Isla Perdida

1.7K 32 0
                                    

Madrid, Septiembre de 2029

Por fin llegara el día en el que Luís y yo nos ibamos de viaje. Ese día ya habiamos dormido juntos en mi casa porque nos levantabamos a las 5:00h para coger el avión. Desayunamos, nos duchamos, vestimos y terminamos de hacer las maletas.
A las 6 menos cuarto estabamos ya rumbo al aeropuerto en el taxi.
Cuando llegamos teniamos que esperar 45 minutos para volar. Fuimos a tomar algo a la cafetería y yo aproveché para ir a mear.
- Vigila que no haya paparazzis que ya nos pillan - le dije a Luís entre risas mientras me iba.
Tomamos un café rápido y montamos en el avión.
En una hora y algo nos pasó rápido el vuelo.

Fuerteventura, Septiembre de 2029

Aterrizamos en Fuerteventura a las 8 y algo por lo que nos fuimos derechos al hotel en otro taxi a dejar todo y dormir otro poco más.
Llegamos a la recepción, firmamos y subimos.
Era una habitación muy bonita: cama de matrimonio a lo rupestre con un baño enorme que incluía bañera con spa. Además teniamos una terraza con vistas a la playa de la isla. El lugar era muy escondido, una zona turística muy poco rebordada y con poca masa de gente. Era como una isla perdida.

- ¡Qué chulada! - dije nada más salir al balcón

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

- ¡Qué chulada! - dije nada más salir al balcón.
- Vamos a disfrutar como dos enanos estos siete días- me respondió Luís agarrándome por la cintura.
Deshicimos las cosas y nos acostamos a dormir un rato. A las 12h nos sonó la alarma y despertamos.
- Buenos días reina - dijo Luís besando mis labios.
- Buenos días - respondí.
Nos duchamos y bajamos al restaurante a desayunar.
- ¡Qué hambre tengo! - exclamé al ver tanta comida.
Luís ya se estaba sirviendo.

Después fuimos a dar un paseo por la playa

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Después fuimos a dar un paseo por la playa. Lo bueno de aquel lugar era que había muy poca gente de España ya que era un lugar habitado por turistas, muy poca gente era horiunda de allí, así que pocas personas, por no decir ninguna, nos reconocerían.
Llegamos a una especie de cala metida dentro del mar. Había que escalar grandes piedras para poder acceder a ella.
- ¡Qué vistas más bonitas! - exclamé subida a una roca.
Desde allí veíamos solo mar abierto.
- ¡Qué paz y tranquilidad! - me dijo Luís.

Estuvimos allí un buen rato observando aquel paisaje maravilloso

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Estuvimos allí un buen rato observando aquel paisaje maravilloso. Como hacía buen día habiamos decidido llevar bocatas para comer por ahí y así no perdiamos tiempo regresando al hotel.
La tarde la pasamos en la playa, nos bañamos, nos mojamos. Transcurrió entre besos y caricias en aquel maravilloso lugar donde nadie podía vernos.
Cuando empezó a atardecer me cogiera el frío, por lo que decidimos marcharnos a cenar al hotel.
Nos duchamos en nuestra habitación y bajamos al buffet.
- Madre mía voy a volver a Madrid con unos cuantos kilos de más... menos mal que ya terminé la gira - dije entre risas.
- ¿Te apetece dar un paseo por el puerto y te invito a un helado? - me dijo Luís.
- ¿A que plan te voy a decir yo que no? - dije para contraatacarle.
Nos fuimos a dar un paseo. Era la típica noche de verano con calor que corría un airecillo fresco de vez en cuando.
Al llegar al mirador nos paramos a divisar las estrellas.
- ¿Sabes? - le dije ,- tengo la sensación de que vuelvo a ser muy feliz. Que tengo todo lo que necesito. Me das esa estabilidad que no tenía.
Luís me abrazó por detrás y me dió un beso de esos que durán minutos.
Cuando nos empezaba a coger el frío nos fuimos al hotel.
- ¿Sabes? Estoy agotada... no tengo fuerzas para nada... - dije tirándome encima de la cama.
- Si necesitas ayuda para ponerte el pijama aquí tienes un ayudante - me respondió.
Se tiró encima mía y empezamos a sacarnos la ropa con cuidad. Nos besabamos cada espacio de nuestros cuerpos.
- Quiero formar una familia contigo - le dije al oído.
Nuestros cuerpos se movían en forma de vaivén y yo gritaba de placer.
Terminamos casi a la vez. Esa noche cayeron tres seguidos.
- Pues no estabas muy cansada- me dijo Luís entre risas nada más terminar.
- Para esto nunca lo estaré- respondí con risas.
Nos quedamos abrazados un buen rato en la cama.
- Hace un mes aprox que dejé de tomar la pastilla. Creo que con 29 y 39 años y más de medio año de relación pueden ir siendo horas de formar nuestra propia familia.
- Esto ya lo tenemos muy hablado y sabes que yo estoy deseando formar esa familia, y si es contigo más. Tenemos el pasado pisado y estamos muy bien ahora.
Nos besamos y poco a poco entramos en un sueño profundo.
Los siguientes días fueron parecidos. Era un sitio muy vacío por lo que los planes no iban más allá de playa, escondites de acantilados, piscina del hotel, y paseos nocturnos al lado del mar. Basicamente a eso ibamos, a desconectar y a aprovechar el tiempo que teniamos para nosotros dos solos y recuperar todo lo perdido.
Las noches se basaban en sexo. En nuestros planes estaba formar una familia y estabamos manos a la obra.
El último día aproveché para llamar a mis padres para contarles que bien estaba y a Olga.
- ¿Que tal mi niña? - me dijo mi madre.
- Esto es maravilloso, estoy disfrutando como una enana. Estamos genial. - respondí.
- Me alegro mucho cielo, espero que vengáis perfectos y con muchas cosas que contar- comentó.
- Por supuesto - le respondí. ,- dale besos al papa también. Mañana volvemos a Madrid ya. - concluí.
- Cuídate hija, besos - me dijo.
Tenía la sensación de quererme quedar a vivir en ese lugar con Luís de por vida.
La última noche la pasamos en el spa de la terraza del hotel. Hicimos una cena privada y nos relajamos en aquella maravilla de bañera con dos copas de champán. Allí estabamos los dos metidos en el agua con espuma.
- Quiero hacer estos viajes contigo más a menudo - le dije.
- Haremos muchísimos más, no lo dudes - me respondió.
Y entre agua, champán, espuma y el anochecer nos quedamos allí observando las estrellas en aquel rinconcito del mundo.

¡Hola de nuevo! Os dejo la siguiente parte de la novela. Aquí os cuento todo el viaje a Isla Perdida que tenían planeado. Los planes de formar una familia van para adelante. ¿Creéis que pronto vendrá un baby aiteda? ¡Os leo! 😘

Con la miel en los labiosWhere stories live. Discover now