Restart of the soul ~VKOOK~PAUSADA

Capítulo 4: Flama de calor

 Luego de un tiempo llegó NamJoon al local donde se encontraban los chicos cenando, este acababa de salir de trabajar, su compañía estaba haciendo preparativos para las audiciones nacionales de ese año, y eso incluía primero corroborar la lista de inscripciones a esta, demasiado larga como para terminar incluso en una semana, pues era mundialmente reconocido que RMusic estaba entre las mejores de Corea y del mundo en sí mismo. Tae y Nam comenzaron a hablar de un sin fin de cosas que Jeon no comprendía, pero gracias a ellas pareciese que el alfa mayor se hubiera olvidado la charla que SeokJin dijo que había prometido dar. Pretendió escuchar mientras jugaba con la aceituna de su pizza seguramente ya fría y fijo la vista en su celular, la madrugada había llegado y ni siquiera se había dado cuenta.

-Chicos, lamento arruinar la diversión, pero se hace muy tarde y debería ir a casa a ver a Yoon- Las reacciones compartían lo mismo, tristeza, por parte de sus amigos quienes no estaban seguro si el muchacho se encontrase en casa en ese momento, temiendo por la decepción que sentiría Kook, y por parte de TaeHyung, por haber corroborado que la mordida no era por un juego de medianoche en algún bar producto de un descuido, si no de una pareja consolidada, pero no muy estable.

-A mí también se me hace tarde, estoy sumamente agotado por el viaje y mañana debería comenzar con los papeles por la mudanza- Habló el pelinegro- JungKook, tu y yo podríamos tomar un taxi juntos, no es para nada seguro andar solo por estas horas, y vivimos lo suficientemente cerca ¿Te parece?- Realmente tenía intenciones de pasar un rato a solas y hablar, pues en toda la comida no lo hizo. 

-Yo... Supongo que está bien, claro- no mentiría si dijese que quedarse son Kim le ponía nervioso, y menos si no ignoraba a su revoltoso lobo alegre.

 Pagaron su comida y llamaron a un taxi, y justo cuando Nam recordó la charla pendiente el claxon le salvó, aunque de igual manera no se rindió prometiendo ir a visitarle junto a Jin dentro de poco para tratar de ello. Subieron al vehículo despidiéndose y poco tardaron para perderles de vista. El silencio de igual manera no duró mucho.

-Oye JungKook, Hobi me contó que trabajas junto a el en la cafetería, ¿cómo está el lugar? no voy desde que partí hace unos 5 años-

-Bastante bien, las ventas han subido y la calidad es magnífica como siempre, estos días han estado hablando de hacer una re decoración, tal vez pintar las paredes y agregar algún que otro cuadro- Se notaba el entusiasmo al hablar de su querido trabajo.

-Tal vez dentro de un tiempo iré a ayudarles, realmente quiero pasar tiempo allí como en mi infancia- La mezcla de dulce nostalgia y alegría hacían del ambiente cómodo. Sonrieron tanto para sus adentros como para el otro de manera sincera. 

 Inconscientemente el alto se acerco suavemente, y por un acto reflejo, sin siquiera pensarlo, Kook recostó su cabeza sobre el hombro de este. No había ni pizca de arrepentimiento ni incomodidad sobre las acciones y cualquiera a su alrededor, en este caso el taxista, podía ver desde lejos que eran almas gemelas. 

  El aroma a libros viejos y café entraba por sus fosas nasales, tranquilizándolo y relajando sus tensados músculos -ni siquiera sabía que estaba así- dijo hacia sus adentros. La mano de contraria subía naturalmente sin que ninguno se diese cuenta hasta que comenzó un repiqueteo en la pequeña cintura donde se situaba amablemente. Sus cuerpos se acomodaron y descansaron por un momento, al momento de llegar la separación pareció dolorosa para su comodidad, despidiéndose de ella. Kook fue el primero en bajar al llegar a su destino, estuvo por pagar su parte del viaje, pero claro que el alfa haría caso omiso a ello.

-Yo invito, dado a que HoSeok pagó la cena me puedo dar el lujo de este pequeño detalle- No podía decir que no, no a aquella amabilidad y caballerosidad personificada, se dedicó a asentir y tratar de ocultar la rojez de sus mejillas entre la oscuridad de la noche. 

