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Capítulo final

Oportunidad.

—No quiero ir.- murmuro abrazando el cuerpo de mi hermana- Siento que es muy hipócrita de mi parte.

—Tenemos que ir.- exclama suave peinando mi cabello- Si no, levantaríamos sospechas.

—¿Están listas?- Valerio entra a mi habitación- Estrellita, será bueno despedirte de él.

No respondo, mi hermano sostiene mi mano y me lleva hasta el auto de Lu. El camino es tan corto que no me deja pensar como le daré el pésame a sus madres sin derrumbar y decir la verdad.

Suspiro y los tres caminamos hasta Begoña y Andrea, los nervios me invaden al igual que la culpa. Mis hermanos les dan unas palabras, las cuales no escuche.

—Lo siento.- digo apenas- Lo siento mucho.

Las dos mujeres me abrazan y es el detonante de mis lagrimas. Me separo, me despido y camino hasta su lápida. Mi respiración se atasca en mi garganta y siento mis piernas debilitarse.

—Wow, justo a tiempo.- susurra sobre mi oído, sosteniéndome de mi caída- Tranquila, muñequita.

Me giro para abrazarlo con fuerza, Ander deja varios besos en mi cabeza mientras murmura palabras de aliento y acaricia mi espalda. Camina sin soltarme por unos segundos, hasta que se sienta y me hace sentarme sobre él.

—Hola.- murmuro Guzmán, junto a nosotros.

Me bajo del regazo de mi novio para posarme entre ellos, entrelazo mis dedos de mi mano derecha con los del rubio y con mi mano izquierda la de Ander.

—Lo siento, yo no quería.- sollozo con mis ojos fijos en "Leopoldo Benavent Villada"-Les he quitado a su amigo, lo siento, lo siento, lo siento.

—Fue un accidente.- Nunier besa el dorso de mi mano- Tu no sabias que Valerio tenía la botella, no fue tu culpa.

El silencio nos invade por unos minutos, a lo lejos puedo ver a Christian y Valerio charlar con Teodoro, Carla los había contratado para su negocio familiar. Guzmán ríe levemente y lo veo sin entender.

—Recuerdo que Polo estaba enamorado de ti.- sonríe con nostalgia- Pero yo me encargué de alejarlo.

—Alejarnos.- recalca Ander riendo- Pero a mí me valió una mierda.

Suspiro profundamente, aparto la mirada de Carla comiéndole la cara a Polo.

—Eh, deja de sufrir.- Marina codea mi costado- Hay un montón de chavales coladitos por ti.

—Pensé que podría gustarle, se porta dulce conmigo y es tan atento.- formo un puchero- Pero después está besuqueándose con Carla. ¿Es por qué sus bubies son más grandes que las mías?

—Ya nos crecerán a nosotras.- se burla- Yo creo que le gustas, pero ya sabes, Carla siempre consigue lo que quiere.


—Estaba en mi faceta de hermano sobreprotector.- levanta sus hombros- "Es algo enfermo, siempre la vimos como una hermana", le dije cuando me lo confesó.

—Y como quiera termino follandosela.- se burla mi novio- Suertudo de mierda.

—Tal vez si no lo hubiera detenido, todo hubiera sido diferente.- deja su cabeza en mi hombro- Tal vez Marina y él estarían aquí.

—Y yo estaría en depresión por ver al amor de mi vida con mi mejor amigo.- imita a Guz y coloca su cabeza en mi otro hombro- Pero lo soportaría, por verte feliz.

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