Capítulo 1

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 POV ALFRED

Hoy debería ser el mejor día de mi vida, o al menos el inicio de mi nueva vida. Pero no puedo celebrarlo del todo, quiero sentarme en este momento, en salir cantar mi canción y que sea lo que sea, pero no puedo concentrarme del todo, no cuando...

Empieza la gala, uno a uno vamos cantando todos, cuando llega mi momento, me quito todo de la cabeza, solo quiero pensar en la música, que es lo que me hace feliz, lo que nunca me va a abandonar.

Cierro los ojos y en cuanto empieza a sonar las primeras notas los abro y me meto de lleno en la canción, en lo que me hace sentir la música y la disfruto sin importarme si será la última no, solo viviendo este momento.

Cuando acabo, vuelvo al sofá y no puedo evitar que nuestras miradas se unan haciendo que un escalofrío recorra todo mi cuerpo. Y entonces sucede, el jurado me da su veredicto, estoy dentro de la Academia y no puedo creérmelo.

Vuelvo a sentarme mientras el resto va pasando, y entonces le toca a ella, siento un hormigueo en el estómago cuando escucho que es lo que va a cantar. Cuando se sube no quiero ni mirarla, no quiero hacerlo porque me duele mucho hacerlo. Cierro los ojos, pero cuando empieza a cantar, su voz se mete dentro de mi haciéndome mucho daño, porque su voz siempre, pase lo que pase va a calar muy dentro de mi.

Cuando acaba, todo el mundo está aplaudiendo, no soy al único que le pasa eso cuando la oye cantar, pero cuando el jurado la pone en duda siento una dualidad dentro de mí. Por un lado, me alegro, no quiero estar dentro de una casa con ella, no podría soportarlo, pero, por otro lado, no entiendo como alguien puede poner en duda su voz, como alguien puede poner en duda su presencia, esa sensación que te entra cuando su voz entra dentro de tu cuerpo haciéndote perder todo el sentido. Así que me siento raro, por un lado, tranquilo, aunque todavía puede entrar, pero, por otro lado, me preguntó qué es lo que buscan en este programa si ella está en duda.

Cuando ya acabamos todos, cruzamos la pasarela los seguros y allí se quedan los que están en duda. Entonces son los profesores los que entran en acción.

Cuando los profesores le dicen que está dentro siento un nudo en el estómago. La veo levantarse sorprendida y cruzar la pasarela donde todos la reciben con un abrazo y yo cierro los ojos dándole la espalda a todo. ¿Iba a poder con todo esto? ¿No era mejor abandonar ahora directamente?

Mientras íbamos hacia la Academia, todos esos pensamientos iban rondándome la cabeza, no sabía que iba a pasar, pero tenía que hacer algo, tenía que pensar en algo.

Estoy en la Academia de Operación Triunfo, soy uno de los dieciséis elegidos y no estoy feliz, ha pasado muy poco tiempo, demasiado y poco y aún no he podido superarlo. Me da rabia, mucha rabia pero ¿Quién manda sobre el corazón? Ojala no la hubiera conocido, es lo que no puedo dejar de pensar pero en realidad...no me arrepiento de nada, no cuando lo que viví, al menos para mí fue una de las mejores cosas que me ha pasado en la vida.

Cierro los ojos saliendo a la pequeña terraza. No quería estar con el resto, en realidad no quería estar compartiendo habitación con ella y estando aquí eso es imposible. ¿Merece la pena aguantar esto? Si, si por todo lo que he luchado por mis sueños, si por todo lo que han luchado mis padres. Tengo que aguantar tengo que hacerlo.

-Alfred-escucho como me llaman y cuando me giro me encuentro con Roi.

-¿Si?

-Ven, vamos a hacernos una foto todos juntos-dice con una sonrisa. Yo asiento tomando aire y le sigo dentro y cuando lo hago casi tropiezo con alguien.

-Lo siento-escucho su voz y siento un hormigueo en el estomago mientras ambos nos miramos a los ojos, cuando lo hago, siento que vuelvo unos meses atrás cuando todo me parecía perfecto, pero entonces...

Nos volvemos a encontrarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora