cap 18

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*Narrado desde el punto de vista de Rubius*
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Era sábado-noche, y tenía un dolor de cabeza increíble ¿será por todo lo que bebí? Me levanté hace una hora o dos, no comí en todo el día aunque ahora me entró un poco de hambre. Cogí unas galletas y me fui al salón a ver la tele un rato, estaba aburrido, quería que Mangel estubiera a mi lado...
La gata subió encima del sofá tumbándose al lado mía, al fin pude acariciarla en paz.
La verdad, tenía un poco de sueño, bostezaba todo el rato y dentro de nada me iría a dormir de nuevo. Apagué la tele y fui primero al baño, quería ducharme y eso. Al verme en el espejo vi que adelgacé mucho, se me iban notando un poco los huesos.

Al ducharme fui corriendo hacia la habitación, para tumbarme en mi cama calentita y dormirme, no sin antes acordarme de Mangel.
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Era por la mañana, me desperté por que alguien no paraba de llamar al timbre de casa repetidas veces, joder, a esta hora ¿quien sería? Nada más eran las ocho de la mañana... Salí de la habitación, iba con unos pantalones cortos y una camisa de manga corta, sonó otra vez.

-¡Ya voy! -dije bostezando y yendo perezosamente hacia la puerta.

Cuando abrí, entraron de repente cuatro hombres vestidos de negro, uno me empujó contra la pared agarrándome del cuello y cerrando la puerta.

-Será mejor que te calles si quieres salir vivo -me dijo con una voz muy grave.

Yo solamente asentí, joder, ¿qué estaba pasando? Me empujó bruscamente hacia el salón, tirándome al suelo y se acercaron los demás hombres a mí.

-Dame todo de valor que tengas, dinero, joyas, ¡todo! -gritó nervioso otro.

Yo temblaba y comencé a llorar, tenía miedo y no podía reaccionar, solo miraba a aquellos cuatro hombres a mi alrededor, el que me habló no se resistió y me dio un patada en las costillas túmbandome contra el suelo, yo grité.

-¿No quieres hacerlo? -preguntó de mala manera, cojiéndome de la camisa y apoyándome contra la pared de nuevo bruscamente-. Ya nos encargamos nosotros. ¡Qué alguien lo vigile!

Y se quedaron dos hombres conmigo, me tenían cogido de las muñecas y no podía moverme, joder, empecé a llorar, no podía parar.

-So-soltadme por-por favor.

-¿Qué dices? 

Y entonces me empujó contra la mesa que había delante del sofa, dándome con toda la espalda en la punta, grité y lloré más, luego fui gateando para arrinconarme en la pared. Los demás vinieron a ver lo que pasaba y todos me miraron y vieron a Raspberry al lado mía.

-Oh, un gatito ¿nos lo llevamos también chicos? 

-¡No! Ni se os ocurra tocarla, ya veréis cuando llegue la policía malnacidos -me levanté, rebelándome contra ellos, aunque no creo que haya sido muy buena idea...

Se cabrearon y uno vino a cogerme y a ponerme frente a los otros.

-¿Prefieres que te demos una paliza antes de coger a tú gato? -preguntó uno, acercando su cara a mí, yo asentí, jamás dejaría que le hicieran daño a Raspberry y si eso fuera dar mi vida, lo haría.

-Tú y tú, coged todas las cosas, la tele, ordenadores y todo ¡rápido! -ordenó el que supuestamente era el jefe-. Y nosotros nos encargaremos de ti.

De una mochila que llevaban sacaron dos palos de hierro más o menos gruesos y largos, sin compasión ni nada empezaron a pegarme, tirándome al suelo, yo lloraba, gritaba y me retorcía de dolor. ¡Dios! ¿Por qué me tiene que pasar a mi? 
También me daban patadas.

-Parad, por favor -pude decir...

Ellos se rieron y me dieron con el palo de hierro en las costillas con toda su fuerza, me empezó a salir una poca sangre por la boca y casi no podía moverme, me dolía todo. Pude ver que uno sacaba una pequeña navaja de su bolsillo y cojiéndome del brazo me dijo:

-Será mejor que te estés quieto si no quieres que te hagamos más daño del que te vamos a hacer.

Me hizo un corte lento pero doloroso en la muñeca, haciéndome sangrar por toda la mano.

-Ya lo tengo todo, será mejor que nos vayamos cuanto antes -dijo otro al fondo.

Antes de irse, el jefe me dio un golpe con la barra de hierro en la cabeza, haciendo que me desmayara por completo, en ese momento solo pude ver la imagen de Mangel en mi cabeza...

mangel y rubius gayحيث تعيش القصص. اكتشف الآن