Secuestrado por mis Beliebers (SPMB). [COMPLETA].

Capitulo 5

Narra Cynthia.

Subimos al auto de Lidia con el cual habíamos llegado y nos fuimos directos a starbucks, bajamos y nos adentramos a starbuks, pedimos dos capuchinos y cuatro donuts de frambuesa y nos sentamos en una mesa apartada para poder hablar sobre el maldito plan de Jeferson.

Entonces.. ¿que día es el concierto? -Pregunté -Es.. - Observando los M&G -Pasado mañana -Respondió -Vale, entonces.. ¿llevaremos a cabo ese plan de mierda que nos ha dicho Jeferson.. o pensaremos nosotras en algo? -Cuestioné -Pensaremos nosotras en algo, tendremos como un plan B porque dudo mucho que la mierda de plan de Jeferson salga bien - Hizo una especie de mueca -Si, dudo mucho que lo dejen solo y mas con una fan que se acaba de desmayar digo yo que estará con algún medico y con guardaespaldas por si se despierta y se pone histérica y eso.. -Respondí pensando en un maldito plan que funcione - Si tienes razón.. -La interrumpió mi celular que estaba sonando en señal de mensaje -Un segundo -Le dije a Lidia que miraba expectante el móvil por saber quien era -Claro -Sonrió y empezó a comerse los donuts -Es Marcos.. -Pausé, respondiéndole el mensaje -Esta noche hemos quedado, ya sabes liberar tensiones y eso.. -Sonreí picara - Oh claro! -Sonrió de lado.

Terminamos y salimos de Starbucks, subimos al auto y nos marchamos hacia casa.

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Con Lidia, comimos y sobre las 7 vino Marcos a casa, hablamos un rato los tres y luego subimos a mi habitación Marcos y yo.

Empezamos a besarnos, quitarnos ropa, y terminamos teniendo sexo, si SEXO sin sentimientos, no es que sea una zorra o una puta barata, pero las mujeres también tenemos necesidades aveces.

Luego de descansar un rato, decidimos levantarnos, e ir a darnos un baño.

Cuando salimos, Marcos se vistió, me dió un beso de despedida y se marchó, yo cogí unos tejanos oscuros, una camisa suelta negra y una vans, luego me hice una cola de caballo alta, me maquille, rímel y brillo y baje al living donde se encontraba Lidia en el sofá viendo la tv.

- Eres una escandalosa -Se burló mientras reía. Yo reí con ella. -Hay que decir que el chaval no lo hace nada mal... -Comenté mientras me sentaba en el sofá junto a ella.

Saqué todo lo que necesitaba para liarme un porro y comencé a liarmelo.

Cuando ya estaba acabado, lo prendí y dejé que todo el humo pasase por mi garganta hasta llegar a mis pulmones.

- He pensado en lo del secuestro -Comentó Lidia mirándose las uñas. La miré y seguí fumando de mi cigarro de la risa. -Un plan B, seria meternos en su camerino con sumo cuidado de que no nos vea nadie. -Nos miramos y se encogió de hombros.

Tampoco era mala idea.

- De todas las maneras, improvisaremos. A veces las cosas salen mejor sin pensarlas. -Dijo robandome mi cigarro de la risa. -¡Eh!- Me quejé. Ella rió y dió una calada. -Respecto a lo otro... -Hice una pausa ya que el móvil de Lidia había sonado. Me hizo un gesto con la mano para que hablase, sin darle importancia al teléfono, creo que tienes razón. Quizá debamos esperar a estar en el concierto y allí ya pensamos que es lo que hacemos -Sonreímos y cogió el teléfono que estaba en la pequeña mesa enfrente de nosotras.

Comenzó a leer algo en el teléfono y sonreía como una tonta. Me asomé -Cotilla -Me dió un codazo en el costado. No me había hecho daño. -¿Desde cuando dejas que los chicos te inviten a cenar? -Alce una ceja curiosa. Aquí había algo que me había perdido y pensaba descubrirlo.

Contesto el mensaje y lo dejo de nuevo en la mesa. Se recostó en el sofá de nuevo y fumó lo poco que quedaba de MI porro, la muy capilla se lo había fumado casi todo.

- Desde que este chaval me hace gracia -Rió. Ya sabia por donde iba. Alcé una ceja. -¿A la increíble Lidia alguien le llama la atención? -Me Burlé de ella, provocando que frunciese el ceño.

-Pava -Gruñó .-A mi,nadie me llama la atención. Es un chico majo y me quiere invitar a cenar. Yo acepto -Yo solté una carcajada. Ese chico le gustaba y no lo quería reconocer.

Suspiró frustrada y se levanto del sofá para después desaparecer por aquella puerta.

Puesto que me iba a quedar sola y no sabia que hacer, cogí mi teléfono y tecleé a Marcos, por lo menos él me haría compañía.

Marcos⤵

Narra Lidia.

Subí al coche de Jack -Hola -Saludé secamente. -Hola -Me dió un beso en la mejilla. Mi piel se erizó ante su tacto ¿Que coño?.

- ¿Donde quieres que vayamos? -Preguntó mirándome con una sonrisa mostrándome su dentadura blanca.

- Me apetece Mcdonals -Me encogí de hombros. El sonrió y asintió con la cabeza.

Arrancó el coche y condujo hacia el Mcdonals que quedaba mas cerca.

Íbamos en silencio ninguno decía nada. Yo me dedicaba a mirar por la ventana y de vez en cuando mirar su perfil. Tenia la mandíbula bastante marcada, una nariz -Para mi gusto -perfecta. Sinceramente, era un chico muy atractivo y bastante bueno. No se como pudo meterse a trabajar para Jeferson, ese hombre es un maldito cabrón, que destroza la vida de los demás.

- Jack -Lo llamé, paró en un semáforo y me miró, encontrándome con esos ojos verdes que eran preciosos. -¿Porque trabajar para Jeferson? -Pregunté curiosa. El no respondió y siguió con su camino, ya que el semáforo se había puesto en verde. Fruncí el ceño. -A mi nade me ignora -Gruñí.

El soltó una risa, lo cual hizo que me enfadase mas. Llegamos al Mcdonals, aparcó el coche, bajé y cerré la puerta de un portazo. -Eh -Me señalo con el dedo. -No vuelvas a cerrar así -Me advirtió. ¿Este tío de que va? ¿Es gilipollas o le pasa algo?.

Rodeé el coche y me acerque a el. -A mi no me amenaces -Dije entre dientes. Abrió la boca para decir algo pero una voz lo interrumpió.

- Vaya, otra vez la chica mala hablándole mal a un chico -Me giré sobre mis talones y ahí lo vi, con una asquerosa sonrisa en la cara.