23.

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"Me estoy haciendo muy bueno en esto." Dijo Alfred tocando en el piano antiguas canciones que había compuesto.

Amaia se apoyó en la pared sonriendo. "Siempre se te ha dado genial, por mucho que me gustaría escucharte todo el día, llego tarde a trabajar." Dijo, acercándose a darle un beso en la mejilla. "Intentaré salir pronto."

Alfred se sonrojó, asintiendo con la cabeza.

"Te veo luego, titi." sonrió Amaia, saliendo de la sala de música de Alfred.

Cuando escuchó a Amaia salir, como si hubiera sido apropósito, su móvil sonó.

Miró el móvil, frunciendo el ceño al leer el mensaje.

Paula: creo que deberíamos hablar, ¿estás disponible? es demasiado largo para escribir.

Alfred suspiró.

¿Que debía decirle? Anoche escuchó lo suficiente, ¿que más debía explicarle?

Estaba atrapado entre la espada y la pared.

Mordió su labio, escribiendo una respuesta.

Alfred: vale, estoy en casa.

**

Una hora después alguien tocó a la puerta.

Alfred suspiró, levantándose del sofá y colocándose lentamente frente a la puerta.

Esperó unos segundos antes de abrir.

Paula suspiró aliviada, "Gracias por dejarme venir."

Alfred asintió, dejándola pasar. "Quítate los zapatos, es una norma de Amaia."

Paula se los quitó antes de entrar en la casa.

Alfred le miró.

Era raro pensar que la noche anterior estuvieron riendo, pasando un buen rato, pero ahora era muy raro al saber lo que había dicho de él.

Caminaron hasta el sofá, y Paula se sentó a una corta distancia de Alfred, y él le prestó atención.

Paula se aclaró la garganta, "antes que nada, ¿que te ha dicho Amaia? así comprenderé lo que has escuchado."

"Bien," comenzó Alfred, "Amaia me dijo que te pegó la primera vez por que estabas intentando que bebiera..."

"Yo no intentaba hacerte beber." Le interrumpió Paula.

"¿me vas a dejar que te lo cuente o no?"

"Lo siento, continúa."

Alfred alzó las cejas, "Bien. No te estoy diciendo que intentaras que bebiera, solo que es posible, y Amaia sabía que era malo para mi y supongo que lo hizo por que me podía perjudicar. Mi amnesia podría empeorar, en el sentido de no llegar a recordar. Pero podrías haberlo sabido, considerando que eres mi enfermera."

Paula asintió.

"Y cuando ella vio que me dabas una bebida, pues lo hizo." Continuó. "Y la segunda vez que Amaia te pegó... Estoy realmente decepcionado por lo que dijiste sobre mi una vez me fui al baño. Amaia me contó todo. Me contó que dijiste que esa noche me follarías." Él frunció el ceño mirando a Paula, "Realmente no soy de esa clase de personas, Paula. Mi madre me educó mejor que eso. No me acuesto con cualquiera. Y si, he olvidado una parte de mi vida, pero no he olvidado lo que está mal."

Paula se mordió el labio, "¿puedo explicártelo?"

Alfred se encogió de hombros. "Inténtalo."

"Vale." Paula intentó ordenar las palabras en su mente, pensando como empezar. "Bien, para empezar yo no intentaba que bebieras, de ninguna manera. Solo quería que que te gustara la bebida, y no te hubiera afectado a caso de que no fuera un vaso lleno de vodka." Empezó. "Fue un acto inocente, lo juro. No quería conseguir que bebieras y mucho menos que te afectara."

Alfred asintió, poniéndose cómodo en el sofá.

"Y lo segundo, lamento las palabras que usé. No te voy a mentir sobre que no lo dije. Dije algo parecido a lo que Amaia te dijo. No estoy segura de por que dije lo que dije... Creo que simplemente fue lo que paso por mi mente. Yo solo..." suspiró, acariciándose la frente. "Me gustaría que te vieras a ti mismo y entonces entenderías lo que dije. Nunca he conocido a nadie tan bonito, por fuera y por dentro." susurró.

Alfred se sonrojó.

"Siento que no os conocéis el uno al otro, y ella te trató como un objeto. Yo estaba completamente equivocada en eso, pensaba que estaba bien."

Alfred miró hacia bajo.

"Tu eres como la definición de perfección y supongo que solo quería una oportunidad contigo. Pero, probablemente acabe de perderla." Dijo mirando a Alfred.

Alfred levantó sus hombros, "Si realmente quieres una oportunidad conmigo, nunca lo has dicho bien ni claramente." susurró.

Paula sonrió, "Lo sé y lo siento mucho, Alfred. De verdad. No quise haberte faltado el respeto por que es la última cosa que mereces. Te mereces lo mejor y no debí haberte tratado así."

Alfred asintió, "supongo que no pasa nada. Solo me sorprendió escuchar todo eso, especialmente después de habérmelo pasado bien contigo anoche."

Paula asintió, "Me lo pasé muy bien contigo." Susurró golpeando su pierna contra la de Alfred suavemente, "¿sigues enfadado?"

"Mas decepcionado que molesto."

"Yo estaría de la misma manera." Suspiró Paula.

Alfred miró hacia bajo. "¿quieres jugar a la wii? He descubierto hace una hora que la tengo."

Ella asintió sonriendo, "me encantaría."





Holaaaa! Ay es que Alfred es tan bueno que no podía dejar que no perdonara a Paula, lo siento, no me matéis. Y... pronto sabréis que pasara con el tema de Paula, tranquilos. Por cierto, habéis sido rapidísimos en llegar a los 60 votos, continúo subiendo si llegamos a 80 votos, contarme en los comentarios que os parece la decisión de Alfred? Creéis que recordará algo pronto?

Amnesia│AlmaiaWhere stories live. Discover now