 Poco antes de salir escuchó al piel canela volver a hablar.

-Fue un gusto conocerte, ojalá podamos quedar seguido, conozco mucha gente pero con nadie me he sentido tan a gusto- Definitivamente alguien debería decirle a ese hombre los estragos que estaba causando en su pobre corazón.

-Pienso de igual manera, y quizá, ya sabes... podríamos salir a caminar juntos- Jamás se le había ocurrido una excusa tan estúpida para volver a verse con alguien, ni siquiera en su adolescencia cuando pretendía conocer a más gente para socializar (cosa que no funcionó), pero de igual manera su acompañante le sonrió encantado.

-Cuando quieras- Y con esas últimas palabras se dedicaron un adiós con la mirada, ambos sintiéndose fríos sin el calor del otro a su lado. El auto arrancó y terminó de entrar a las cuatro tormentosas paredes. Caminó a su cuarto encontrándolo vacío, a pesar de que para su cerebro aquello era obvio su corazón le afligió por el rayo de esperanza siendo apagado. Sería una noche más como un omega desamparado, pero una diferente con el conocimiento de la existencia que su nuevo hyung.

 Por otro lado, Tae estaba entrando a su departamento, su respiración ligeramente agitada.

 ¿Habré sido muy rápido al intentar quedar?, tal vez fui demasiado cortés, esperen, ¡¿No creerá de le coqueteé descaradamente?! ¡Oh no, pensará que soy un casanova que solo quiere usarlo!.

 De acuerdo, tal vez está exagerando un poco, o mucho. Recuerda esos dientes de conejo y le transmite paz, era una risa sincera, ¿no podría haber hecho algo mal entonces?. No entendía de donde salió aquel lado suyo, normalmente se mostraba gracioso y desestructurado a los recién conocidos, alguien relajado y de pocas preocupaciones (gran mentira), algo tenía ese pequeño que le hizo actuar de manera tan madura y a la vez amable, ni siquiera en el trabajo era así.

 Luego de acostarse en la cama de la que designo su cuarto, el sueño no llegó rápido a su sistema pero el imaginar las posibles situaciones donde se encontraba a Jeon "casualmente" causaron que el área racional de su cerebro se desactivada y permitiera experimentar a base de un bonito sueño aquellas escenas. El sol salió rápido a su parecer y con ello sonó su alarma, afortunadamente era fin de semana por lo que simplemente desayunó, se dio un baño y vistió casual, debía desempacar lo que ya tenía y esperar el camión con las cosas de la mudanza, después de todo lo que había en la casa era lo básico como la cama donde durmió y la pequeña mesa con su única silla que yacía en la cocina, y aquello lo iba a donar en cuanto llegaran sus cosas, pues no era de su gusto. Mientras tanto no pudo evitar preguntarse ¿qué haría JungKook ese día?.

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 El día no comenzó muy diferente a los demás, despertó sin YoonGi a su lado, en una casa carente de amor, y el frío a su alrededor, si embargo si se sintió de otra manera, una pequeña llama similar a la de una vela se instaló en su pecho, sentiendose feliz por ello. No había nada para hacer ese día, más que cuidar de las plantas que habitaban en su jardín, repasar ligeramente la casa y leer un poco no haría mal. En cuanto abrió aquel libro viejo que se veía interesante y llegó ese olor a su sistema no pudo evitar recordar la sonrisa cuadrada que le dedicaron la noche anterior. Esa que era suficiente como para hacerle olvidar que no veía a su alfa "legal" de hace ya 24 hs, que no le permitía pensar en su soledad. 

 Cuando una risita escapó de sus labios supo que si uno quería, todo podría ser tan fácil como lo ponían en los cuentos de hadas.

Tarde en actualizar pero estoy bastante inspirada para el próximo capítulo. ¡Se viene el desmadre muchachas!, ahre. Solo quiero destacar algo, Nam y Tae ya se conocían, en los próximos capítulos diré porque, solo quiero agregarle una pizca de intensidad porque el asunto sobre eso esta muy sobrio. Esta vez me concentré mucho en esta escena porque es para conocer la mente de cada uno, se que solo trata de una noche, ni siquiera abarca un día completo, pero que le wa a hacer ¬(*~*), de igual manera el próximo será mejor. Creo que no tengo nada más para agregar gg.

~Nos vemos~