✨FINAL✨

3.5K 340 163
                                    

Mi respiración se cortó, observé las puertas de colores fríos que ocultaban una gran noche por esperar.

La abrí y me quité las gafas que me protegían del día tan soleado hace unos instantes.

Allí estaba todo, aquella producción que viví por cinco magníficos años.

Después de que BTS anunciara oficialmente su separación en 2025 y los chicos siguieran entrando al servicio militar, seguí trabajando en mi música de solista, recibiendo apoyo de army aunque ya no estuviéramos juntos.

Ahora con 31 años de edad, mi mente ya madura me hacia recordar los hermosos recuerdos que fuimos atravesando etapa por etapa.

Y me era inevitable derramar lágrimas cuando recordaba mi juventud con siete maravillosos chicos a mi lado. No porque fuera vieja, seguía conservándome muy bien.

Miré a los técnicos arreglando tan maravilloso escenario, mientras que un numeroso grupo de chicos me daban la espalda riendo de quién sabe qué.

Una sonrisa se instaló en mis labios, mis ojos brillantes conteniendo cualquier lágrima que se atreviera a escapar.

—¡Caras de zopenco! —grité con voz temblorosa. —¡¡Ya llegó su Diosa!!

—¡Noona! —Jungkook gritó, llevábamos al rededor de unos cuantos años sin hablar cara a cara.

Corrí y dejé mis cosas en el suelo para después encerrarnos los ocho en un cálido abrazo.

—Diablos, te extrañé tanto engendro de Satán. —Yoongi revolvió mi cabello largo cariñosamente.

—Satánsoo. —corregí cariñosamente.

—¿Por qué demonios estas llorando, tonta? —Seokjin limpió mis mejillas un poco mojadas.

—Vaya, tienes arrugas. —bromeé, apaciguando el ambiente.

—¡CREÍ QUE YA HABÍAS MADURADO! —me grita, para después correr a un espejo y mirarse. —Sigo siendo perfecto.

—Si, pensé que ya habías dejado de ser tan vanidoso.

—Como sea. ¿No estas feliz de verme de nuevo, Rinnie? —Taehyung sonrió, llevando sus manos a su mentón para hacer la pose de la flor.

Ah, ese apodo.

—No. —sonreí de la manera mas inocente posible.

—Extrañaba tanto esto. —Hoseok me volvió a deslumbrar con sus sonrisa una vez más después de tanto tiempo.

Supongo que nunca perderá su brillo tan único y característico de él.

—¿Pero qué estamos haciendo? —Jimin aplaudió sonriente. —Hay un concierto que preparar.

Manos a la obra.

(❀)

Había llegado el momento, mis manos sudaban y un terrible temblor estaba apoderado de mi cuerpo.

Miré el vestuario que usamos en los conciertos hace mucho tiempo e inmediatamente sonreí, aquel vestido negro junto a la chaqueta gris con brillos aún se mantenía en perfecto estado y me quedaba a la perfección.

—¡Vamos chicos! —escuché el grito de Nam, quedamos en círculo para después suspirar calmados y hacer el típico ritual de tranquilidad que solíamos hacer antes de los conciertos. —Recuerden dar todo en el escenario, a pesar de que estemos un poco oxidados todo saldrá bien, ¿okay? ¡Bang!

—¡Tan! —gritamos al unísono alegremente.

El intro comenzó y solo podía dar saltos emocionada mientras golpeaba el pecho de Hoseok para tranquilizarme.

笑 ; UNA CHICA EN BTSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora