Pretty you 》HoZi/SoonHoon《

Especial: Meanie disaster.

Wonwoo estaba por de más nervioso, Mingyu había estado especialmente misterioso y sugerente aquella mañana, cosa que lo inquietaba bastante. Si, su comportamiento había cambiado desde aquella vez que dijo que lo conquistaría, comenzó a tener pequeños detalles con él, los cuales para los demás quizás pasaban desapercibidos pero él conocía muy bien al castaño y sabía lo difícil que era hacer aquello.

Es que Mingyu podía verse alto, atractivo, intimidante y... ¿ya mencionamos atractivo? Pero en cosas así no era más que un adolescente asustado de fracasar con su primer amor. Y Wonwoo lo sabía muy bien. Sabía lo difícil que era el hecho de acercarse y besar su mejilla cuando llegaba y se despedía, el obsequiarle un dulce de vez en cuando y ni hablar de cuando quería hacerle cumplidos, se ponía completamente rojo y la voz le temblaba pero el pelinegro simplemente adorable.

¿Cómo sería cuando lo besara? ¿O siquiera cuando tomara su mano? ¿Se desmayaría de los nervios? Rió tan sólo imaginando esa situación mientras bajaba los escalones hacia la acera dando por terminada su jornada escolar. Todo normal excepto que alguien pasó corriendo por su lado y tomó su mano obligándolo a correr también.

-¿Mingyu, que pasa?- alcanzó a preguntar entre jadeos. La actividad física no era su fuerte.

-Sólo sígueme.- respondió el otro muchacho sin detenerse. Wonwoo estaba cansado y con suerte habían corrido dos calles. Para su suerte, a la tercera el castaño comenzó a andar más lento.- Te advierto que no es la gran cosa y tuve que hacerlo de esta manera o me acobardaría.

-¿Hacer qué? ¿De qué estás hablando? No entiendo nada Mingyu.- si había algo que particularmente molestaba al pelinegro era el no entender las situaciones en las que se encontraba envuelto y aunque ésta involucraba al castaño que le roba el sueño, no podía evitar que el malhumor comenzara a invadirlo.

-No te enojes, sólo espero que te guste.- respondió el más alto con cierto nerviosismo. Unos minutos después se encontraban ingresando a la heladería favorita del pelinegro.

-¿Qué hacemos aquí?- cuestionó con un poco de emoción y confusión.

-Es una cita.- respondió el castaño con una brillante sonrisa.- Jeon Wonwoo bienvenido a nuestra cita.

-Kim Mingyu, ¿me secuestraste para traerme a una cita?- volvió a preguntar con incredulidad y una enorme sonrisa. El más alto sólo se encogió de hombros. El mayor rió negando con la cabeza y tomando su mano para elegir su asiento favorito.

Él estaba en una cita en su lugar favorito en el mundo con su primer amor, se sentía completamente feliz. Nada podía fallarle ahora.

¿O sí?

...

Todo iba de maravilla, bromeaban y se reían compartiendo anécdotas pasadas, quizás hasta un tanto vergonzosas y confesándose defectos que ninguno de los dos creía que fueran defectos en realidad. La adoración que tenían por el otro era tan grande que sus ojos brillaban con sólo escucharse hablar.

-Mingyu...- comenzó a hablar el pelinegro unos minutos después de haberse quedado perdido en su mundo. 

-Si, dime.- el castaño le dedicó toda su atención. 

-Sabes creo que, yo realmente siento...- y no, Wonwoo no confesaría sus sentimientos ese día. 

-¿Chaeyeon?- habló de pronto el castaño desviando su atención hacia una castaña que se encontraba en la fila para hacer su pedido. 

-¡Kim Mingyu!- lo saludó con euforia dejando a su acompañante en la fila y acercándose a abrazar al castaño quien no tardó en levantarse de su lugar para ir a su encuentro.