C.6

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Tuvo que enjugarse varias veces la boca con enjuague bucal después de haber vomitado un par de veces esa mañana.

Estaba en pijama, más que indispuesto e indignado.

Al menos ya le habían desatado, pero eso no impedía que sus hijos le mantuvieran sumamente vigilado.

Suspiró colocándose una bata y saliendo en pantuflas de la habitación.

Sus hijos desayunaban campantes ya en el comedor.

El silencio se hizo presente apenas y entró. Tragó saliva al verlos ofrecerle un lugar aún sin hablarle.

Darcy apretaba los labios mientras Freddie le colocaban un vaso de jugo junto a un plato de huevos revueltos.

Lewis y Rooney le veían con enojo, Jules y Jay mantenían la mirada baja y sus pequeños Ray y Faris tenían pucheros en sus rostros.

Quería correr y abrazarlos a todos, repartir besos en sus cabecitas y rogar por perdón, pero sabía que había hecho algo malo, aunque solo lo hubiera pensado.

Suspiró sentándose viendo a varios de sus hijos levantarse, quedando solo Darcy y Freddie junto a él.

- Papá viene en media hora. Ha llamado que ya se encuentra en Londres. Para tu buena suerte, no está enojado, incluso ha dicho que trae regalos para el bebé.- De solo pensarlo se le hervía la sangre.

Aún no comprende cómo pudo haberse casado con ese maldito rizado sin vergüenza. Quiere arrancarle las pelotas y quem

- ¿De nuevos estás pensado en matarle?- Pregunta su hija con una mueca. Louis parpadea negando repetidamente entonces.

- No, no, no, cariño. Tu padre y yo tenemos que hablar seriamente. Solo eso... Prometo que no le haré nada malo.- Asegura.

Ambos suspiran poniéndose de pie:- ¿A dónde van?

- Clases.- Dicen sin más. Louis asiente sonriente.

- Cuídense, ¿sí?... Ah, y ¿pueden decirle a sus hermanitos que me perdonen?, extraño a mis niños.- Hace un puchero haciendo a ambos mirarse y solo encogerse de hombros.

- Primero habla con papá y déjalo vivo, así podremos asegurarnos de que todo está bien y de que no matarás a nuestro hermanito.- Louis gruñe encogiéndose de hombros.

- ¡Pero si ya no lo haré!

- No nos consta.- Dice Freddie.

- Nos vemos, cuídate papá. Al rato.- Se despide Darcy. Les ve irse algo rígidos y sabe que les cuenta a ellos igual ignorarle de tal modo.

Hace un puchero oyendo la puerta cerrarse minutos después, sosteniéndose aún el inexistente vientre y llorando caprichoso.

Extraña tanto que sus hijos le hablen, y besarlos y abrazarlos... Luego se le antoja algo de chocolate así que decide ir hasta la cocina buscando un poco de este.

Por suerte sabe dónde se halla la reserva de Rooney y enseguida toma una barra de estas comiéndola entera.

Suspira y saborea aquel pedazo que a su boca mete oyendo entonces la puerta principal abrirse.

- ¡He llegado!... ¿Hola?, ¿niños?- De solo oír su voz, Louis abre los ojos corriendo entonces a la puerta principal.

Harry tiene un gran saco largo que se quita enseguida mirando entonces como su esposo llega hasta él, abriendo los brazos hacia él y cargándole para besarle desesperado.

- Bienvenido.- Le dice besándole una vez más de manera más controlada oyendo a su esposo reír.

- Alguien está hormonal.- Sonríe siendo bajado poco a poco hasta que sus pies tocasen el suelo y entonces luego frunce el ceño.- ¿Qué pasa?. Sé que estás algo impactado por esto, pero amor, ¡vamos a tener otra bendición!- Grita entusiasmado. La cara bobalicola de Harry le hace apretar la mandíbula y asiente. Sonríe entonces acariciando el pecho de su esposo, con su mano bajando de a poco hasta llegar a su parte baja, apretando entonces sus testiculos con fuerza haciendo al rizado chillar.

- Me puedes explicar entonces, cariño, ¿por qué mierda estoy preñado, si se supone que tú te hiciste la puta vasectomía?

Casa llena. "Larry"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora