonar más de lo debido, pero de repente calló.

- cuelga ya. - pudo reconocer la voz de Jotaro, y sin más, colgaron, dejando a Josuke más confundido que nada.

Minutos después, la joven pareja apareció en el departamento, Jotaro estaba bastante tranquilo, mientras Kakyoin moría de vergüenza por tanta demora. Solo bastaron unos instantes para que el ambiente se calmara, y todos volvieron a divertirse en familia cómo era debido.

- señor Kakyoin, ¿juega una partida? - dijo Josuke, extendiendo un control de consola al pelirrojo, quien sonrió apenado.

- lo lamento, llevo años sin jugar, no creo ser buen oponente, pero gracias. - y esa respuesta le bastó al chico.

- vaya que es un lío... - exclamó Caesar, quien estaba en la cocina del lugar.

- ¿pasa algo, señor Zeppeli? - comentó Kakyoin, curioso.

- el refrigerador está generando demasiado hielo, y no sé que hacer con él. - respondió en un suspiró, eso era odioso.

Kakyoin reflexionó un momento, admirando como todos se habían despojado de sus cálidas ropas debido a la climatización del lugar.

- tengo una idea. - sonrió, emocionado.

Solo unos instantes después, todos estaban tomando raspados de jugo natural, debido a que Kakyoin tuvo la grandiosa idea de picar el hielo y usar los jugos y cidras del refrigerador para preparar unas nieves deliciosas, aunque muy improvisadas.

- para ser algo improvisado, no está tan mal. - se quejó Rohan, que bebía un raspado de manzana.

- ¡que delicado, esto esta delicioso! - exclamó Josuke, fascinado.

- gracias, supongo. - Noriaki se encogió de hombros, algo apenado, pero sonriente.

Jotaro solo observaba a su esposo, mientras se tomaba su raspado de uva.

- fue una idea bastante ingeniosa, he de decir. - se unió Joseph.

- bueno, esto lo hago con los niños en verano, pero no creí que serviría aquí. - ese comentario hizo reír a todos, vaya que otra historia fuera si esos dos pequeños estuvieran presentes.