Mi mejor decisión.Marco Asensio.

Capitulo 20-No quiero detalles, gracias.

Hoy he comido con Silvia cuando salimos del trabajo, las dos íbamos a estar solas así que comimos juntas.
Acabo de entrar por la puerta de mi casa, no hay restos de mi hermano, hoy tenían doble sesión de entrenamiento.
Subo mi maletin a mi habitación y me pongo una sudadera con unas mallas, estoy harta de tanto traje y camisa, menos mal que no llevo corbata.
Me hago un moño y bajo a la cocina, está Mercedes limpiando los platos.

-Buenas Carla, ¿Como te ha ido hoy bonita?

-Bien Mercedes-contesto sonriendo dándole un abrazo-¿Sabes algo de mi hermano y mi sobrino?

-El príncipe de la casa está esta semana en casa de su madre-responde secando los platos-Y el rey viene sobre las 19:00.

-Vale gracias.

-¿Qué os ha pasado Carla?-pregunta mirándome preocupada-Tu hermano no quiso cenar nada ayer y ha pasado mala noche, lo sé porque me llamo preguntándome cómo funciona la lavadora a las 04:00 de la mañana.

-Que le mentí Mercedes¿Para que quería usar la lavadora a esa hora?

-Pues al parecer se quedó hasta tarde en el gimnasio de casa y quería lavar la ropa para ponérsela hoy.

-¿Se quedó hasta tarde en el gimnasio?-pregunto abriendo los ojos y asiente-Joder, la he liado mucho.

-¿Y eso?

-Mi hermano solo se queda tanto tiempo en el gimnasio cuando tiene un partido importante al día siguiente y cuando está muy rayado.

-Pues cuando vuelva habla con él, esta mañana estaba un poco decaído.

-Vale Mercedes, muchas gracias por tus consejos-respondo dándole un abrazo.

-Nada bonita, para mí sois como dos hijos, bueno tres contando con el príncipe.

Salgo de la cocina y me pongo a jugar a la play un rato, pero no al fifa ni loca juego a eso, me pongo a jugar al Assassin's Creed II, me encanta este juego, ya me lo he pasado como cuatro veces y nunca me canso.Al estar ambientado en Florencia me acuerdo de mi italiana favorita Alice y de Rizzo.Al final no era tan mala persona como creía.
Ahora que lo pienso tengo que pedir el lunes libre, este fin de semana tienen la semifinal de la Champions, juegan contra el Bayern en Alemania y Marco me pidió el otro día que fuera con él.No sé si a Isco le va a hacer mucha gracia que vaya, pero bueno...
Se escucha la puerta principal abrirse y aparece Isco sudado con la ropa de entrenamiento.Pauso la partida y me giro en el sofá para mirarle mejor.
Me cuesta un poco moverme, se me han quedado las piernas dormidas.
Tira su mochila por ahí y se acerca al sofá.

-Buenas Carls-dice apenado.

-Buenas Big brother.

-Quiero hablar contigo-dice sentándose a mi lado en el sofá-¿En serio otra vez este juego?

-¿Y que quieres que le haga?Me encanta-respondo sonriendo dejando el mando encima de la mesa.

-Bueno a lo que iba-dice y se pone serio-He estado pensándolo mucho sobre lo que ha pasado, pero mucho mucho a nivel que ayer me hice 9 kilómetros en la cinta.

-Isco, al tema.

-Claro eso al tema-dice sonriendo nervioso-Me he dado cuenta que es una tontería lo que ha pasado entre nosotros dos, he pensado en dejarlo de lado y volver a estar como siempre.

-Me parece estupendo Isco-contesto sonriendo-Perdóname por haberte mentido, no quería que te preocuparas por mí.

-Olvidemoslo Carls-dice sonriendo-¿Donde está mi abrazo?
Suelto una risa y me acerco a abrazarle, lo necesitaba, es mi mayor apoyo y quién siempre me ha estado ayudando en todo desde que tengo uso de razón, daría mi vida por él.

-Dale las gracias a mi pisha/cuñado/tu rollete, fue él quien me animó a hablar contigo.

