Capítulo 9: Zed.

43.2K 2.9K 741
                                    



En multimedia : SELENA GOMEZ & MARSHMELLO - WOLVES

Capítulo dedicado a fanhydeleon ❤️

Mi polla está por explotar. Le he dicho que tendré paciencia y he querido sonar dulce y romántico al explicarle que no pienso tocarla hasta que ella lo desee porque por alguna extraña razón me siento en desventaja con el puto Bill. Al parecer ese idiota la ha conocido mejor que yo en el corto tiempo que tiene en la vida de Clari y me refiero a esa parte afectada por lo que pasó. Es muy difícil contenerme si la tengo en mis brazos, si la beso, si siento la forma en la que su cuerpo se acopla tan bien al mío.

—¿De verdad quieres que me quede? —pregunto ilusionado. No me importa si sólo desea dormir, tendré que enviar a mi miembro directito a la mierda, pero, el simple hecho de volver a dormir junto a ella hace que aparezca un maldito y jodido cosquilleo en mi garganta. Creo que mis niveles de ridiculez han sobrepasado los límites justo ahora.

—Quiero.

—No te quiero forzar a nada, Clari.

—Amber no vendrá y aún temo dormir sola, me da mucho miedo que él vuelva a aparecer. Sólo te ofrezco dormir conmigo, mi cuerpo pide más pero mi mente se resiste —confiesa. No necesito indagar quién es "él", pues no es otro más que el perro de su padre.

Al escuchar sus palabras las imágenes de aquel puto día vuelven. Clarisa tirada en un charco de sangre, Clarisa con sus muñecas cortadas, Clarisa muriendo, Clarisa más destrozada que nunca, Clarisa alejándose de mi lado. No me arrepiento de haber hecho lo que hice con ese hijo de puta, sí me arrepiento de haberlo dejado vivo. Asiento comprendiendo de golpe todo lo que ha tenido que superar con la ayuda de otros, no con la mía. No he estado con ella todo este tiempo y ya sé de sobra que fue así porque lo decidimos de esa manera. Es imposible no sentirme culpable cuando tampoco la busqué.

—¿Has vuelto a saber de él? —En algún punto tenía que preguntarlo. Dudo que este sea el momento adecuado y la verdad es que jamás habrá un momento idóneo. No cuando el bastardo que te dio la vida intentó matarte. Maldito cobarde de mierda.

—No, he continuado mi vida sin saber siquiera en dónde está, qué hace. No ha vuelto a llamar, supongo que eso se lo debo a que cambié de número. Me he escondido en estas cuatro paredes junto a Amber con la esperanza de que jamás volverá, pero sé que puede hacerlo en cualquier momento y que a pesar de todos los esfuerzos sigo sin superar el mayor de mis miedos... denunciarlo.

—No volverá a molestarte jamás. —Le aseguro, eso no podría pasar, o al menos estoy seguro de que si se atreve a tomar un avión y visitar a su hija ya no le podrá hacer daño. No puede caminar, aunque en realidad recordarle por qué debe mantenerse alejado de ella no es tan mala idea—. Créeme. No es justo que esté libre, Clari. No voy a obligarte a nada, confío en que llegará el momento en que quieras hacer justicia por ti, por todos esos años que sufriste y cuando lo decidas yo estaré a tu lado.

—Te he necesitado a mi lado todo este tiempo, Zed. Odiaba el hecho de saberlo y no poder correr a buscarte porque tenía miedo de que se te acabara la paciencia. Tenía temor de que en una realidad tan cruda ambos entendiéramos que no estábamos verdaderamente enamorados.

—Ya no importa lo que hicimos o no. Importa que estamos nuevamente juntos y esta vez no quiero oír de tiempos ni reflexiones estúpidas.

—¿Recuerdas cuando te dije que estábamos retando al destino? —Asiento y beso suavemente una de sus mejillas—. Creo que ahora estamos retando al olvido...

—No, copito. Hemos ganado ambos retos y pienso ganar todos los que hagan falta —digo con firmeza y me río. Sí, me río porque de la noche a la mañana he vuelto a ser el Zed que ella me ayudó a descubrir—. Y así es como ha regresado el cursi y ridículo Zed Allen, señores. ¡Qué me has hecho mujer! —la molesto y suelta una enorme carcajada.

RETANDO AL OLVIDO (+18) Where stories live. Discover now