Amnesia│Almaia

18.

Alfred se levantó de la silla del piano, escuchando el agua caer.

Tenía un hormigueo en la mejilla.

Suspiró saliendo de la habitación.

Alfred bajo las escaleras hacia el salón, y una vez llego bajo, la puerta del baño se abrió asustándole.

"Hola, Alfred." dijo Amaia, asomando medio cuerpo por la puerta, sin camiseta.

"¿si?" dijo tartamudeando.

"¿podrías traerme una toalla de la lavadora? no quedan en el baño."

Alfred asintió inconscientemente, mirando la sonrisa de Amaia.

Amaia estuvo a punto de cerrar la puerta, hasta que Alfred la sujetó.

"¿donde esta la lavadora?" preguntó.

Amaia se mordió el labio mientras sonreía, "pasando la cocina, la puerta a la derecha."

Alfred asintió lentamente, "gracias." susurró mirando hacia bajo. "enseguida vuelvo." dijo saliendo, dejando que Amaia volviera a sus asuntos.

Sintió como se sonrojaba.

¿Por que se sonrojaba?

Alfred encontró la lavadora y las toallas apiladas, cogió una.

Volvió hacia el baño para dársela a Amaia.

Alfred tocó a la puerta, recibiendo enseguida una respuesta.

"¡esta abierto!" dijo Amaia.

Alfred estaba completamente sorprendido.

¿Se suponía que tenía que entrar? ¿Mientras Amaia estaba desnuda?

Se mordió el labio, cerrando los ojos, tomando aire antes de abrir la puerta, entrando lentamente.

Alfred cubrió sus ojos con su brazo por si acaso. "¿estás detrás de la cortina?" preguntó a ciegas.

Él escuchó reír a Amaia.

Amaia asomó la cabeza por detrás de la cortina, mirando a Alfred con la toalla en la mano y cubriendo sus ojos.

Alfred estaba tan jodidamente tierno.

"Ven aquí titi." le dijo Amaia, cogiéndole la toalla.

Alfred se sonrojó al escuchar titi. Vio como la mano de Amaia salía de la cortina para coger la toalla.

Él se inclinó para acercársela, cubriendo sus ojos de nuevo.

Alfred escuchó reír otra vez a Amaia.

"No te tienes que cubrir los ojos, nos hemos visto desnudos millones de veces." sonrió.

Alfred se mordió el labio, girándose para salir. "estaré en el salón." dijo, saliendo del baño, suspirando de alivio.

Estaba a punto de entrar en el salón cuando sintió su móvil vibrar.

Sacó el móvil, viendo un mensaje de Paula.

Paula: probablemente este en el centro comercial en diez minutos.

Joder.

Había olvidado completamente que había quedado con Paula.

Alfred se rascó la nuca.

¿sentirse encerrado o salir a cenar?

**

"¿Amaia?" preguntó Alfred tocando la puerta del baño cuando vio que el agua se apagaba.

La puerta se abrió, asustando a Alfred.

"¿si?" sonrió, solo le cubría una toalla, y le caían gotas por los brazos y hombros.

"yo... eh..."

¿estaba embobado?

Alfred cerró los ojos, apartando sus pensamientos, volviendo a mirar a Amaia a la cara. "Voy a salir a cenar con una amiga." asintió. "no vendré muy tarde."

Amaia alzó una ceja. "¿que amigo?" preguntó, esperando que su nombre no empezara por la P y acabara en 'aula'.

Él se encogió de hombros. "Paula."

Amaia parpadeó, preguntándose que estaba pasando. "y... ¿donde iréis?" preguntó en un tono materno.

Alfred se encogió de hombros. "creo que solo saldremos a cenar."

"¿por qué?" le presionó, preguntándole a Alfred como si fuera estúpido.

¿Por que quería salir con Paula?

"Realmente no conozco a nadie más de la zona aparte de ella y tú." se mordió el labio.

Amaia se aclaró la garganta, cambiando la posición de sus piernas, "pero Paula es, no sé... algo no me gusta de ella."

Alfred creía que no se daría cuenta, pero Amaia se dio cuenta de que había rodado los ojos.

"Estaré bien."

"¿por que no voy?" preguntó Amaia, "podemos salir los tres juntos"

"No creo que piense lo mismo, esta molesta contigo por que le pegaste."

Amaia asintió, mordiéndose el labio. "Déjame que me vista." le dijo saliendo de la habitación.

Alfred negó, sacando su móvil para avisar a Paula de que Amaia quería venir.

**

Alfred suspiró, caminando al lado de Amaia.

Él miró las zapatillas de Amaia.

Los dos llevaban unas converse blancas, iguales.

Amaia llevaba una falda y una camiseta con escote, mientras que Alfred unos vaqueros y un jersey.

"¿Donde hemos quedado?"

"En el centro comercial." le dijo Alfred.

"¿y donde iremos?"

Él se encogió de hombros. "a cenar."

"¿sabes donde?"

Alfred negó. "No."

Amaia le sonrió.

Alfred era muy tierno.

"Vamos." Dijo Amaia cogiendo a Alfred de la mano.

Alfred se mordió el labio, tocando los dedos de Amaia.

Amaia entrelazó sus dedos.

Ella sonrió mirando a Alfred, abriéndole la puerta y entrando al centro comercial.

"¡Alfred!"

Alfred alzó su cabeza, viendo a Paula.

Él soltó la mano de Amaia para darle un abrazo a Paula.

Amaia frunció el ceño.

¿quien se creía Paula que era?

Amaia negó, caminando hacia Alfred y Paula que estaban abrazados.

Paula se alejó de Alfred, saludando a Amaia con la cabeza.

Amaia hizo lo mismo, acercándose para darle dos besos por cortesía.

"Siento haberte dado un puñetazo. Algunas personas no son lo suficientemente fuertes para soportarlo." Susurró alejándose de Paula con una sonrisa.

Esta definitivamente sería una noche para recordar.

Y no una de las buenas.