-Es que es monísimo -digo sonriendo como una tonta y mi hermano suelta una carcajada-¿Qué pasa?

-Te digo yo que en la cama no es monísimo Carls.

-¡Isco!-grito poniéndome roja y dándole un golpe-¿Y tú cómo sabes eso?

-Pues porque una vez jugando al yo nunca me enteré de ciertas cositas sobre él.

-No quiero saber nada sobre el tema-respondo cogiendo el mando y reanudando la partida.

-No, si el tema te lo va a dar él a ti.

-¡ISCO!

-Y no quiero saber detalles.
Vuelvo a parar la partida y me tiro encima suya dándole golpes.

Pasa Mercedes por el salón y al vernos se le pone una sonrisa tierna en la cara, se alegra que volvamos a ser los pesados de antes.Tiene razón, nos cuida como si fuéramos sus hijos y siempre está dándonos consejos sobre que hacer y que no.Tiene una hija de 29 años que trabaja en Londres en una peluquería.Mercedes no lo ha pasado muy bien en su vida, su marido se murió de un ataque al corazón cuando su hija tenía 4 años, pasó por un cáncer de mama antes de quedarse embarazada y le dijeron que a lo mejor perdía a su hija, pero menos mal que eso no fue así.Ahora vive en una casa con una prima suya y una parte del dinero que gana se lo manda a su hija para ayudarla a pagar las cosas.

Estoy sentada en el escritorio de mi habitación liada con el plano de la casa, hay cosas que no cuadran.Siento que entran a mi habitación y se ponen detrás mía.

-Hola piecitas-dice Marco dándome un beso en la mejilla-¿Que estás haciendo guapa?

-Hola guapo, un plano de una casa, pero hay algo que no me gusta.

-¿El que?-me levanta de la silla y se sienta él conmigo encima.

-Esa habitacion-digo señalándole la habitación matrimonial-No hay suficiente espacio para una cama, dos mesitas de noche, un espejo, una cómoda, un escritorio, dos armarios, el mueble de la tele,...

-Cariño, no hace falta tanto mueble-dice Marco riendo-Solo es un proyecto, con que pongas la cama y un armario vale.

-Pero es que entonces no tienen nada-digo riendo y me mira divertido-Vale ya lo pillo, gracias.

-De nada-contesta sonriendo y me da un beso en la mejilla- hoy estás muy guapa.

-Si, guapísima con el moño en la cabeza-digo apagando el ordenador y girandome para estar cara a cara.

-Pero a mi me gusta el moño.
Me pongo de pie y lo cojo de la mano para sentarnos en mi cama, me siento en sus piernas y pongo las mías alrededor quedando cara a cara.Me mira cariñoso y me da un beso, un beso largo que va subiendo de tono poco a poco.

-Marco para-digo seria y se separa de mi cuello.

-¿Qué te pasa?-pregunta preocupado.

-Que no me siento ya sabes..."preparada".

-Bueno, no te preocupes, no pasa nada.

-Lo siento-digo cabizbaja.

-Hey Carly-dice subiéndome la cabeza y dándome un beso-Que me da igual.

-¿Seguro?

-Claro que si, no me importa esperar el tiempo necesario hasta que te sientes bien-contesta sonriendo.

-Un pajarito me ha contado que te vuelves salvaje dándole al tema-digo riendo y se pone rojo.

-Un día mato a tu hermano-contesta riendo sonrojado-Es un bocazas.

-Lo sé Marquito, lo sé.

-¿A qué no te ha contado cuando fuimos a jugar a Polonia y fuimos a la discoteca y me lo vi en la habitación con una polaca mientras que es...?

-No quiero detalles gracias, te recuerdo que sigue siendo mi hermano-le interrumpo y me mira sonriendo cariñoso.

-Y no sé cómo lo sois, porque él es un orco y tú una ninfa.

-Eso es porque me miras con buenos ojos-respondo riendo y me da un beso.

-Con unos ojos de loco Carly, así es como me tienes y nunca me cansaré de decirlo, que me tienes loquito Carla Alarcón.