El verano de nuestras vidas -ALMAIA

Capítulo II

POV Amaia

Una vez salimos del aeropuerto fuimos hacia el coche de Alfred, era una camioneta 4x4 típicas de verano.

- La mejor manera de desplazarse por aquí es con una camioneta de este tipo, són las más veraniegas -dijo abriendo la parte de detrás para dejar mi maleta y mochila

Acto seguido se subió encima, movió algo que parecía ser una funda de guitarra, también montaduras de caballo y una tabla de surf, entonces se agachó y cogió mi maleta que pesaba un montón en un momento, lo acabó de colocar todo y saltó hacia abajo, se giró y cerro la puerta, llevaba una camiseta blanca que se le ceñía al cuerpo cuando hacía algunos movimientos permitiéndome apreciar su ancha espalda y los musculosos brazos. 

- Ya está -se giró y me sonrió haciendo que pudiera apreciar sus paletas un poco separadas lo que le hacían muy mono- la mochila la puedes llevar contigo si quieres

- Si mejor la llevo conmigo -dije asintiendo

- Entonces entremos a la parte de delante, tu prima ya se ha acomodado -dijo mirando hacia delante riéndose al ver a Miriam poner la música que ella quería.

Nos metimos los dos en el coche, yo iba en medio, Alfred arrancó el coche y se puedo las gafas

- Amaia, ¿Preparada para vivir el mejor verano de tu vida? -dijo mirándome antes de empezar a conducir 

- Si -dije sonriendo al darme cuenta que iba a vivir una experiencia inolvidable

- Entonces Miriam me haces los honores -dijo mirándola 

- Claro -puso la mano en el volumen de la música- Amaia primero de todo esto es una tradición, siempre lo hacemos juntos

- 3,2,1 -hizo una pausa

- Miriam puso el volumen a tope y chillaron -¡¡¡BIENVENIDO ESPERADO VERANOOOO!!!

Entonces Alfred dio gas y con la música fuerte nos dirigimos hacia el pueblo costero, el cual iba a ser mi hogar durante 3 meses. El viaje fue divertido no parábamos de chillar y de cantar, podía notar como Miriam y Alfred tenían esa típica conexión que tienen los mejores amigos, se notaba que habían vivido muchas cosas. También pude apreciar lo buena gente que era Alfred, hacia que mi prima después de haber roto con su novio la hacía reír y hizo que yo no me sintiera fuera de lugar. Llegamos a casa y él paró él coche.

- Bueno chicas ya habéis llegado a vuestra humilde morada -y una vez dicho esto hizo un ritmo con la bocina del coche entonces mi tía salió corriendo de casa.

Miriam bajó y junto a ella yo, corriendo a abrazar a mi tía.

- ¡Cariño! Como has crecido, que guapa estás -dijo abrazándome muy fuerte

- Tia estás increíble, estás igual que la última vez 

- ¿Alfred, dónde está? -dijo buscando por encima de mi cabeza 

- Aquí estoy Carmen -dijo poniendo mi maleta en el suelo

- Ay, es verdad mi maleta, lo siento mucho -dije cogiéndola al momento

- Tranquila no pasa nada -al decir eso fue hacia mi tía que le esperaba con los brazos abiertos

- Mama te recuerdo que estoy aquí -dijo Miriam en tono de burla al ver que saludaba primero a Alfred que a ella- Entiendo que saludes primero a Amaia pero a ¿Alfred?

- Cariño a ti te veo cada día -dijo dandole un beso- a Alfred lo veo menos

- La única diferencia es que yo duermo aquí porque él está siempre en casa -dijo riéndose

- Amaia, princesa -dijo mi tío saliendo de casa

- ¡Tio cuanto tiempo! -acto seguido le abracé 

- Bueno familia, yo me tengo que mis padres me están esperando 

Dio un beso a todos y por último antes de irse consiguió sacarme una sonrisa

- Adiós nueva amiga de Pamplona nos vemos por la tarde -y me guiño el ojo