"Mariposas" CAMREN-G!P (Segunda parte de "Ambición").

Cap 26: Una noche diferente.

Narra Camila.

-¿qué hora es, Mami?-se sentó frente a la pequeña mesa que estaba en la cocina mientras yo cocinaba o al menos eso intentaba.

-las ocho-respondí sin dejar de ver el vídeo en Youtube. Lauren llegaría en media hora y aún no tenía lista la cena.

-¿que estás viendo?

-un vídeo para poder hacer la cena-suspiré frustrada al ver que la receta que supuesta mente era fácil, terminaba siendo todo un desastre.

-¿y si pedimos pizza?-soltó una pequeña risa. Al parecer le parecía gracioso verme frustrada.

-Lauren vendrá a cenar y no quiero quedar como una tonta que no sabe cocinar-saqué el vídeo y apagué el computador. Debí hacerle caso a mi Madre cuando me dijo que tomara clases de cocina. 

-no eres tonta-frunció el ceño-podrías hacer leche con chocolate-sonrió orgullosa de su gran idea.

-no podemos cenar eso, mi amor-me senté a su lado ya frustrada por la cena.

-¿panqueques?

-tampoco-reí-creo que tendré que pedir una pizza-hice una mueca. 

-puedes decirle que la hiciste tú-se encogió de hombros.

-¿crees que me creería?-le sonreí.

-tal vez-rió-podrías intentarlo.

-tendré que pedir la pizza, aunque Lauren jamás va a creer que yo la hice-besé su mejilla-será mejor que vayas a cambiarte.

-no quiero-suspiró.

-¿piensas andar en pijama?-la abracé dejando mi cabeza sobre su hombro.

-¿crees que Lauren se enoje?-murmuró.

-no lo creo, pero estaría bien si te pones algo bonito para cuando ella llegue.

-¿tu te cambiarás de ropa?

-si, me pondré un vestido-me separé de ella-¿me acompañas?-estiré mi mano hacia ella.

Asintió para luego tomar mi mano y bajarse del asiento.

Me sentía nerviosa, no podia evitarlo. Lauren vendría y pasaría tiempo conmigo y con Aurora, eso es alho que siempre imaginé pero pensé que jamás ocurriria. Tenía más que claro que Lauren sentía alho por mí, me lo ha hecho notar en muchas ocaciones pero tengo miedo de que las cosas no salgan bien y Aurora salga lastimada. Ya no puedo dejarme llebar por mis sentimientos, no soy solo yo la que sufriría si las cosas no salen bien. No puedo ser egoista y pensar solo en mis sentimientos.

-llegó Lauren-sonrió al escuchar el timbre.

-aún no he pedido la pizza-suspiré sientiendo mis manos sudar por los nervios-¿cómo me veo, Hija?

-hermosa-colocó sus pequeñad manos en mis mejilla. Ella era todo lo que estaba bien en esta vida.

-vamos-la tomé en brazos.

Con apuro bajé las escaleras pensando en que ella ya estaba aquí y que no habia vuelta atrás.

Bajé a Aurora de mis brazos y tomando una gran bocanada de aire abrí la puerta. Laurenestaba frente a mí con uma gran sonrisa y con una botella fe vino en sus manos. Se veía muy guapa con un abrigo largo color negro, el cual se ajustaba perfectamente en su cuerpo. Su cabello negro la hacia lucir aun mas guapa.

-buenas noches-sonrió de lado. Esa sonrisa era mi debilidad.

-buenas noches-le sonreí haciendome a un lado para que pudiese pasar.

-Aurora-susurró con cautela.

-hola Lauren-le sonrió.

-hola-suspiró. Se que le dolio que Aurora no se lanzara a sus brazos como siempre hacia cuando la veía.

-Mamá aún no pide la pizza-soltó una pequeña risa mientras se tapaba la boca.

-tenia pensado cocinar algo para la cena pero no salió muy bien-hice una mueca. Aurora ya me ha ia delatado.

-la cocina nunca fue lo tuyo-me sonrió-pero no hay problema, no es primera ni ultima vez que ceno pizza.

-ves, te dije que iba a entender-dijo Aurora mientras caminaba hacia el sofá-¿qué pelicula veremos?

-la que quieras-respondí- iré a pedir la pizza-miré a Lauren la cual no dejaba de mirar a Aurora-¿Lauren?

-¿si?-volteó bruscamente a mirarme.

-¿estás bien?

-si-asintió-¿dónde dejo el vino?-cambió de tema rápidamente.

-en la cocina, ven-tomé su mano la cual estaba cubierta por un guante de color plomo-no era necesario que trajeras algo, Lauren.

-no me gusta llegar con las manos vacias-vi como se sacó sus guantes y con delicadeza los dejó sobre la mesa.

-¿aún te sigue gustando la pizza de peperoni?- me senté frente a ella. Lauren estaba de pie y su presencia era imponente. Era alta, con un cuerpo envidiable y una belleza única al igual que sus ojos.

-si-respondió con una sonrisa suave y unos ojos penetrantes-¿te sigue gustando la hawaiana?

-jamá dejará de gustarme-rode los ojos al ver su expreción de asco.

-eres rara-rió con ganas.

-entonces tu Hija igual lo es.

-¿también le gusta?

-la adora-sonreí.

-has creado un pequeño mounstro-negó divertida.

-no es tan mala-me encogí de hombros.

-es horrible.

-¿qué es horrible?-Aurora entró a la cocina y se sentó a mi lado.

-Lauren dice que la pizza hawaiana es horrible-le susurré como si le estuiese contando un secreto.

-estas loca-alzó la voz mientras la miraba-es lo mejor del mundo.

-estan completamente locas-nos miró.

-un momento-la miré con los ojos entre cerrados-nunca la has probado, ¿verdad?-Lauren siempre decía que las cosas no le gustaban sin embargo nunca las prueba.

-no, pero no necesito probarla para darme cuenta de que es una completa locura comer algo así.

-esta noche la vas a probar y te va a gustar-aseguré.

-¿y si no quiero?-se cruzó de brazos.

-tendras que comerla igual.

-eso lo veremos.

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