Capítulo 31: Tienes que irte

117 29 6
                                    

El trayecto de regreso es más tranquilo, el silencio por ahora mi mejor amigo y aquel bendito aire helado el mejor remedio para mantener mis ojos abiertos.

Harry no parece voltear a ningún lado, su mirada a permanecido clavada en todo momento hacia el frente, Alex parece estar igual, la oscuridad parece cada vez ser más densa mientras el latir de mi corazón permanece quieto y sereno, me es casi imposible no imaginar que esto ha pasado miles de veces en las películas de terror, en cualquier momento Harry o Alex voltearan a verme con una sonrisa retorcida, para después estar desapareciendo mi cadáver justo aquí, a mitad de la nada, con miles de árboles de compañía. Un plan realmente bueno si me lo preguntaran.

—En la curva que pasaremos ahí me dejas— la voz de Alex me hace abrir los ojos, no sé en qué momento fue que los cerré, Harry parece asentir ligeramente con la cabeza y es entonces que Alex se gira hasta verme, tallo mis ojos con fuerza apenas veo su acción, el parece curvar sus labios un poco, por lo que yo sonrío lo mejor que puedo

—Fue un gusto verla de nuevo señorita, siga cuidando a Harry— lo veo hacer un gesto extraño con el rostro al decir aquello, mi ceño se frunce y ladeó un poco mi cabeza, ¿acaso eso quiere decir algo?

— Y cuídese mucho por favor— borra aquel dije de sonrisa en su rostro bajando la mirada y girándose de nuevo hacia su anterior posición, ni siquiera he sido capaz de contestarle o por lo menos interpretar aquel gesto de su parte. Sé que aquello ha sonado como una triste despedida. Harry voltea a verlo y detiene la camioneta al fin, ninguno dice nada, simplemente se miran como si no se conocieran, mientras yo sigo tratando de entender que hace Alex aquí y por qué es que Harry también lo conoce.

—¿Hope no te pasarás al frente? — la áspera y ronca voz de Harry me hace salir de todos aquellos pensamientos, me muevo un poco hasta verlo y me cruzo de brazos

—¿De dónde conoces a Alex? — la pregunta sale sola de mis labios, así que realmente lo toma por sorpresa, levanta un poco las cejas y aleja inmediatamente su mirada de la mía. Por un momento pienso que no dirá nada hasta que comienza a hablar de nuevo

—Me ha hecho algunos encargos— termina por decir de una manera fría y seca, como si estuviera enojado por aquella pregunta

—Oh entiendo, ¿sabías que yo lo conocía? — esta vez lo veo moverse sobre su asiento, rápido me muevo hasta quedar adelante junto a él, a su lado, justo donde estaba Alex hace un momento

—¿Cómo sabría eso? — me pregunta de una manera tranquila, pero su vista aún sigue sin estar sobre la mía como siempre

—Ya deberías saber qué te conozco, deja de fingir Harry— esta vez su rostro se levanta hasta mirarme, con un dije de tristeza y desesperación aquellos dos ojos verdes me observan con anhelo y miedo al mismo tiempo

— Te amo Hope, pero debes de alejarte de mí y lo sabes— niego con la cabeza mientras muerdo la parte interior de mi mejilla, ¿por qué me dice esto ahora?, ¿por qué me lo vuelve a decir?

—No quiero pelear Harry, hemos hablado de lo mismo tantas veces que las he olvidado, no me iré, no tengo aún un motivo para hacerlo— le digo seria observando aquellas esmeraldas, su brillo parece opacarse cada día más, como si cada respirar lo hiciera agonizar

—No quiero hacerte daño, no a ti— dice aquello apenas en un susurro, su voz grave y fuerte parece haber desaparecido, en lugar de estar al lado de aquel hombre fuerte, atemorizante y seguro que conozco, siento que estoy frente a mí, una persona débil, rota y sin esperanzas

—Quizás es lo que debe pasar— digo finalmente aquello, ambos bajamos la mirada cubriéndonos con aquel silencio sofocante, con aquella sombra que se ha adherido cada día un poco más sobre nosotros

Mi Propio Demonio [Libro 1] |H.S|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora