Mi chica predilecta ©

TRES

Esa mañana Serena no se levantó de la cama, las náuseas y el dolor de cabeza se lo impedían.

Tras probar algún bocado y apenas lo tragara, lo volvía a echar en el baño. Era un ciclo sin fin, en el que comía todo lo que encontraba y al instante corría al baño y lo regurgitaba.

-Serena, levántate. No puedes internarte en esa cama toda la vida.

Le reclamaba Rei mientras jalonaba la manta que cubría a su amiga.

-Ya déjame en paz, Rei. -replicó con hastío cubriéndose por completo una vez más.

-¡Agg, Serena tonta! ¿No ves que estamos muy preocupadas por ti? ¡Levántate de una vez! -volvió a sermonear a su amiga tirando de la manta una vez más.

-¡No quiero! ¿No ves que estoy muriendo? ¡Darien ya no me ama y no quiero seguir viviendo! -lloriqueaba la chica de coletas mientras tiraba de la manta al mismo tiempo que su amiga.

-¡No digas tonterías, Serena! Eres una tonta, cabeza de chorlito.

-¡Nadie me comprende! Ya deja de molestar Rei.

Los gritos de Serena y Rei se oían por todo el departamento, incluso se colaban al pasillo dónde Haruka tenía el puño levantado a medio camino, preocupada por la batalla campal en la que se hallaba la chica de coletas con su némesis y amiga, con miedo golpeó la puerta con la fuerza suficiente para que la escucharan por encima de todo el alboroto.

-¡Haruka! ¡Que bueno que has venido! -la saludó efusivamente Mina jalándola dentro sin la más mínima sutileza.

-Me preocupa mucho cabeza de bombón ¿cómo está? -preguntó a pesar de sobreentender de que no estaba dispuesta a salir de la cama ni por toda la comida del mundo, como daba a entender con sus gritos.

-Es el primer día y ya no las soporto -se quejó Mina suspirando, Rei era muy dura con Serena y la rubia era una niña muy peleonera.

-Deben tenerle paciencia, ella es una niña muy sensible. Lo que Darien y Michiru le hicieron le ha dado muy duro, me preocupa que no pueda superarlo -la preocupación podía palparse en el tono de voz de Haruka, Mina se emocionó al notar lo que su aniñada amiga provocaba en esa atractiva chica.

-A ti, te han hecho lo mismo y estás entera. Me atrevería a decir que pareces más ligera -se aventuró a decir Mina de manera imprudente, causando un sonrojo inusual en la muchacha.

-¡Deja de ser tan inmadura, Serena! ¡Levántate de una maldita vez o juro que te jalare de esas estúpidas coletas! -vociferó Rei interrumpiendo a Mina en su campaña por averiguar lo que sucede a Haruka con Serena.

Serena seguía lloriqueando, ésta vez no se podía entender lo que decía, Rei cansada de lidiar con la niña inmadura y llorona que tenía postrada en la cama, salió de la habitación dando un portazo.

-¡No puedo creer que quiera dejarse morir por culpa del insensible de Darien! -se quejaba la chica de larga cabellera negra, suspirando se desplomó junto a Haruka y Mina quienes estaban sentadas en el sofá de cuatro piezas de color naranja.

-Es de suponer, siempre ha estado perdidamente enamorada de él, Rei. No seas tan dura con ella, ha pasado apenas un día de lo sucedido.

-Si la dejamos morir es peor ¿no lo crees, Haruka? -enfatizó Rei reparando en la presencia de la muchacha.

Hoy parecía ser el día en el que esas muchachas se habían puesto de acuerdo en sonrojarla, ¿o eran solo los nervios y la culpa que las palabras de Michiru sembraron en su interior? ¿Realmente ella se había enamorado de aquella chiquilla infantil?

-Tampoco creo que tu método sea efectivo. Eres demasiado dura con ella -respondió evadiendo sus miradas, repentinamente incómoda.- Ella está pasando por un momento muy difícil ¿no lo entiendes? No interesa si yo he decidido dejarme moler por el dolor o no, la salud de cabeza de bombón es lo único que me interesa ahora.

Ambas chicas se miraron un tanto apenadas por su comportamiento, Haruka tenia razón. La salud de Serena era lo primordial ahora.

Haruka se levantó del sofá un tanto irritada ¿porqué prestaban tanta atención a la preocupación que tenía por la chiquilla de coletas? Eran sus amigas y debían contenerla en éstos momentos tan duros.

El hilo de sus pensamientos se vieron interrumpidos, por el cuerpo de Serena atravesando veloz el pasillo de ida al baño. El hambre que tenía la había empujado a ir a regurgitar el vacío de su estómago, causándole dolor abdominal y ardor en la garganta.

Haruka se apresuró en llegar tras ella y al momento en que Serena se hincó en el water, tomó su cabellera entre sus manos para que no se ensuciara. Sintió todo el dolor que la chica estaba soportando en ese momento, le dolía ver como se lastimaba la garganta forzando su vacío estómago.

-Ya no lo soporto más, Haruka. Lo único que quiero es que el dolor se vaya -se lamentó la chica entre sus brazos. Haruka la acarició suavemente, sabía que hablaba del dolor que sentía en su corazón y ella lo comprendía. Se sentía morir viéndola sufrir de aquel modo, la impotencia de no ser capaz de repararle el corazón le destrozaba por dentro. Mucho más que la traición de Michiru.

De manera suave tomó a la chica en sus brazos y la llevó sin prisa de vuelta al dormitorio, la dejó en la cama y se recostó a su lado. La mantuvo envuelta entre sus brazos por unos minutos que le parecieron eternos, ahí estaba esa sensación única que le provocaba la cercanía de Serena.

Esa calidez en su interior, esas vibraciones que recorren por todo su cuerpo, esa exaltación en su corazón con cada mirada que le daba aquella chica atolondrada y loca.

Una sensación que no había experimentado antes... Se sentía plena.

-Gracias por todo, Haruka -susurró Serena más tranquila- has sido una gran amiga, a pesar de que seguro tú también sufres mucho.

Por alguna razón, que la llame amiga le dolió. ¿Acaso quería ser algo más para ella?

¡Aquí tienen el nuevo capítulo!

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*Haruka bebé 7u7 es un amors, es obvio que amas a Serena ❤ yo te doy todo mi amor 😍❤😄*

¡Nos leemos pronto!

Los quiere, Star ⭐