Sex Slaves [SIN EDITAR]

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Kelsey P. O.V

Gran parte de la velada nos hemos quedado completamente ensimismados uno con el otro, como si fuésemos un solo cuerpo. No importaba si la música era rápido o lenta siempre llevábamos un ritmo suave y completamente sensual.

Mis ojos permanecían cerrados desde hace unos minutos disfrutando de la cercanía y el calor de Justin pero se abrieron en un asalto, puesto que mi compañero de baile se apartó.

Frente a mí la Barbie de la falsedad se extendía con una enorme y sobradora sonrisa mientras un elegante, atractivo como la mierda y déjame decirte que con unos grandes y profundos ojos azules con grises la sostenía por su cintura.

No pude evitar contemplar al atractivo moreno mientras cruzaba algunas palabras con Justin.

A mi pensar le llevaba algo así como cinco u ocho centímetros a Justin, su espalda se podía apreciar que concurría al gimnasio varias horas durante la semana a través de su camisa, la barba le cubría gran parte de su rostro pero eran increíblemente atrayentes aquellos ojos misteriosos que poseía.

Me había realmente cautivado el atractivo de este hombre, y Justin no se queda atrás pero un aura de "peligroso e intenso" lo rodeaba haciéndote que no puedas quedar impregnada en su figura.

Me quité de aquél transe en el momento que Justin mencionó mi nombre y no había tomado consciencia que estaba con la mirada fijado puesta en peligroso.

—Nena, te quiero presentar a alguien muy importante en esta nueva etapa de Bieber's Enterprises —acercó sus labios dejando un suave beso en mi sien— Él es Christian Robinson, es nuestro socio mayoritario de acciones.

Peligroso, quien su nombre es Christian al parecer, tomó mi mano dejando un sensual y suave beso durante el tiempo que sus ojos no abandonaron los míos jamás.

—Espero que no te importe si robo a tu belleza por una canción, ¿Verdad Bieber?

Justin me dedicó una mirada en la que pude leer "no vayas a cagarla", así que los nervios inundaron mi interior— Por supuesto, estoy seguro que Kelsey no tendrá problema alguno ¿verdad cariño?

Tragué con algo de dificultad— Será un placer.

Peligroso me tomó la cintura, nos guió y comenzamos a danzar lentamente. Por el rabillo del ojo noté como Rose, quien había quedado dibujada en nuestra conversación actualmente se encontraba danzando con Justin. Cómo quisiera eliminarle ese rostro arrogante que ahora la inundada de una sola bofetada.

No sé en qué momento sucedió pero me vi obligada a salir de mi espiral de odio hacia Rose ya que peligroso se encontraba a milímetros de mi rostro y su mano había descendido de mi cintura para encontrarse al borde de mi espalda baja y mi trasero.

Intenté zafarme de su agarre disimuladamente pero lo único que logré es adjuntarlo aún más a mí si eso era posible. Podía notar su respiración en mi cuello.

—Señorita, permítame la osadía pero se es que acaso usted es una diosa griega.

Esto se estaba yendo completamente de las manos y no podía despegarme a este hombre como tampoco golpearlo en las pelotas porque significaba un gran dineral para Justin. No quería hundirle más su empresa de lo que había hecho.

—Creo que sería mejor si regresamos junto a Justin y puede volver con su pareja.

Chasqueó con su lengua y conectó la mirada penetrante con la mía— ¿Acaso se encuentra disconforme? Esperemos a que termine esta pieza y pronto la dejaré con Bieber— noté el tono agrio que utilizó al mencionar a Justin.