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Capítulos finales
Despedida

—Eso significa que el reloj lo tiene aquí.- concluye Caleruega

Los cuatro caminamos al gimnasio, donde sería el baile. La música ya resuena y el lugar está casi lleno.

—Te ves muy hermosa, muñeca.- me halaga Polo- Tambien tú, Carla.

—Gracias, ambos se ven muy guapos.- el rubio sonríe e intenta despeinarme pero le doy un manazo.-Mi cabello no, idiota.

Se ríe y se aleja de nosotros.

—Iré a bailar, ¿vienes Tess?- Carla pestañea coquetamente

Asiento, ella sujeta mi mano y me lleva al escenario.

—Pense que estabas enojada conmigo.- levanto mi ceja y me muevo al ritmo

—Solo estuve pensando, puedes estar con Polo, si quieres.- se pega más a mi- Pero no voy a permitir que te aparte de mi.

—Tienes a Christian.- el mencionado está junto a Ander - No puedes ser tan egoísta

—Tenemos a Christian.- corrige sonriendo- No me había dado cuenta hasta ahora, cuando chicas me aleje porque sentía algo y sabía sobre tu enamoramiento por Polo y aún así decidí tenerlo yo, creía que era porque tenías el amor y atención de todos y quería algo que tú no tuvieras, pero no lo que quería era tu atención, me di cuenta de eso hasta que nos besamos.- sus brazos pasan por mis hombros- Nunca te vi como lo hago ahora.

—Carla, solo me confundes más.- niega sonriendo- ¿No puede ser como antes?¿los cuatro?

—Ya veremos.- deja un pico en mis labios y veo como mueve su mano atrayendo al moreno.

—Hola, guapas.- pasa su brazo por mi cintura- ¿Ya está todo arreglado?

—Casi todo.- sonríe Carla- ¿Sabes forzar la cerradura de una taquilla?

—¿Y yo por que iba a saber forzar una cerradura?-le damos una mirada burlona- A ver, de saber uno sabe de  todo. Que la escuela de la vida es lo que tiene.

—Polo tiene unas fotos mías en su móvil. -arqueo una de mis cejas - Y tengo miedo que las suba a internet. Con lo resentido que está, le veo capaz.

—Antes me lo como a hostias.

—No, no, ni me lo toques.- pellizco su mejilla

—¿Podrías conseguirme su mochila?- me rio por lo manipuladora que es- Esta en la 134, por favor.

—Vale, veré que puedo hacer.-Caleruega lo besa sin importarle que mi cuerpo esté en medio  

Mis ojos caen en un serio Polo, le sonrío guiñando mi ojo izquierdo.
El moreno se va casi corriendo, la ojiverde aplaude sujetando mis manos para bailar, estuvimos así unos minutos hasta que una mujer castaña nos ordena bajar del escenario pues empezara con el típico discurso.

—Para uno de los estudiantes de penúltimo año.- la mujer habla con asiento gringo- Este trofeo no solo otorga la satisfacción de un trabajo bien hecho, sino también una beca para estudiar en nuestro instituto.

—blablabla.- hago reír al rizado que está a mi lado

—Desde optar a un college en la universidad Ivy league.- suspiro recargándome en el brazo de Ander- Y el ganador o ganadora es...Marina Nunier.

Mis ojos se abren con asombro y la busco, la pelirroja desorientada camina entre los estudiantes que aplauden hasta llegar al escenario.

—Hola, bueno, muchas gracias por el premio, pero lo merece más otra persona.- habla ojeando el lugar con sus ojos- Yo la verdad no tengo mucho de lo que estar orgullosa este año. Así que quería aprovechar para pedir perdón. Perdón por todo el daño que haya podido causar. - se expresa con seriedad- Por decepcionar a las personas que más quiero. Y a la que me ha hecho sentir mucho en poco tiempo. Intente pararlo todo.- el lugar está en completo silencio- Intente...ser una buena hija, una buena hermana, una buena amiga.- mis ojos pican- intento estar a la altura de tus sentimientos, Samuel.

Dice unas cuantas palabras más hacia el nombrado terminando su discurso y baja del escenario para posteriormente salir del gimnasio.

Corro detrás de ella, encontrándomela en su casillero.

—¿Te vas a ir?- se sobresalta dejando caer el reloj- ¿Así sin más?¿sin despedirte?

—Yo..yo tengo que hacerlo.- solloza recibiendo el objeto- Os amo y estoy cansada de haceros daño

—Nosotros también te hemos hecho daño, y me arrepiento tanto.- me abraza llorando- Por favor, no te vayas.

—Es mejor asi, todos me odian aquí.- acaricio su espalda- Y razones tienen, a todos ellos les he dado razones, he sido una pésima persona.

—Todos cometemos errores, no somos perfectos.

—Lo sé, pero me he pasado.- solloza sorbiendo por su nariz- Mis malas desiciones son las que terminan perjudicando a todos.

—Solo regresa el reloj y todo se va a solucionad, lo prometo.- se separa abruptamente

—¿Solo viniste por eso?- limpia sus lagrimas molesta

—No, pero todos los putos problemas llegaron cuando robaste el reloj.- señalo frustrada- Todas las mentiras, las peleas y los malos actos.

—Me voy a ir, pagan y les regresamos el reloj.- toma decidida su mochila- No quiero irme enojada contigo, por favor, solo cállate y abrázame.

—Siempre serás mi mejor amiga, Marina.

Nos fundimos en otro abrazo, transmitiendo nuestro amor, el amor que cosechamos desde que éramos solo dos pequeñas niñas jugando a las muñecas. Llore, en verdad que lo hice, sabía que esa sería nuestra despedida, se sentía como una por más que mi cabeza se encargaba de decirme qué tal vez ella cambiaría de opinión y se quedaría, mi corazón sabía que sería la última vez en tenerla entre mis brazos. Y aún que no quise y me dolió el alma al hacerlo, la deje ir.

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Las tkm a tod@s los que le dan amorsh a esta fic

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