Capítulo 12: Regalos y pistolas.

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Son casi las diez y media cuando Bellota finalmente llega al restaurante. Una vez dentro, una señora vestida con un pantalón negro y una camisa blanca con el nombre del restaurante bordado en letras plateadas la recibe con una sonrisa.

— Buenas noches, ¿tiene reserva?

— Sí, mi nombre es Bellota Utonium.

— Un momento — la mujer revisa algo en una tablet y vuelve a sonreírle a la morena. — Sígame, por favor.

La mujer guía a Bellota entre las mesas del gran restaurante, que está lleno, y la ojiverde sonríe desde lejos cuando por fin ve la mesa donde se encuentran sus hermanas y sus amigas. En total son once y con ella doce. Las han colocado en una de las mesas grandes del establecimiento. A un lado están Ana, Robin, su hermana Burbuja, Helen y Mandy. Al otro lado en ese orden se encuentran Sabrina, Bunny, su hermana Bombón, Erika, Evelyne y Alice.

— ¡Bellota! — su hermana de ojos azules la saluda con la mano.

— Hola chicas, siento llegar tan tarde.

— No te preocupes, hasta Bombón que es la cumpleañera ha llegado tarde — dijo Bunny.

Bellota toma asiento al lado de Ana y frente a Sabrina, dos chicas de pelo azul teñido, pero antes le da un beso a su hermana mayor.

— Esto es para ti — Bellota le da un pequeño paquete envuelto en papel blanco con corazones. — Feliz cumpleaños.

— Gracias, hermana.

Bombón desenvuelve el regalo y descubre con ilusión que se trata de un libro que hacía tiempo que quería leer. Lo guarda en la bolsa de regalo más grande que le han dado, que contiene un gran marco para poner cuadros y donde por suerte han cabido todos los regalos; esa bolsa resultaría de gran ayuda a la hora de llevárselos a casa. El libro encuentra su lugar entre cajitas de bisutería, otros libros, alguna que otra blusa y un conjunto de ropa interior de encaje negro y rosado, esto último por cortesía de Burbuja.

Bellota no tarda en pillar el hilo de la conversación que estaban manteniendo las demás antes de que llegara; Ashton, el que todas piensan que será el próximo novio de Bombón, estará en la discoteca donde piensan ir luego.
El detalle más jugoso es que una de ellas, Helen, se ha enterado de que el joven le ha preparado un regalo a Bombón. A la pregunta de cómo lo ha sabido, ella responde que son ventajas de salir con un primo del susodicho.

— Bellota, te habrás aburrido un montón en el aeropuerto, ¿no? Menuda espera — le dice la pelirroja.

— En realidad no tanto, había un chico que...

Uuuuuh — la interrumpen todas las demás al unísono y en un tono pícaro.

— ¡Bellota ha conocido a un chico! — exclama Sabrina.

— ¿Es guapo? — se interesa Erika.

— ¿Cómo se llama? — pregunta Mandy.

— No es lo que pensáis, solo esperó conmigo y luego nos tocaron asientos contiguos en el avión. Y ya está, nos despedimos en el aeropuerto.

— ¿Y no te dio su número? — quiere saber Burbuja.

— No. Bueno, vamos a cambiar de tema — pide con las mejillas ruborizadas. — Bombón, ¿qué harás si Ashton te pide que salgas con él?

— ¡Eso, eso! — ahora las demás fijan su atención en la pelirroja, para alivio de Bellota.

— Pues... la verdad es que no lo sé.

— ¡¿Qué?! — Bunny se queda boquiabierta. — ¿Cómo que no lo sabes?

— No hace falta que finjas, sabemos que te haría mucha ilusión que te lo pidiera — Mandy le guiña el ojo. — Yo en tu lugar le diría que sí, es guapísimo.

¡Atrapados! (Ppg y Rrb)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora