El Mafioso Kim Namjoon [Namjin]

4

Capítulo editado 

20/04/2021

Dedicado a KarenRomero660584 XxCharmingBaexX Namy3108

* * *

No podía respirar, quería, pero no podía, algo le estaba obstruyendo las vías respiratorias. Llevo las manos a su rostro, pero todo estaba cubierto por una esencia liquida, pero espesa a la vez y no solo era su cara, también sus brazos estaban cubiertos de ello. Gritó al darse cuenta que se trataba de sangre. Gritó tan fuerte, que sintió como su garganta se rompía.

Después de luchar por tanto tiempo pudo limpiar sus ojos, al fin se dándose cuenta de la lluvia de sangre que estaba sobre él. Sin embargo, no estaba solo, a pocos centímetros de sus pies, el cuerpo de su padre decoraba el ambiente, todos sus órganos habían explotado y regados en el suelo, a pesar de no tener vida, Seokjin podía sentir la mirada sobre él. Cuando sintió que no podía aguantarlo más, un ruido estremecedor lo asecho desde atrás. Con miedo y pasos temblorosos dió vuelta, un nudo se formó en su garganta al ver el cuerpo de su madre sin vida, colgando del alambre que estaba bien atado alrededor de su cuello. Gritó una vez más.

* * *  

Los rayos del sol entraban por el costado de la ventana, molestando sus ojos y obligándolo a despertar. Otra vez sintió la seda sobre su piel, suspirando al darse cuenta que aún seguía encerrado, al igual que todas las mañanas, salió de la cama y espero pacientemente en la puerta, con la esperanza de escuchar algo. Toda su comida era dejada, cuando el dormía, no sabía qué clase de lugar era este. 

Se preguntaba ¿Qué día será? ¿Qué pasara con la policía? ¿Lo estarán buscando? ¿Por qué estaba con Kim Namjoon, el mafioso mas buscado? No entendía nada. Sus recuerdos vagaron en la última noche que vio a su madre, la deliciosa comida que comieron, las palabras de su madre... las últimas palabras que escucho:
Señora Soyung, esta todo listo.

Cuando caminaba de un lado a otro, intentando encontrar una respuesta para aquellas preguntas. Las puertas fueron abiertas, entrando varias personas con charolas en sus manos y por ultimo una señora — Señor SeokJin, soy Amelia, desde hoy estaré bajo su servicio — ¿Servicio? Él no necesitaba ningún servicio. Él necesitaba salir de ahí y limpiar el nombre de su madre. 

— ¿Dónde me encuentro? — Amelia levantó las charolas mostrando ropa en ellas — ¿Para que es toda esta ropa?

— Para responder a la primera pregunta, se encuentra en la mansión secreta del Señor Kim NamJoon. — Dijo Amelia agarrando los calcetines — Y, por último, el Señor cree que ya está listo para salir a desayunar en el comedor principal. No le gusta para nada la impuntualidad y peor salir en pijama.

SeokJin desistió ante la oferta de Amelia en vestirlo. Aunque no quería, tenía que afrontarlo algún día si quería salir de ese lugar. La ropa consistía en pantalones negros de vestir, que, hacia combinación con la camisa blanca, el chaleco gris y zapatos negros.

Cuando ya estaba listo, Amelia entro una vez más para ordenar la habitación y llevar a SeokJin a su destino — Señor SeokJin, el desayuno ya está listo.

Ambos salieron de la habitación. SeokJin no pudo evitar respirar profundo el aire fresco o nuevo, ya estaba cansado de estar encerrado. Amelia iba adelante dirigiéndose hacia el comedor, los pasillos eran largos, pero en cada pared había cuadros que lo adornaban. Llegaba reconocer algunos de ellos, por la clase de arte que tomo en un semestre. Al llegar pudo visualizar que al igual que en los pasillos, estaban llenos de cuadros. Amelia lo dejó, diciéndole que ocupe el lugar del extremo derecho ya que Namjoon ocupa el de la izquierda.

A la espera de la comida, trato de recordar cada punto importante antes que se desmayara. Recuerda estar borracho y encontrar a su madre en la entrada, luego hablaron en la cocina sobre huir de esa casa, después... vino su padre y lo asesino... Su madre se comportó extraña después de eso, como si nada hubiera ocurrido. Solo repetía la insoportable frase: lo hago por ti. Irrumpieron en su hogar y cayo mientras veía la espalda de su madre. El golpe del plato contra la mesa lo devolvió a la realidad.

Alzó su vista, viendo a un hombre leyendo un periódico frente a él. SeokJin lo mira fijamente mientras devoraba su comida ¿Desde cuándo ha estado ahí? ¿Se habrá dado cuenta que lo he estado mirando? Los platos fueron retirados cuando ambos desayunos fueron terminados. Por un costado de la habitación, entró un hombre, dirigiéndose a NamJoon, para acto después hablar en su odio. Cuando recibió la simple respuesta, este se fue, sin tomarse el tiempo de verlo. 

Los empleados entraron por una última vez, con una botella de vino en un recipiente con hielo, sirvió primero a Namjoon y después a SeokJin. Las cosas eran incomodas, no sabía qué hacer, ni que decir. Estaba tan asustado de la presencia se aquel hombre.

Namjoon se levantó de su silla — SeokJin desde ahora vas a servirme — Retomó su camino de vuelta — Mis sirvientes te atenderán y tú me atenderás a mí.

Sin un reclamo por parte de SeokJin, Namjoon salio del comedor.

¿Qué me pasara ahora? Pensó SeokJin.