Sex Slaves [SIN EDITAR]

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Kelsey P.O.V. 

—¿Cómo te sientes nena?

—¿Cómo debería sentirme, Hanna?

—Diste con la persona incorrecta para decirte cómo sentirte, mi vida amorosa casi es nula, creo que ni siquiera sé a este punto si puedo denominarla si quiera vida amorosa.

—Estoy destrozada. Lo extraño y cada noche cierro mis ojos y lo recuerdo sus palabras pero peor aún la forma tan cínica y frívola en que las dijo: "Te diría que tú también pero por lo visto ya te tocará vivirlo en los próximos nueves meses"...

—¡Ay cariño! Ojalá pudiera darte mi corazón y aplacar tu dolor pero con temas del amor sólo nos queda aceptar lo que el destinó escogió.

—Sabias palabras, ¿Cómo se te ha ocurrido algo tan poético a ti?

La risotada aguda me caló el tímpano— Anda, que la he leído por mí ¿De veras puedes imaginar a mí creando algo tan inspirador? Que va.

Tienes un punto ahí, oye tengo que colgarte que estoy por llegar.

—¿Irás a los fittings hoy, verdad?

—Sí, Hanna. Por milésima vez, sí iré a los fittings. Hubiese llegado hace quince minutos si no fuese por cada maldito semáforo que me ha obstaculizado la llegada puntual.

—Ya. Entonces te espero que yo me encuentro entrando. Hasta luego nena.

—Adiós Hann.

Dicho esto la llamada terminó, el pequeño y repitente sonido proveniente del móvil me lo confirmaba.

Decidí encender la radio mientras continuaba conduciendo hasta la oficina de Victoria Secret donde hoy tendríamos los fittings antes del desfile.

Una voz femenina comenzó a inundar el carro con una voz maravillosamente hermosa pero sonaba rota y llena de tristeza. Como si las lágrimas estuviesen contenidas a medio camino a punto de hacer su aparición estelar.

"Cuando estaba sobre... cuando estaba sobre el escenario
y estaba pensando en...
Me sentía como que aunque le conocía, y sabía que...
conocía su corazón,
y sabía que no lo haría para hacerme daño...
pero no me di cuenta de que me sentía tan confiada,
sintiéndome tan bien conmigo misma,
y entonces simplemente se hizo añicos por una sola cosa,
por algo tan estúpido...
pero entonces tú me hiciste sentir como una loca,
me hiciste sentir como que era culpa mía, me dolía..."

Aquellas palabras me atravesaron el alma. Sentí que la cantante estaba contando en todas las radios del mundo mi situación con Justin. Que le relataba aquella cruel despedida hace una semana y media atrás.

"Volví a ver tu rostro, sentí que de alguna manera volviste a mí. Tu presencia parecía demasiado realista como para aceptar que sólo fue por medio de una pesadilla. Me pregunto, si pudieras tomar mi mano y detener el tiempo ¿Lo harías?... Porque los días pasan pero aún sigo ebria de su presencia.

Nuestras viejas conversaciones cobran vida en la madrugada para recordarme cada error que decidiste no perdonarme. Tu indiferencia hiela mi corazón, tu mirada quema mi piel y el desasosiego por algo de tu calor es infinito.

¿Tu alma aún sueña con abrazarse a la libertad?

Dejé mis sentimientos desvestidos en tus manos sólo para verlos arder una vez más en ellas.